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domi ¿Es Aun Relevante la Religión?

Ciberespacio, espacio exterior, espacio interior, mapas genéticos, globalización, ir a Marte. Tarjetas inteligentes, bombas inteligentes, células madre y teléfonos celulares. No se puede negar: vivimos una nueva era. La ciencia ficción se transformó en hechos científicos. Y se formula una pregunta: En este nuevo orden mundial, con la ciencia y la tecnología cambiando nuestra forma de vivir, ¿es relevante la religión? ¿Aun necesitamos adherirnos a un antiguo y aparentemente muy obsoleto código de leyes, cuando estamos mucho más avanzados que nuestros antepasados?

Esta cuestión me recuerda al pequeño y viejo Hymie Levy de Londres, que se encontraba asistiendo a un coktail en compañía de la aristocracia. El pobre Hymie estaba completamente fuera de lugar alternando con los caballeros y damas de la realeza y alta sociedad británicas. Una duquesa estaba tan irritada por la presencia de ese ordinario judío que lo enfrentó directamente. Rezumando sarcasmo, con su mejor lenguaje, le dijo a Hymie “¡Sabe usted que el linaje de mi familia se remonta a aquellos que estuvieron presentes en la firma de la Carta Magna!” Hymie Levy se mantuvo inmutable. Se encogió ligeramente de hombros y susurró en el oído de la duquesa “¡Y mi abuelo Moishe estuvo presente en la entrega de los Diez Mandamientos!”

¿Los Diez Mandamientos han pasado la “fecha de vencimiento”? ¿La fe, la duda, el asesinato, el adulterio, el robo, la mentira y la envidia están fuera de moda? A pesar de todos los maravillosos descubrimientos médicos y científicos, ¿el ser humano mismo ha cambiado? ¿Los mismos temas morales que enfrentaron nuestros antepasados no desafían a nuestra generación?

Tanto si es una carreta de bueyes o un Mercedes, cólera o cortes coexistencia son aun una elección que debemos hacer. Cuidar de padres ancianos no es un problema nuevo. Tanto si son Adán y Eva o Miguel y Susana, el pasto siempre parece algo más verde en el otro lado. Por algún motivo inexplicable, la esposa, la casa, el caballo o el auto de la otra persona, aun son más atractivos y deseables que los nuestros.

Los mismos temas que trata la Biblia —rivalidad rampante, socios celosos y aun asesinato —son los titulares de los diarios de hoy. ¿Así que, que hay de nuevo? ¿Ha cambiado algo? Si, hoy tenemos astronautas y estaciones espaciales y proyectores láser y laptops, pero los temas básicos y las elecciones que el ser humano debe enfrentar siguen siendo iguales. Antes la pregunta era ¿debo golpearlo con mi garrote o degollarlo con mi espada? Hoy la pregunta es ¿debo enviar los submarinos nucleares o enviarle misiles guiados?

La tecnología ha avanzado a pasos agigantados. Pero los temas principales, los dilemas morales básicos no han cambiado un ápice. Aun luchamos para conocer la diferencia entre correcto e incorrecto, moral o inmoral, ético o tortuoso, y ni siquiera la más potente computadora de la tierra puede respondernos esas preguntas.

La ciencia y la tecnología pueden hacer maravillas para la humanidad. Pero también pueden hacer que explotemos para llegar más rápido que Atila el huno al otro mundo. La ciencia y la tecnología responden Cómo y Qué. No responden al Por Qué. ¿En primer lugar por qué estamos aquí? ¿Por qué debo ser bueno con mi prójimo? ¿Por qué mi vida debe ser más noble que la de mi perro doberman? La ciencia y la tecnología han revelado muchos misterios que nos intrigaron por siglos. Pero no han respondido a una sola pregunta moral. Solo la Torá se dirige al campo minado de la moral. Y esos temas son quizás más urgentes hoy que nunca antes en la historia.

http://www.es.chabad.org/library/article_cdo/aid/706794/jewish/Es-Aun-Relevante-la-Religin.htm

domi Entrevista al Doctor Ryke Geerd Hamer

Doctor Hamer, ¿qué le indujo a interesarse en el cáncer, y a cuestionarse las relaciones de causalidad entre el alma y las enfermedades?

Hasta 1978 no me había ocupado especialmente de ello. Era internista, es decir, especialista en medicina interna, y llevaba trabajando 15 años en clínicas universitarias (C.H.U.). Dirigí cursos durante cinco años, enseñando a estudiantes. Era un internista normal, tenía en mi haber varios años de práctica médica… Todo eso hasta 1978.

Luego sucedió algo terrible. Un loco furioso disparó su fusil, sin el menor motivo, contra mi hijo Dirk, que dormía sobre un barco. Fue un golpe imprevisto que me pilló totalmente desprevenido. Un golpe contra el que me sentí impotente y sin capacidad de reacción. En la vida corriente, los sucesos y conflictos normales no ocasionan sobre nosotros un choque tan brutal. Siempre tenemos ocasión de prepararnos un poco ante ellos; son lo que denominaríamos los conflictos ordinarios que solemos tener. Por el contrario, a los conflictos ante los que no tenemos preparación, y que provocan una violenta perturbación psíquica, un choque, les llamamos conflictos biológicos.

Fue así como en 1978 caí enfermo a causa de un conflicto biológico, un conflicto de pérdida, desarrollando un cáncer testicular. En aquellos momentos, como todavía nunca había enfermado de nada grave, aquello me hizo reflexionar. Pensé que, sin duda, aquel cáncer testicular debía estar relacionado, de una u otra manera, con la muerte de mi hijo.

Luego, tres años más tarde, en un clínica de cáncer ginecológico de la Universidad de Munich en la que era jefe de servicio de medicina interna, tuve ocasión de investigar si en mis pacientes del centro el mecanismo se había desarrollado exactamente de la misma forma que en mí. Es decir, si también ellas habían sufrido un choque conflictual. Descubrí que, efectivamente, en todas mis pacientes sin excepción se había producido un tal suceso-choque, a partir del cual habían tenido las manos frías y experimentado pérdida de peso, insomnio, etc. De manera que, tirando del hilo, se podía remontar hasta el choque inicial a partir del cual el cáncer debió producirse.

