¿Alguna vez te has preguntado de dónde viene la voz que escuchas en tu cabeza cuando piensas? De hecho, ¿eres consciente de que hay una voz… o estás convencido que tu mente no funciona de esa forma?
Los psicólogos entienden como voz o monólogo interior a una forma de hilar y contextualizar nuestros pensamientos en forma de un discurso verbal, que «suena» en nuestra cabeza. Lev Vygotski, un psicólogo ruso de principios del siglo XX, explicaba este proceso como una forma de internalizar las voces que oyes a tu alrededor. Esto explica por qué «escuchamos» de diferente formas cuando hablas contigo mismo que cuando imaginas una conversación o un discurso de otra persona.
Pero, ¿se manifiesta de la misma forma en todas las personas? La realidad es que depende de muchos factores. Algunos se pueden estudiar, pero se mueven en un terreno resbaladizo que escapa de una comprensión lógica. Se ha demostrado, por ejemplo, que la parte del cerebro que se activa cuando estamos escuchando o hablando con nuestra voz interior es la misma que se utiliza para la formulación del lenguaje (el Área de Broca). Esto demuestra que, al menos hasta cierto punto, algunos procesos mentales se manifiestan en forma de frases regidas bajo las leyes gramaticales (algo que vincula la formación de nuestra conciencia con el aprendizaje del habla).