Según varios investigadores del fenómeno ovni, junto con varios científicos, que habían postulado previamente este mismo escenario, eso es exactamente lo que sucedió.
Mientras que el cristal es el término utilizado para describirlo, nadie está seguro de lo que realmente es. La estructura que posee este mineral es una que nunca antes se había encontrado en la naturaleza, aunque ha sido creada artificialmente en ambientes de laboratorio. Se le conocía como un cuasicristal porque desde el exterior se asemeja a un cristal, pero lo que estaba dentro era harina de otro costal.
Mucha gente probablemente se pregunte – ¿qué es un cristal? Un mineral necesita tener propiedades establecidas, específicamente con la estructura atómica, para ser considerado un cristal. Es decir, necesita celosías. Los átomos de un cristal están dispuestos en estructuras de celosía, son muy predecibles y se repiten continuamente. Sin embargo, mientras que este nuevo mineral puede parecer un cristal por fuera, no es un cristal por dentro. El cuasicristal tenía celosías, sin embargo, estaban ordenadas y no eran consistentes e idénticas. El cuasicristal tenía celosías, sin embargo, estaban perfectamente ordenados, pero no eran periódicos.
Los átomos estaban dispuestos en una variedad de configuraciones diferentes, lo cual, basado en la comprensión humana de la ciencia y la composición química, simplemente no era posible en la naturaleza.
Cuando el equipo descubrió que el meteorito contenía este material misterioso, antiguo e inteligentemente diseñado, meramente movieron los postes de la meta, simplemente afirmando que de hecho se puede formar de forma natural.
Técnicamente, los científicos describen los cuasicristales como cuasiperiódicos, ordenados manualmente, que ya no se encuentran en la tabla periódica. Aunque exhiben un patrón que llena toda la masa disponible continuamente, carecen de lo que los científicos y matemáticos llaman «simetría traslacional».
En pocas palabras, los materiales no son naturales. Se cree que el meteorito en el que se encontró tiene alrededor de 4.500 millones de años. Sin embargo, cuando recogió a este desconcertante pasajero, y posiblemente alienígena, puede permanecer desconocido.
Ufológos y científicos por igual, habían planteado previamente la hipótesis de que la evidencia de vida extraterrestre se encontraría con toda posibilidad en una formas como esta. Señalando que los cuasicristales, al ser una forma novedosa de materia, en realidad deberían verse como artefactos de tecnología alienígena, creada artificialmente.
Nadie ha podido explicar cómo los cuasicristales pueden formarse mediante procesos naturales, y tampoco es probable que nadie lo haga, simplemente no sucede.
Su «simetría prohibida», lo hace imposible que se formen naturalmente. Los únicos otros cuasicristales conocidos además de los encontrados en los meteoritos de Chukotka, fueron sintetizados recientemente por científicos en condiciones de laboratorio.
Al ser muy duros, con características de baja fricción, también una baja conducción de calor, los cuasicristales son un producto muy útil, utilizado en una amplia gama de tecnologías de alta velocidad, como los revestimientos de aviones y cazas sigilosos.
Si este material no fue creado por la naturaleza como algunos afirman.
¿De donde provino este misterioso material y Cómo terminó este complejo material dentro de un meteorito antiguo?
¿Podría haber sido creado artificialmente hace mucho millones de años atrás por una antigua civilización de otro mundo?
¿Formó parte de una estructura tecnológica mucho mas compleja?
Parece que, independientemente de lo que ciertos cuerpos científicos harían presumir, ese es el escenario más probable.