Por entonces esta opinión era hasta tal punto contraria a las tesis oficiales de la medicina escolar, que tan pronto expuse estas ideas a mis colegas se me colocó ante la disyuntiva de abandonar mi trabajo de clínica o retractarme.

¡Parece algo propio de la Edad Media! ¿Cómo reaccionó usted ante esta situación?

Bueno, cuando se es Frison no se puede abjurar, ya que ante la falta de argumentos que me refutasen hubiese debido abjurar de mis convicciones íntimas. Por lo tanto me fui. El despido me produjo un conflicto biológico o, más concretamente, una desvalorización violenta y brutal, lo recuerdo muy bien, ya que encontré monstruoso que se me pudiera echar de la clínica únicamente por haber realizado un descubrimiento científico fundamentado, nuevo e irrefutable. Además, nunca hubiese imaginado que eso fuese posible. Fue totalmente dramático, ya que hasta el último día pude examinar a mi paciente número 200, de manera que la Ley de Hierro del Cáncer casi vio la luz in extremis.

¿Podría explicarnos brevemente y de forma sencilla cuáles son los criterios esenciales de la Ley de Hierro del Cáncer?

La Ley de Hierro del Cáncer es una ley biológica. Conlleva tres criterios, el primero de los cuales se enuncia así:

  • Todo cáncer o enfermedad análoga al cáncer, se inicia con un S.D.H. (Síndrome Dirk Hamer), es decir, con un choque angustiante, extremadamente brutal y dramático, experimentado en soledad, que se manifiesta casi simultáneamente a tres niveles: psíquico, cerebral y orgánico.

Es el S.D.H., Síndrome de Dirk Hamer. Le denominé así porque el choque provocado por la muerte de mi hijo Dirk fue el origen de mi cáncer testicular. Luego, este Síndrome Dirk Hamer se convirtió en el eje, la columna vertebral de toda la Nueva Medicina. Así pues, en cada caso de enfermedad debemos intentar reconstruir escrupulosamente el Síndrome Dirk Hamer, con todos sus agentes y consecuencias.

Debemos retroceder hasta la situación específica de aquel momento. Es sólo a partir de aquella situación que podremos comprender por qué el problema ha constituido para alguien un conflicto biológico. Por qué razón fue tan dramático. Por qué el afectado estaba tan solo en aquellos momentos. Por qué nadie había podido compartirlo con él, y por qué el problema provocaba en él un conflicto activo. Es decir, que la persona en cuestión no podía escoger entre dos opciones que se le ofrecían o no tenía ninguna posibilidad de reaccionar ante el problema.

Un buen médico debe poder efectuar con igual eficiencia la identificación con un bebé -incluso un embrión-, con un viejo, una jovencita o un animal, y ser capaz de trasladarse hasta la situación que originó el Síndrome Dirk Hamer. Ese es el único medio que tiene para poder distinguir entre un problema -de los que tenemos a centenares- y un conflicto biológico.

La Ley de Hierro del Cáncer tiene además otros dos criterios, ¿no es cierto?

Sí. El segundo criterio se enuncia así:

  • En el momento de producirse el Síndrome Dirk Hamer, la forma del conflicto determina la localización cerebral del Foco de Hamer, así como la localización en el órgano del cáncer o del equivalente del cáncer.

En efecto, los conflictos no existen por sí mismos, sino que cada conflicto tiene una forma muy determinada que se define en el mismo instante del Síndrome Dirk Hamer. La forma del conflicto se genera por vía asociativa, es decir, por coordinación instintiva de ideas que generalmente escapa al filtro de nuestra razón.

Por ejemplo, tomemos un conflicto típico de agua o de líquido: un camión cisterna pierde todo su contenido en un accidente de circulación, o el coche de una cooperativa lechera vuelca y derrama en la calzada toda la leche. Se produce una asociación con el agua o líquido y, a partir de un conflicto biológico mentalmente relacionado con el agua, un conflicto de agua, un tipo específico de cáncer de riñón.

¡Eso significa pues que a cada forma de conflicto le corresponde un cáncer determinado, y un emplazamiento específico en el cerebro!

Sí. Existe un relé específico a nivel cerebral. En nuestro ejemplo de cáncer de riñón por conflicto de agua o líquido, en el mismo segundo de producirse el Síndrome Dirk Hamer se produce un cortocircuito en una localización predeterminada del cerebro que, según los casos, corresponderá al riñón derecho o izquierdo. Este cortocircuito puede ser fotografiado con ayuda de los escaners cerebrales. La zona cerebral toma el aspecto de círculos concéntricos, como en una diana o un estanque al que se ha arrojado una piedra.

Hasta ahora, este fenómeno ha sido siempre mal interpretado por los radiólogos, que lo diagnosticaban como fenómeno de origen artificial ocasionado por el propio aparato. La localización cerebral que presenta este tipo de alteración se denomina Foco de Hamer. No fui yo quien le dio tal nombre, sino mis detractores, haciendo burla de esos «cómicos Focos de Hamer» en las localizaciones descubiertas por mí.

¿Cómo se enuncia el tercer criterio de la Ley de Hierro del Cáncer?

A la evolución del conflicto le corresponde una evolución determinada del Foco de Hamer en el cerebro, y una evolución específica de un cáncer o de una enfermedad equivalente al cáncer en un órgano. Se puede resumir así:

  • El conflicto biológico tiene un triple impacto, casi simultáneo, a tres niveles: psíquico, cerebral y orgánico.

Es fácil de concebir y además se puede hacer la comprobación en el primer caso que se nos presente: la evolución del conflicto y, -llegado el caso-, de la enfermedad, es sincrónico en los tres niveles. En la medida en que el conflicto puede resolverse, constatamos que los cambios debidos a esta solución se producen sincrónicamente, es decir, en forma paralela en los tres niveles.

Se trata de la acción de un sistema predeterminado, en el sentido estrictamente científico, de manera que si se conoce uno de los niveles se pueden deducir limpiamente los otros dos. Es decir, que en último extremo tenemos un único organismo que podemos concebir a tres niveles pero que de hecho es uno solo.

