Desde el inicio de la campaña de vacunación en España, se han administrado un total de 2.167.241 dosis entre todas las comunidades, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad. Estas dosis han servido ya para inmunizar completamente (con las dos dosis) a 838.782 españoles.
Respecto a las personas que han recibido, al menos, la primera de las inyecciones, son 1.065.441 personas. De estas, se han registrado un total de 1.555 «acontecimientos adversos» (137 notificaciones por cada 100.000 dosis). Así lo ha comunicado el Sistema Español de Farmacovigilancia de Medicamentos de Uso Humano (SEFV-H), compuesto por los centro autonómicos de Farmacovigilancia y coordinado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), en el 2º Informe de Farmacovigilancia sobre Vacunas COVID-19.
Esto, en términos estadísticos, supone únicamente el 0,15% del total de personas que han recibido la primera dosis en España. De todas estas dosis inoculadas a la población, el 98% corresponde a la vacuna de Pfizer y BioNTech, mientras que el 2% restante a la vacuna desarrollada por Moderna. Además, casi tres cuartas partes de las personas vacunadas (70%) son mujeres. La mayoría de notificaciones registradas corresponden precisamente al género femenino (82%) y a personas de entre 18 y 64 años (85%).
Efectos más comunes
El informe destaca la aparición de algunos trastornos generales, como la fiebre y el malestar general, siendo estos los más frecuentes entre los notificados. Tras éstos, los relacionados con el sistema nervioso (cefaleas y mareos) y gastrointestinal (náuseas y diarrea), problemas musculoesqueléticos y dermatológicos.
Ocho casos de anafilaxia
La AEMPS resalta, por encima de otros efectos, los casos de anafilaxia, de los que se han registrado ocho hasta el día 24 de enero. Se trata de una reacción adversa «conocida y referenciada en la ficha técnica y el prospecto de Comirnaty (Pfizer)». Los Centros para el Control y Prevención de Estados Unidos (CDC) estiman que la tasa es de 11,1 casos por cada millón de dosis administradas.
La mayoría de los casos de esta reacción, informa la AEMPS, se dio en mujeres (88%), con una mediana de edad de 33 años. Cinco de los casos detectados contaban con antecedentes de urticaria o alergia a medicamentos o alimentos. Más de la mitad de los casos (63%) se produjeron en los primeros treinta minutos tras recibir la vacuna. En tres cuartas partes de los casos se administró adrenalina como tratamiento y todos los pacientes se recuperaron o estaban de fase de recuperación en el momento de su notificación.
La anafilaxia es una reacción alérgica de carácter grave y poco frecuente que afecta de forma simultánea a varios órganos a la vez. Los más comunes son la piel y los sistemas circulatorio y respiratorio. Respecto a los síntomas que indican su aparición, están la urticaria, hipotensión, taquicardia, disminución o pérdida de conciencia o inflamación de las vías respiratorias, entre otros.
De forma habitual, aparece entre los 15 y 30 minutos después del contacto con el agente desencadenante. Los síntomas, en los casos más graves, pueden amenazar la vida, por lo que resulta esencial el rápido tratamiento con adrenalina. Por último, la AEMPS recomienda no poner la segunda dosis de la vacuna en aquellos pacientes que hayan sufrido una reacción alérgica relevante tras la primera dosis, así como derivar al paciente a un servicio de alergología.
Los “acontecimientos adversos” de la vacuna hasta ahora en España