Autoridades japonesas informaron este sábado que uno de los reactores de la planta nuclear de Fukushima dañada tras el terremoto y posterior tsunami del mes pasado tiene una grieta por la que sale agua radiactiva al mar
La empresa que opera la planta, Tepco, explicó que esa grieta está en el tanque de contención del reactor 2 y que tiene 20 centímetros de largo.
Este puede ser el motivo –según los operadores- por el cual se han registrado altos niveles de radiactividad en el mar cerca de la planta nuclear.
Para detener la fuga, la empresa tiene planeado verter concreto en el tanque y así sellar la fisura.
El director general adjunto del Consejo de Seguridad Nuclear y la Agencia de Seguridad Industrial, Hidehiko Nishiyama, dijo en una rueda de prensa que tras el sostenido aumento de los niveles de radiactividad en el mar habían intentado determinar el origen de esa radiación.
«Y en ese contexto, esto (la grieta en el reactor) podría ser una de las fuentes. Estamos tomando muestras del agua del tanque y del mar cerca de la planta, pero no podemos decir nada con certeza hasta que hayamos estudiado los resultados», dijo Nishiyama.
La visita de Kan
La noticia coincide con el viaje al noreste del país del primer ministro, Naoto Kan, para visitar la zona más afectada por el tsunami, ocurrido el 11 de marzo.
Esta es la primera vez que Kan pisa el terreno, pues anteriormente sólo había sobrevolado la zona.
En Rikuzentakata, Kan les aseguró a las personas afectadas por el desastre que el gobierno japonés hará todo lo posible para ayudarlos.
«Hablé con las autoridades locales sobre cómo reconstruir la industria pesquera, incluida la forma en que podemos reconstruir las granjas de peces y mariscos. El gobierno japonés hará todo lo posible para apoyar esos esfuerzos», agregó.
Sin embargo, para Ryoko Otsubo, un damnificado de 60 años, la visita fue inoportuna.
«Es demasiado tarde. Me habría gustado que hubiera venido antes, cuando no había caminos, para que viera los montones de escombros».