He aquí un pequeño ejemplo. En mayo de 1991, tras una conferencia en Austria, cerca de Viena, un médico me presentó el escáner cerebral de uno de sus pacientes, rogándome que explicase a sus veinte colegas presentes -la mayoría radiólogos y especialistas de escaners cerebrales- lo que yo podía deducir a nivel orgánico y, correlativamente, a nivel psíquico. La información de que disponía era tan solo de uno de los tres niveles: el cerebral.

A partir del escáner cerebral diagnostiqué un carcinoma vesical en inicio de sangrado y en fase de curación; un antiguo carcinoma prostático; una diabetes; un antiguo carcinoma bronquial y una parálisis sensorial de una zona determinada del cuerpo, informando a la vez de los correspondientes conflictos. Ante lo cual, el médico se levantó y afirmó ante todos sus colegas: «¡Mi más sincera felicitación, Doctor Hamer! Los cinco diagnósticos son cinco aciertos. Es exactamente lo que tiene el paciente y lo que ha tenido. ¡Es fantástico!»

Uno de los radiólogos presentes comentó entonces: «A partir de hoy me he convencido de lo bien fundamentado de su método. En efecto, ¿cómo, sino, podría adivinar un carcinoma de la vejiga en inicio de sangrado? Yo mismo no había hallado nada remarcable en el escáner cerebral, pero ahora que nos ha mostrado los relés estoy dispuesto a ratificar seguidamente su diagnóstico».

Detengámonos un instante en el plano psíquico. ¿Cómo detectar que he sufrido un choque de este tipo, que desencadena a continuación la correspondiente enfermedad cancerosa? ¿Cómo se reconoce?

Hay criterios precisos que hacen que se distinga con facilidad de los problemas y conflictos normales con que nos enfrentamos cotidianamente.

Tras un Síndrome Dirk Hamer, el paciente se halla en un estado duradero de simpaticotonía, de estrés permanente, es decir, con pies y manos completamente fríos, sin apetito, adelgazando, sin poder dormir por la noche, sin poder pensar en otra cosa, de día como de noche, que en su conflicto. Este estado sólo cambia cuando el paciente ha resuelto su conflicto.

Así pues, y a diferencia de los conflictos y problemas normales, vemos que los pacientes que sufren estos conflictos biológicos mantienen un estrés permanente que presenta síntomas muy determinados, con lo que además del desarrollo del cáncer y del foco localizado en el cerebro, visible desde el primer momento, el paciente manifiesta síntomas psíquicos muy conocidos y definidos que no pueden pasar desapercibidos.

¿Qué sucede exactamente cuando se resuelve uno de estos conflictos biológicos?

Volvemos a ver síntomas muy manifiestos en el plano psíquico, cerebral y orgánico. En el plano psíquico, y a nivel vegetativo, vemos que el paciente deja repentinamente de reflexionar día y noche sobre su conflicto, recupera su ritmo normal de sueño y gana otra vez los kilos que había perdido en el transcurso de la fase simpaticotónica de conflicto activo. En contraposición, se siente decaído y fatigado, por lo que en ocasiones debe permanecer acostado.

Esto, lejos de ser el principio del fin, es un síntoma muy positivo. La duración de la fase de curación es variable ya que está en función del conflicto que la ha precedido y, en general, el paciente tarda en recuperarse tanto tiempo como ha durado el conflicto. En el punto culminante de la fase de curación, en el curso de la cual el cuerpo ha almacenado mucha agua, asistimos a una crisis epiléptica o epileptoide que se manifiesta, según cada enfermedad, a través de diversos síntomas. Tras esta crisis, el cuerpo elimina de nuevo el agua de los edemas y regresa lentamente a la normalidad. De igual manera el paciente se da cuenta de que va recuperando lentamente las fuerzas.

En el curso de la fase de curación, vemos paralelamente en elplano cerebral que el Foco de Hamer -que durante la fase activa del conflicto mantenía la configuración de una diana- se edematiza, es decir, se impregna de una sustancia colorante, y que los anillos visibles por escáner van desapareciendo, se difuminan, al tiempo que el relé cerebral se tumefacta por completo.

La crisis epiléptica o epileptoide mencionada anteriormente, y que de hecho es desencadenada por el cerebro, marca también allí el punto culminante del edema, es decir, el punto de reflexión y de retorno a la normalidad. En el transcurso de la segunda mitad de la fase de curación empieza a confluir en el cerebro el tejido conjuntivo cerebral inofensivo, denominado neuroglía, con el objetivo de reparar el Foco de Hamer. Este tejido conjuntivo, totalmente inofensivo y que en el escáner cerebral podemos colorear de blanco con un producto de contraste yodífero, ha sido a menudo y de forma errónea tomado por un tumor cerebral y extirpado por pura tontería. En efecto, dado que tras el nacimiento del ser humano las células cerebrales no pueden reproducirse a sí mismas, es imposible que existan auténticos tumores cerebrales.

En el plano orgánico, vemos ahora lo que hasta aquí era considerado como más importante, a saber: que el cáncer no progresa. Es decir, que a partir de la solución del conflicto -que nosotros llamamos conflictolisis- el cáncer se detiene y deja de proliferar.

Este es un descubrimiento extremadamente importante que, por así decir, programa de antemano la terapéutica del cáncer. También sobre el plano orgánico vemos igualmente procesos de reparación muy determinados que desde ahora examinaremos con más precisión. La crisis epiléptica se manifiesta también a nivel orgánico al mismo tiempo que los fenómenos correspondientes lo hacen en los otros dos niveles.

¿Podría describirnos qué es realmente una crisis epiléptica?

La crisis epiléptica es un proceso que ha ejercitado la naturaleza desde hace millones de años. Se desarrolla simultáneamente a tres niveles. El sentido y objetivo de esta crisis, que sobreviene en el punto culminante de la fase de curación, es el de retorno a la normalidad. Es lo que habitualmente denominamos un ataque de rampa, con rampas musculares que son una forma específica de crisis epilépticas, a saber, la que se desencadena tras la solución de un conflicto de motricidad.

