Hoy te traigo alguno casos reales de reencarnación que despiertan la curiosidad y hacen preguntarse si existe realmente este fenómeno. La reencarnación es un tipo de creencia en la que una persona o animal que ha desaparecido adopta uno o varios cuerpos materiales ya existentes.
Este pensamiento ha existido en la humanidad desde los tiempos más remotos y, a día de hoy, se puede ver reflejado sobre todo en religiones asiáticas como el hinduismo, budismo y taoísmo.
Al final te dejaré el dato de una película que se encuentra en Netflix, trata sobre la reencarnación, una película de intriga y romance que te atrapará.
Casos reales de reencarnación
1. Cameron Macaulay: Extrañando a la familia
La mamá de Cameron, Norma, de 42 años, dijo que un día el niño comenzó a contar historias de su infancia en la Isla de Barra. Habló de sus antiguos padres, cómo murió su papá, y sobre sus hermanos y hermanas de su vida anterior. También dijo que su “antigua mamá” era la de su vida anterior. Cameron cree que él tiene una vida anterior y le preocupa que su familia lo extrañe.
Norma cuenta, “Él se queja de que en nuestra casa hay sólo un baño, mientras que en Barra ellos tenían tres. Suele llorar por su mamá, dice que ella lo debe extrañar y quiere que su familia en Barra sepa que él está bien. Cameron se siente muy triste, no deja de hablar de a dónde fueron, qué hicieron y cómo veía aterrizar los aviones en la playa desde la ventana de su habitación”. Cameron incluso dijo que su papá se llamaba Shane Robertson, y que murió porque “No miró para los dos lados”. (Probablemente quiera decir que su padre fue atropellado por un coche.
2. Las gemelas Pollock
Usuarios de internet han revivido uno de los casos paranormales más intrigantes de los últimos tiempos. Se trata del caso de las gemelas Pollock en Reino Unido. Este extraño suceso tuvo lugar en Inglaterra durante la década de los años ´50. Corría el año de 1957 cuando el matrimonio Pollock y sus hijas, Joanna y Jacqueline, de 11 y seis años respectivamente, terminaban de tomar misa en el lejano pueblo de Hexham.
Todo parecía marchar bien, hasta que un automóvil embistió a las niñas lo que provocó la su muerte de manera instantánea. Los Pollocks guardaron luto durante algún tiempo. Sin embargo, decidieron rehacer su familia tras el fatídico accidente. La señora Florence quedó embarazada de gemelas que vieron la luz un año después en 1958.
Las menores fueron nombradas Gillian y Jennfier. Ambas tenían un aspecto físico similar con la diferencia de que Jennifer contaba con una cicatriz idéntica a la que tenía su hermana Jacqueline. Después del nacimiento la familia decidió mudarse al pueblo de White Bay para rehacer sus vidas. A los dos años, las hijas comenzaron a tener un extraño comportamiento.
Gillian y Jennfier pedían los juguetes de sus hermanas a sus padres sin que éstos los hubieran mencionado. Los padres decidieron darles un par de muñecas a las que bautizaron Mary y Susan, justo como lo habían hecho sus hermanas años atrás. Sin embargo, una de las partes más macabras de la historia fue cuando la familia volvió a Hexham. Las gemelas comenzaron a decirle a sus padres que las llevaran a visitar un parque de diversión del que daban detalle certero sin ni siquiera conocerlo.
Ante esto los padres se sorprendieron al mismo tiempo que descubrieron que sus pequeñas actuaban de manera similar a sus fallecidas hijas. En una ocasión, las menores hablaron acerca de un automóvil que las iba a buscar. Haciendo referencia al fatal accidente de sus hermanas.
Los padres recurrieron a la ayuda del parapsicólogo Ian Stevenson, que se desempeñaba en el campo de la reencarnación de menores. Concluyó que a los cinco años el vínculo que las gemelas tenían con sus hermanas desapareció y los Pollock pudieron rehacer sus vidas.
3. Ismail Altinklish, el niño que recuerda su asesinato
En 1956, nació en Turquía un niño llamado Ismail Altinklish, que desde muy niño decía haber sido, en una vida anterior, un jardinero de Adana de nombre Abeit Suzulmus, asesinado de un golpe en la cabeza. El niño presentaba una cicatriz en la cabeza, en el mismo lugar donde aseguraba que Suzulmus había sido golpeado, y exhibía ante su familia toda un serie de detalles sobre su anterior existencia.
Abeit Suzulmus, que vivió en la región de Bahcheche, junto a su mujer Sahida y sus dos hijos, había sido asesinado por varios empleados suyos que le aplastaron la cabeza con una barra de hierro. Desde siempre, el niño Ismail Altinklish, pedía a sus padres el poder visitar la casa de su anterior encarnación, hasta que finalmente lo consiguió.
Cuando llegaron a la que fuera la casa de Sulzulmus, el muchacho reconoció todo aquello que le había pertenecido y sus padres comprobaron que todo se ajustaba perfectamente a lo que le niño les había descrito anteriormente. Una de las hijas de Abeit, visitó al niño, tiempo después, y tras mantener una larga conversación con él, quedó convencida de que su padre se había reencarnado, efectivamente, en el joven Ismail Altinklish.
4. Ian Hagerdon: reencarna a un policía asesinado
Este chico, de tan solo seis años afirma ser un policía muerto en acto de servicio por un disparo mientas intentaba atrapar a unos delincuentes en una tienda. Lo curioso es que este policía fue su abuelo.
Ian, sin saber nada sobre su familiar también soltó algunas frases como: “Cuando eras pequeña y era tu padre, tú hacías muchos desastres y nunca te pegué” cuando esta se disponía a pegarle una cachetada.
5. Semih Tustusmus: reencarnación de un esposo muerto
Este chico turco afirmaba que su verdadero nombre era el de Selim Fesli, un hombre que murió hace 50 años en una casa vecina. Sin duda, esto era algo que extrañaba a su madre, puesto que tenía sueños con un hombre que decía llamarse Selim.
Cuando Tustusmus cumplió los cuatro años de edad, acudió a la casa donde residía Selim para hablar con su viuda, con la que recordaron detalles de su vida pasada con total exactitud. El caso es llevado por el reconocido doctor Ian Stevenson.