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El momento cómico de un programa de la televisión francesa terminó siendo un acto repudiado por muchas mujeres que han alzado la voz para rechazar el comportamiento de un periodista.
Jean-Michel Maire estaba en el escenario del programa «Les 35 heures de Baba» con la actriz Soraya Riffi, recreando la escena del robo que vivió Kim Kardashian en París el pasado 3 de octubre.
En un momento, Maire le pide un beso a Riffi, quien voltea la cara en señal de rechazo, pero el hombre aprovechó que ella estaba mirando hacia el otro ladopara besar uno de sus senos.
«Estaba sorprendida y conmocionada. No vi que el gesto de Jean-Michel Maire fuera muy profesional. Sabía que mi familia me miraba. No sabía cómo reaccionar», dijo al semanario L’Express.
«Soy un ser humano, no un simple objeto».
Maire posteriormente se disculpó ante las cámaras y buscó a Riffi para pedirle perdón, y ella dijo en una publicación en Facebook que consideraba que «no merece ninguna sanción, a pesar de sus impulsos masculinos».
Riffi dijo que escribió eso porque sentía pena por Maire, quien le aseguró que su familia ya no le hablaba, su hija no quería ir a la escuela y podría quedar arruinada su carrera.
«Tal vez con cierta ingenuidad, quería ayudar. Pero no por eso apropiado a su gesto», dijo a L’Express.
Sin embargo otros consideraron que debe haber un castigo, como 250 espectadores que presentaron una queja ante el Consejo Superior Audiovisual.
El organismo regulador de la televisión francesa indicó que «un expediente será abierto» para darle seguimiento al caso.
«Incluso en un programa de entretenimiento, cuando una mujer dice que no es no», dijo la ministra de derechos de la mujer y de la infancia, Laurence Rossignol.
La funcionaria no dudó en calificarlo como una «agresión sexual» de la cual también ella daría aviso al Consejo Superior Audiovisual sobre el caso.
«Seducción a la francesa»
El caso de Riffi es el último de una serie de escándalos en Francia que están provocando una reacción en contra de lo que se conoce como «seducción a la francesa»: tolerancia al oportunismo masculino, en particular por aquellos en posiciones de poder.
Otra personalidad de los medios franceses, Jean-Marc Morandini, está siendo investigado por la policía porque supuestamente obligó a una menor de edad a grabar un acto sexual en un casting en su casa.
También tiene en su contra demandas de acoso sexual de otros cinco hombres que estaban actuando en una serie de drama.
Personal de iTele se fue a huelga para protestar contra la llegada de Morandini al canal.
Mientras tanto, un nuevo sitio web intenta alentar a lasmujeres que están en el mundo de la política francesa a informar de comportamientos lascivos y abusivos.
El sitio Chair Collaboratrice llegó después de la dimisión en mayo del vicepresidente del Parlamento, Denis Baupin, quien fue acusado de asalto sexual en contra de una integrante del Partido Verde, así como por haber enviado mensajes explícitos a otras.
La semana pasada, el ministro Jean-Michel Baylet fue acusado en el Parlamento de golpear a una colega en la cara. Ambos niegan las acusaciones.
En un artículo publicado en el diario Le Monde, mujeres detrás de Chair Collaboratrice dijeron que «el lenguaje y el comportamiento machista se producen diariamente para las mujeres en la política».
Varias ya han compartido sus malas experiencias en Chair Collaboratrice.
En un incidente, una mujer relató que en una reunión en la que estaba un primer ministro recibió un comentario: «¿sabes, es gracioso, nunca me he acostado con una árabe…».
«¡Sabes, es gracioso, nunca he abofeteado a un primer ministro!», respondió ella.
Otra dijo que un hombre con el que estaba trabajando en el Parlamento francés le había dado un masaje en los hombros en su primer día en el trabajo.
El año pasado, 40 mujeres periodistas escribieron una carta abierta que detallan sus malas experiencias con los políticos franceses.