Pero las crisis epileptoides, decir, parecidas a las crisis epilépticas, se producen en principio en todo tipo de enfermedades, si bien con diferencias según sean éstas. Para este importante fenómeno la naturaleza ha inventado -por así decir- un truco. En el punto medio de la fase de curación el paciente experimenta una recaída fisiológica de su conflicto, es decir, que cada paciente revive brevemente su conflicto, lo que por momentos le coloca en una fase de estrés: presenta manos frías, sudor frío generalizado y revive brevemente todos los síntomas de la actividad conflictual. El objetivo de todo ello es presionar y expulsar el edema cerebral para que el paciente pueda regresar a la normalidad. Una vez que la crisis epiléptica ha terminado el paciente vuelve a aumentar la temperatura corporal. Tras ello se sucede una pequeña fase de pérdida de orina.

Tras la crisis epiléptica el paciente se encamina de lleno a la normalización, lo que significa que una vez superada la crisis ya no volverá a producirse nada que pueda asustar o que sea grave. Hacia el final de la fase de curación se produce una gran fase de pérdida de flujo urinario en el transcurso de la cual el cuerpo elimina completamente el resto de los edemas.

El momento de peligro se sitúa inmediatamente al final de la crisis epiléptica o epileptoide, ya que es entonces cuando se descubre si la crisis epileptoide ha sido o no suficiente para eliminar el vapor. La crisis epiléptica más conocida es el infarto de miocardio y en la lista de crisis epileptoides más conocida es el infarto de miocardio, y en la lista de crisis epileptoides figuran preferentemente la embolia pulmonar, la crisis hepática o la supuesta crisis pneumónica. Para que en este retorno a la normalidad el cuerpo venza en los casos graves, es decir, cuando el conflicto ha durado mucho tiempo, le ayudamos con una fuerte inyección de cortisona. En los casos muy graves se puede ya administrar la cortisona de antemano.

¿Podría citarnos, como ejemplo, algunos conflictos típicos? Y lo que también sería interesante, ¿por qué se les denominaconflictos biológicos?

Les llamamos conflictos biológicos porque se explican desde un punto de vista ontogenético, se presentan de manera analógica tanto en el hombre como en el animal, y evolucionan igualmente de forma análoga en ambos. No tienen nada que ver con los problemas y conflictos con que nos enfrentamos habitualmente (los conflictos psico-intelectuales). Son conflictos de una calidad fundamentalmente diferentes, casos de perturbación, por así decir, previstos por la naturaleza en el programa arcaico de comportamiento grabado en nuestro cerebro.

Imaginamos que lo pensamos, pero en realidad el conflicto estallóya en el intervalo de segundos por vía asociativa antes incluso de que hubiésemos empezado el acto de pensar. Por ejemplo, cuando un lobo arrebata a la madre su pequeña oveja, la madre desarrolla un conflicto madre-hijo tal como lo hace la madre humana. La madre oveja producirá un cáncer de mama en el mismo lado que la madre humana desarrolla el suyo, según sea diestra o zurda. El relé cerebral se halla en la misma localización en que en la madre humana se ubica el relé del comportamiento madre-hijo y, en caso de perturbación, el Foco de Hamer correspondiente al conflicto madre-hijo o al conflicto de nido. Es la misma localización donde, en la tetilla del niño pequeño, se localiza el relé para las relaciones niño-madre.

Todos nuestros conflictos biológicos pueden ser clasificados ontogenéticamente. Ontogenéticamente nosotros sabemos cuándo -es decir, en qué etapa de la evolución de las especies- los comportamientos específicos han sido desarrollados y registrados, de forma que no sólo existen correlaciones entre órganos y zonas cerebrales, sino también conflictos íntimamente ligados ontogenéticamente. Una vez más, todas las perturbaciones psíquicas relacionadas tienen relés vecinos en el cerebro y, ontogenéticamente hablando, son también vecinas a nivel orgánico, de manera que presentan la misma formación celular histológica. Es aprendiendo a considerar nuestro organismo desde un punto de vista ontogenético que descubrimos la prodigiosa organización de la naturaleza.

¿Podría darnos algunos ejemplos tomados de nuestra vida cotidiana?

Sí. Tomemos por ejemplo el caso de una madre que lleva a su hijo cogido de la mano mientras está hablando con una vecina en la acera. De repente, el niño se suelta de la mano de la madre y se lanza a la calle. Chirrido de neumáticos, un vehículo que frena bruscamente… y el niño que sale por los aires o es atropellado. La madre no estaba preparada para un tal suceso y la ha pillado totalmente desprevenida. Se ha quedado helada de espanto. El niño es conducido al hospital, en el que permanece quizá durante días enteros entre la vida y la muerte. Su madre tiene las manos heladas, no puede dormir, ha perdido el apetito y se halla en estado de estrés permanente. Desde el momento mismo del accidente empieza a desarrollarse en su pecho izquierdo (o en su pecho derecho, si es diestra), un nódulo. Ha sufrido un conflicto típico madre-hijo, con configuración en forma de diana en el cerebelo derecho. Cuando la madre recibe el alta de los médicos para llevar a su hijo a su casa, y éstos le dicen: «Ha tenido suerte, ha salido bien de esto, no le quedarán secuelas», desde ese mismo momento su conflicto entra en fase de curación. Se ha solucionado el conflicto y a partir de entonces la madre vuelve a tener las manos calientes, puede volver a dormir de nuevo, recupera peso y tiene otra vez apetito. He aquí una evolución típica del conflicto, que es casi idéntica tanto en el hombre como en el animal.

Otro ejemplo puede ser el de una mujer que sorprende a su marido en la cama con su mejor amiga. La mujer desarrolla una conflicto de frustración sexual que en el lenguaje biológico es un conflicto de ser-privado-de-unión-carnal-con, y en el plano orgánico se traduce en un carcinoma de cuello de útero si la mujer es diestra.

Sin embargo, y ante la misma situación, no todo el mundo reacciona obligatoriamente de igual manera, ni tiene como resultado obligado el mismo conflicto. En efecto, si la mujer no amaba ya al marido y desde hacía tiempo pensaba en el divorcio no siente esta sorpresa de delito flagrante como un conflicto sexual sino, a lo sumo, como un conflicto humano de falta de solidaridad con la familia. Éste sería un conflicto de pareja y provocaría un cáncer de mama del seno derecho, si la mujer es diestra.

