Nuestras vidas se encuentran marcadas por diferentes acontecimientos, compromisos y diferentes tipos de problemas, por lo que no es nada fácil encontrar una estabilidad emocional. El equilibrio es algo que hay que buscar y negociar constantemente con la propia vida, porque aunque parezca que hoy has encontrado una estabilidad, no es seguro que mañana siga siendo igual.
Antes de empezar a entender cómo encontrar el equilibrio, también deberías preguntarte para qué lo necesitas: ¿cuál es el objetivo que quieres conseguir? ¿Realmente es necesario adquirir este equilibrio?
Puede haber muchas respuestas, pero en general, casi todos queremos alcanzar la felicidad y para eso buscamos el equilibrio. Al fin y al cabo, una vida en la que se pasa la mayor parte del tiempo en un estado de depresión o de mal humor quizás debería revisarse y cambiarse en lo posible.
La felicidad es algo que también implica estados de calma, confianza y optimismo acompañados de una buena dosis de control sobre todos los aspectos de tu existencia. A pesar de ello, encontrar la estabilidad entre todas nuestras tareas e intereses no es nada sencillo.
Para ello, sin duda debes tener una amplia conciencia de ti mismo y también debes ser capaz de aceptar la idea de que mañana es un nuevo día y, por tanto, todo podría cambiar. Sin embargo, si puedes encontrar tu equilibrio interior, probablemente también serás capaz de manejar cualquier situación estresante que puedas encontrar en el camino hacia tu objetivo deseado.
El equilibrio también es algo que te ayuda a vivir bien en todas las situaciones cotidianas, desde el entorno laboral, pasando por el familiar, hasta la relación con tu pareja. Pero, ¿por qué es tan difícil encontrar la estabilidad emocional? La vida está hecha de imprevistos, situaciones desconocidas y muchas preguntas a las que no encontraremos una respuesta definitiva, es normal que todo esto te desestabilice.
Aprender a ver el lado positivo de los acontecimientos inesperados
Una vez aceptado el hecho de que la vida está llena de sorpresas inesperadas, ya sean positivas o negativas, también hay que aprender a ver el lado positivo, incluso la situación más incómoda que se pueda encontrar podría abrir muchas puertas a escenarios futuros positivos.
Intenta siempre preguntarte hasta qué punto un contratiempo puede afectar negativamente a tu experiencia y encuentra siempre una lección de vida en estos acontecimientos. Si puedes poner en práctica este consejo, también comprenderás que cada pequeña interrupción en tu seguridad no tiene por qué provocar una remodelación total de tu estado de equilibrio: rara vez un detalle puede afectar al total.
Aceptar lo desconocido y apreciarlo
Lo que será mañana no lo puedes saber, lo desconocido siempre formará parte de tu experiencia vital, por lo tanto, es esencial que puedas aceptarlo y también apreciarlo. Todos los días te encontrarás con situaciones que nunca has visto antes y con gente completamente nueva, así que es inútil que intentes organizar toda tu experiencia de antemano, siempre habrá algo que te sorprenda por suerte.
Al poner en práctica este consejo, aceptarás el hecho de que la estabilidad es quizás una ilusión. Tiene mucho más sentido buscar pautas para sus experiencias en lugar de intentar desesperadamente encontrar un equilibrio inmune a lo desconocido.
No busques respuestas que no puedes encontrar
Puede parecer absurdo, pero el sentido de la vida es simplemente ser feliz y bueno con tu moral. Hay preguntas a las que el ser humano probablemente nunca encontrará una respuesta cierta y objetiva, por lo que también es inútil plantearlas.
Cada respuesta que encontraras sería válida sólo para ti y para ese preciso momento en que la encontraste: mañana es un nuevo día y todo será completamente diferente. Hay cosas que simplemente suceden y, por lo tanto, no tiene sentido tratar de encontrar una razón para ellas.
“Es mejor aceptar la vida tal como es en realidad y no como yo la imaginaba” -Paulo Coelho