Desde el punto de vista psíquico, el mismo suceso, aconteciendo en un contexto psíquico diferente, sólo es en apariencia el mismo suceso ya que en realidad se trata de algo totalmente diferente. El determinante no es lo que sucede, sino cómo lo encaja psíquicamente el paciente en el momento del Síndrome Dirk Hamer. En este caso, el mismo acontecimiento podría desencadenar un conflicto de miedo-disgusto, con hipoglucemia (es decir, disminución en sangre del nivel de glucosa) si la mujer hubiera sorprendido a su marido en una escena desagradable con, digamos, una prostituta. O bien, el mismo acontecimiento podría desencadenar una desvalorización de sí mismo -con o sin conflicto sexual-, si la mujer hubiese sorprendido a su marido con una chica veinte años más joven que ella. Entonces se hubiera dicho: «Evidentemente, no puedo competir, yo no puedo ofrecerle eso». En una tal situación la zona del cuerpo afectada sería el sistema esquelético (la pelvis púbica), donde se produciría osteolisis, es decir, descalcificaciones, como signo de la desvalorización sexual.

Es preciso saber todo esto para descubrir lo que el paciente tenía en su cabeza en el momento del Síndrome Dirk Hamer ya que es en ese preciso instante cuando se pone a rodar sobre el raíl de la enfermedad. Este raíl es una imagen en extremo importante porque todas las recaídas y retrocesos que eventualmente se producirán a continuación seguirán de nuevo el trazado inicial del raíl. Podemos hablar por eso de una verdadera alergia al conflicto.

Doctor Hamer, ¿se pueden tratar ya pacientes a partir de la Ley de Hierro del Cáncer?

En principio sí. Pero la Ley de Hierro del Cáncer es tan solo la primera ley biológica de la Nueva Medicina. En total hay cuatro leyes biológicas que he descubierto empíricamente, es decir, que se fundamentan en la observación de 15.000 casos parecidos y documentados hasta el momento. Si se quiere trabajar concienzudamente debería verificarse cada caso en función de las cuatro leyes biológicas.

Veámoslas pues una por una. ¿Cuál es el enunciado de la segunda ley biológica descubierta por usted?

La segunda ley biológica de la Nueva Medicina es la ley de las dos fases de las enfermedades.

¿De todas las enfermedades?… ¿No únicamente del cáncer?

Sí, todas las enfermedades del conjunto de la medicina tienen dos fases. Antiguamente, al ignorar este contexto se habían listado agrosso modo hasta un millar de enfermedades.

La mitad eran enfermedades frías, es decir, que el paciente presentaba los vasos sanguíneos de la piel contraídos, estaba pálido y mostraba pérdida de peso. El resto de enfermedades eran calientes y cursaban con fiebre, dilatación de vasos sanguíneos, buen apetito pero mucho cansancio. Todas estas supuestas enfermedades eran consideradas como afecciones autónomas. Hoy en día sabemos que todo esto era un error. En todos los casos se trataba tan solo de enfermedades a medias de forma que actualmente lo que conocemos por encima son quinientas enfermedades que presentan dos fases:

  • La primera fase es siempre la fase fría del conflicto activo, la fase de estrés simpaticotónico.
  • Y la segunda fase, que implica una solución del conflicto, es siempre una fase caliente, de resolución del conflicto, una fase vagotónica de curación.

En el cerebro, los Focos de Hamer de las dos fases se sitúan en la misma posición, pudiendo incluso afirmarse que es el mismo Foco deHamer. Durante la fase activa del conflicto los círculos concéntricos en forma de diana aparecen claramente delimitados. En la fase de curación estos círculos se difuminan en edemas. Vemos con estos ejemplos que estas leyes biológicas (hablaremos conjuntamente de las dos restantes) son válidas para el conjunto de la medicina y no únicamente para el cáncer.

El viejo ciervo, expulsado de su territorio por el ciervo joven, está también en un estado permanente de estrés, y desarrolla un conflicto biológico, a saber, un conflicto de territorio, un poco por encima de la oreja derecha. El ciervo se comporta como un condenado, sueña tan solo con recuperar su territorio. No come, no duerme y adelgaza porque se halla en un estado de continuo estrés. Sufre dolores punzantes en el corazón, angina de pecho, pequeñas úlceras en las arterias coronarias a nivel orgánico. Y regresa a la normalidad una vez que consigue -justamente porque vuelve a la normalidad- expulsar al rival intruso reconquistando el territorio. A partir de ese momento entra en la fase de vagotonía permanente y vuelve a comer de nuevo con normalidad, se siente invadido por un gran cansancio, engorda y recalienta sus extremidades. En la cima de la fase de curación sufre un infarto de miocardio como crisis epiléptica. Si consigue superarlo puede recuperar la posesión de su territorio.

En el reino animal las cosas suceden de forma similar como en el hombre. En el hombre su territorio será quizá su granja, su familia o su empleo, puesto que el hombre tiene muchos más territorios parciales. Incluso un automóvil puede ser un territorio. En el hombre no se produce infarto a menos que el conflicto haya durado entre 3 y 4 meses y, normalmente, si el conflicto ha durado más de un año, y si no se ha detectado su pase a la fase de curación vagotónica, puede convertirse en mortal. Un escáner cerebral permite hacer un rápido diagnóstico. Resulta sorprendente que los médicos no hayan descubierto desde hace tiempo este carácter bifásico de todas las enfermedades, siendo algo tan generalizado.

El motivo resulta tan fácil de ver ahora como difícil lo era antiguamente: se trata simplemente de que tan solo una parte de los conflictos pueden solucionarse. Si el conflicto no puede ser solucionado la enfermedad se mantiene en una única fase, es decir, el individuo permanece en su actividad conflictual. Cada vez adelgaza más y más y acaba por morir de extenuación o de caquexia. La ley del carácter bifásico de las enfermedades vale sólo, rigurosamente hablando, en aquellos casos en que el individuo puede hallar la solución a su conflicto. Sin embargo esta ley es facultativamente válida para toda enfermedad y todo conflicto dado que, en principio, todo conflicto puede ser solucionado de una u otra forma.

Doctor Hamer, ¿cuál es la tercera de las leyes biológicas descubiertas por usted?

Es el Sistema Ontogenético de los Tumores y Equivalentes del Cáncer.

¿Qué significa «ontogenético»?

En este contexto, el término ontogenético significa que en medicina se pueden explicar todas las enfermedades haciéndolas remontar a la evolución de las especies.

¿Cómo realizó este descubrimiento?

Cuando descubrí el sistema ontogenético de los tumores y equivalentes llevaba ya observados un gran número de casos, más o menos 10.000. Y trabajé como debería hacerlo todo científico consciente, a saber, de forma puramente empírica. Documenté sistemáticamente todos los casos; coleccioné los escaners cerebrales y los resultados histológicos, luego los reagrupé y comparé, comprobando que se desprendía de ello un resultado impactante que hasta entonces se hubiese creído imposible: ¡existe un sistema!.

Muchos pacientes desarrollaban, durante la fase activa, un tumor compacto, es decir, una proliferación celular. Otros en cambio desarrollaban algo durante la fase vagotónica, tras la conflictolisis. Y difícilmente podía tratarse de lo mismo. Existían pues dos clases de proliferación celular, a saber: una especie de proliferación celular en la fase simpaticotónica de actividad conflictual, y otra especie de proliferación celular en la fase de curación de aquellas enfermedades que durante la fase de actividad conflictual habían cursado con reducción celular (agujeros, necrosis, úlceras, abscesos).

Estas enfermedades presentaban pues proliferación celular en su fase de curación, con lo que empecé a comparar incansablemente estos diversos fenómenos. Luego, a fuerza de comparar, acabé por descubrir el sistema de funcionamiento. Constaté, en efecto, que los tumores que se formaban durante la fase de actividad conflictual por proliferación celular tenían siempre sus relés cercanos uno de otro en el cerebro, concretamente en el tronco cerebral y cerebelo.

Estas dos partes del cerebro constituyen en su conjunto lo que denominamos el cerebro antiguo. Así pues, todas las enfermedades cancerosas que manifestaban una proliferación celular en el transcurso de la fase de actividad conflictual tenían sus relés (el punto desde donde eran dirigidas) en el cerebro antiguo.

Y todos los supuestos tumores -que no son en el fondo más que una forma de curar exuberante, excedentaria- eran, durante la fase activa del conflicto, agujeros, úlceras o necrosis, con relés cerebrales siempre localizados en el cerebro propiamente dicho.

El descubrimiento de estas correlaciones sistemáticas marcó, en 1987, el nacimiento del Sistema Ontogenético de los Tumores y Equivalentes del Cáncer que, tras la Ley de Hierro del Cáncer, y la Ley Bifásica de las Enfermedades, constituye la primera clasificación sistemática del conjunto de la medicina.

En este contexto el término ontogenético significa que ni la localización del Foco de Hamer en el cerebro, ni el tipo de los tumores o de necrosis -es decir, su formación histológica- son casualidad. Por el contrario, todo está programado de forma muy lógica e inteligible por la historia de las transformaciones ocurridas en el individuo desde la fecundación hasta su perfecta constitución, es decir, la ontogénesis.

Se dice que la ontogenia es la recapitulación de la filogenia. Eso significa que la evolución de las diferentes especies hasta llegar al hombre queda resumida durante la fase embrional e infantil. En el desarrollo embrionario sabemos que existen tres hojas embrionarias diferentes que se forman desde el preciso instante del desarrollo del embrión, y de las que derivan todos los órganos:

  • la capa embrionaria interna, o endodermo,
  • la capa embrionaria media, o mesoderno, y
  • la capa embrionaria externa, o ectodermo.

Cada célula, cada órgano del cuerpo está ligado a una de estas hojas.
Las células y los órganos que se han desarrollado a partir de la hoja embrionaria interna (endodermo) tienen sus relés, es decir, sus bases de control, en el tronco cerebral, la parte más antigua del cerebro. En caso de desarrollo de cáncer los órganos derivados de esta hoja embrionaria presentan tumores compactos del tipo adenocito.

Todas las células y órganos que se han desarrollado a partir de lahoja embrionaria externa (ectodermo) tienen su relé de control en el córtex cerebral o telencéfalo, la parte más nueva de nuestro cerebro. En caso de cáncer, todos ellos muestran reducción celular en forma de úlceras o de pérdidas funcionales a nivel orgánico, por ejemplo, una diabetes o una parálisis.

Por lo que respecta a la hoja embrionaria media, distinguimos un grupo más antiguo y un grupo más reciente. Las células y órganos que pertenecen al grupo más antiguo de la capa embrionaria media tienen su relé en el cerebelo, es decir, forman parte del cerebro antiguo y, consecuentemente, en caso de cáncer desarrollarán tumores compactos en su fase de actividad conflictual y, más concretamente, del tipo adenocito.

Las células y órganos que forman parte de la capa embrionaria media más nueva tienen sus puntos de control en la médula cerebral, y en caso de cáncer, en la fase activa de conflicto presentan necrosis, maceraciones óseas o incluso reducción celular. Por ejemplo, las caries dentales, agujeros en el bazo, riñones u ovarios, que se denominan respectivamente: osteolisis ósea, necrosis del bazo, riñones u ovarios.

Todo esto muestra que el cáncer no es el hecho absurdo de unas células que proliferan al azar sino un fenómeno completamente comprensible y ya previsible, que sigue unas directrices muy precisas según sus datos ontogenéticos.

Si he comprendido bien, no todas las proliferaciones celulares son idénticas. Para tener una visión de conjunto más clara, ¿podría usted ejemplarizarnos estos diversos crecimientos a través de algunas enfermedades?

Sí, y ésta es la verdadera razón de que hasta ahora no se haya podido encontrar todavía una explicación sistemática a la génesis del cáncer: sencillamente se desconocía su sistema de funcionamiento.

Según las concepciones de la medicina tradicional, a la que se denomina medicina académica pero que yo he rebautizado comomedicina de escolares, se realizaban clasificaciones que no tenían absolutamente nada de sistemáticas. Se diagnosticaba un cáncer cuando unas células manifestaban un crecimiento excesivo. Sin embargo, tal como podemos ver actualmente, las células pueden presentar un crecimiento excesivo durante el transcurso de fases completamente diferentes. Vemos así que hay células que pueden proliferar durante la fase de actividad conflictual y células que pueden manifestar un crecimiento excesivo durante el transcurso de la fase de curación del conflicto.

Tomemos por ejemplo un paciente que presenta un conflicto de indigestión, es decir, del cual hasta el momento había ya tragado una parte pero que no puede digerir por completo. Compró una casa y de repente se da cuenta que el contrato de compra no es válido, que se ha dejado engañar y que pierde la casa. Puede, por ejemplo, desarrollar un carcinoma de estómago, es decir, una enorme proliferación celular en el estómago, que es lo que llamamos adenocarcinoma de estómago con crecimiento en forma de coliflor. Desarrolla este carcinoma durante el transcurso de la fase activa del conflicto y su Foco correspondiente está localizado en el cerebro antiguo, al lado derecho del tronco cerebral, en lo que denominamos puente.

Otro ejemplo: un paciente tiene un conflicto de agua, es decir, un conflicto a propósito de un líquido, agua o cualquier cosa similar. Por ejemplo, un joven que está nadando en el Mediterráneo, está exhausto y va a ahogarse pero en el último segundo es salvado y reanimado. A partir de ese momento sueña durante meses que se ahoga y decide firmemente no volver a meterse en el agua. Durante este tiempo desarrolla un cáncer necrótico del parénquimo renal, es decir, que en el tejido esponjoso del riñón se produce una reducción celular con necrosis hasta que finalmente todo el tejido renal queda agotado y el riñón queda fuera de funcionamiento. Años más tarde el conflicto se resuelve finalmente porque la hija pequeña del paciente deseaba patalear en el agua, y el paciente decide por primera vez ir a pasar sus vacaciones en el mar. Durante la fase de curación se forma un grueso quiste renal o proliferación celular que se solidifica y endurece por medio de una especie de tejido conjuntivo y cuya finalidad final es la de reconvertirse en tejido renal y eliminar la orina.

En general nos llegamos a preguntar cuál era, en el origen, la finalidad y razón de ser de los tumores, o quizá incluso, cuál era su sentido actual. En efecto, los cánceres y tumores no estaban desprovistos de significado, de finalidad, sino que por el contrario eran algo muy juicioso. Tomemos por ejemplo el bocado que ya está en el estómago y que por tanto se ha tragado pero que no puede ser digerido porque es demasiado grande. Para solucionar esta situación el organismo desarrolla una enorme tumor. Pero este tumor no es algo absurdo, insensato, se trata de células digestivas, células intestinales que producen enormes cantidades de jugo digestivo, y que convierten al bocado tragado en algo digerible de manera que en el reino animal este trozo pueda ser digerido y proseguir su curso. De igual manera hemos visto que en el origen de los quistes existía la finalidad de construir de nuevo un gran trozo de riñón capaz de eliminar la orina.

He aquí pues el significado de los diversos tumores de crecimiento celular que antiguamente no éramos capaces de discernir, pero que en la actualidad podemos ya diferenciar y especificar en su triple plano cerebral, histológico y conflictual. Todas estas correlaciones se resumen en el sistema ontogenético de tumores y equivalentes del cáncer ya que todas las enfermedades que conocemos en medicina se desarrollan de conformidad a estas cuatro leyes biológicas, responden a ellas punto por punto y verifican notablemente el sistema ontogenético de tumores y equivalentes del cáncer. A nivel psíquico y cerebral, todos los síntomas en una misma fase son idénticos, sólo se diferencian a nivel del órgano. En este nivel, cada órgano con relé de control en el cerebro antiguo provoca proliferación celular en la fase de actividad conflictual, mientras que los órganos dirigidos por el telencéfalo presentan, en su fase activa de conflicto, agujeros, necrosis, úlceras, etc. Es decir, reducciones celulares. Durante la fase de curación todo ocurre a la inversa: los órganos dirigidos por el cerebro antiguo reducen sus tumores con la ayuda de microbios especializados en tanto que durante esa misma fase de curación, los agujeros y úlceras de los órganos gobernados por el telencéfalo son rellenados de nuevo con ayuda de virus y bacterias, acrecentándose el volumen de la zona afectada por medio de una tumefacción.

¡He aquí pues la cuarta Ley!

En efecto, el Sistema Ontogenético de los Microbios.

En este contexto se oye hablar mucho del sistema inmunitario. Díganos pues, Doctor Hamer, ¿cuál es el papel que juegan los microbios en su sistema?

Hasta ahora concebíamos sólo a los microbios bajo la óptica de las enfermedades infecciosas, de las cuales se les hacía responsables. Esta manera de ver las cosas parecía evidente ya que en todas las enfermedades infecciosas se encontraban siempre microbios. Pues bien, eso no es cierto. De la misma manera que el sistema inmunitario global no es más que un espejismo… construido a base de hipótesis. En las enfermedades consideradas infecciosas habíamos olvidado o negligido su primera fase.

Estas enfermedades, supuestamente infecciosas, estaban siempre precedidas por una fase de actividad conflictual y es únicamente una vez que se ha resuelto el conflicto cuando los microbios pueden entrar en acción. Y por supuesto, están activados y dirigidos por nuestro cerebro. Lejos de ser nuestros enemigos, son auxiliares nuestros en el sentido de que se llevan los escombros de las secuelas del cáncer una vez que el tumor, tras haber cumplido su misión, deja de ser útil. O bien son las bacterias y los virus los que ayudan rellenando agujeros y reparando los desperfectos ocasionados por las necrosis y las destrucciones tisulares del otro grupo, el grupo gobernado por el telencéfalo. Son pues, de principio a fin, nuestros fieles ayudantes, nuestros trabajadores despreciados. La idea que se tenía del sistema inmunitario (un ejército luchando contra la invasión de los villanos microbios) es absolutamente falsa.

En este contexto nos viene al pensamiento la tuberculosis. Concretamente, la tuberculosis pulmonar. ¿Qué era pues lo que tenían las personas que hace apenas medio siglo hacían curas de salud para curar su tuberculosis pulmonar?

Dejando aparte la tuberculosis pleural, y limitándonos a la tuberculosis pulmonar propiamente dicha, podemos afirmar que ésta es de hecho la fase de curación tras un cáncer preliminar de manchas redondas en el pulmón. Este cáncer de manchas redondas en el pulmón tiene siempre como conflicto el miedo a morir y está siempre gobernado por el tronco cerebral.

En consecuencia durante la fase activa del conflicto aumenta de tamaño, en tanto que durante la fase de curación se reduce gracias a las micobacterias (bacterias de la tuberculosis) en la medida en la que éstas se encuentran presentes, caseificadas y expectoradas a menudo en esputos sangrientos y dejando tras de sí cavernas que aportan al pulmón una capacidad respiratoria sensiblemente superior a la que tenía anteriormente mientras estaba atestado de cánceres compactos bajo la forma de manchas redondas.

Por ello mismo, si durante la fase de curación faltan las micobacterias de la tuberculosis, las manchas redondas permanecen. Hoy en día todavía tenemos la posibilidad de ver a menudo, tras varios decenios, esas viejas manchas redondas en el pulmón, sin capacidad ya de crecimiento pero que no han sido desactivadas. En su lugar, y en los tiempos en las que las micobacterias de la tuberculosis estaban omnipresentes, veíamos cavernas, es decir, manchas redondas vaciadas.

Doctor Hamer, ahora podríamos enfocar la terapia práctica de los conflictos. ¿Es, en principio, una terapia que se desarrolle por la vía del diálogo?

Únicamente hablando, no. No tenemos necesidad de esta terapia de diálogo tal y como antiguamente era utilizada por la psicoterapia, en la que se debía hablar conjuntamente de no importa qué problema. Se debe hablar, naturalmente, pero lo mejor es remitirnos de nuevo al reino animal. En efecto, el animal no puede sobrevivir, no puede resolver su conflicto si no es con una solución real. El ciervo, por ejemplo, sólo sobrevivirá si reconquista su territorio. La madre, a quién el predador arrebata el hijo, sólo sobrevivirá si ella le obliga a soltar a su cachorro, persiguiéndole, o bien -eso es algo que la naturaleza ha previsto-, si la madre vuelve rápidamente a quedar preñada. Entonces el conflicto queda realmente resuelto.

A decir verdad, así es como deberíamos proceder también nosotros en nuestras relaciones humanas, intentando encontrar desde el principio una solución real al conflicto, es decir, resolverlo en forma práctica. El ciervo necesita recuperar su territorio o bien conquistar otro. La solución práctica es la mejor y más duradera: es la solución definitiva.

Sólo cuando esta solución se muestra impracticable podemos intentar una terapéutica a través del diálogo para, digamos, tener una solución de recambio como vía de salida, como escapatoria. Aquí es preciso que puntualicemos también que la terapia aplicada hasta ahora en todas las dificultades psíquicas ha sido la de calmar, desconectar, tomar tranquilizantes, siendo lo importante calmarse.

En realidad, si la naturaleza ha programado un estrés no es sin razón, puesto que es sólo bajo estrés que el individuo puede resolver el conflicto. Para encontrar una solución real, lejos de suprimir el estrés, es necesario por el contrario acentuarlo todavía más para poner al individuo en disposición de resolverlo. Si se administrasen tranquilizantes al ciervo, jamás podría recuperar su territorio, ya que su actividad quedaría paralizada. Se puede ver pues que, en psiquiatría, administrando tranquilizantes -es decir, productos químicos- para calmar a los pacientes, lo único que se consigue es cultivar enfermedades crónicas, ya que a estos pacientes, privados de sus propios medios naturales para resolver conflictos, no les queda viento en las velas. De esta manera estos infelices no podrán jamas resolver sus problemas, y a menudo quedan condenados a pasar su vida entera tras los barrotes de la psiquiatría.

Doctor Hamer, ¿cómo concebir, de forma concreta, una terapéutica basada en las cuatro leyes biológicas descubiertas por usted?

Debemos asimilar que el paciente tiene esos tres niveles imaginarios: el plano psíquico, el cerebral y el orgánico, aunque de hecho el conjunto de los tres constituye un único organismo. La terapia debe pues desarrollarse a esos tres niveles imaginarios, o extenderse a ellos.

Debemos verificar si el paciente es diestro o zurdo, a fin de averiguar cuál es su hemisferio cerebral predominante y del cual se sirve fundamentalmente.

Además, es importante constatar su situación hormonal actual, precisar si, por ejemplo, una paciente se encuentra en fase de madurez sexual, si está encinta o si toma la píldora (que bloquea la producción hormonal). Lo mismo es aplicable -con los oportunos cambios-, al hombre. En efecto, debido a modificaciones hormonales, puede que la predominancia hemisférica cambie de lado, puesto que una mujer que toma la píldora reacciona normalmente con un conflicto de territorio masculino si su pareja la deja o abandona el hogar.

No basta pues con encontrar el conflicto en el plano psíquico, debemos también poder localizarlo con exactitud en el cerebro, en función de la fase conflictual que encontremos en el momento de la anamnesis y examen del paciente.

Y, naturalmente, es preciso que este conflicto, esta enfermedad cancerosa en el órgano, se corresponda siempre sin ambigüedad con el Foco de Hamer cerebral, es decir, que a cada localización determinada en el cerebro le corresponda siempre una enfermedad cancerosa en un órgano también determinado del cuerpo y viceversa.

Hemos dicho ya que el conflicto debe quedar resuelto a partir del psiquismo, y que lo mejor es encontrar la solución real, porque la base del conflicto es un problema real. Siempre que sea posible, es preciso que el hijo enfermo de la madre -el que tuvo un accidente- se cure y restablezca. Un hombre que ha perdido su trabajo y que, como consecuencia, presenta un conflicto de territorio, debe encontrar otro empleo o bien crearse un nuevo territorio apuntándose a un club, a una asociación, jubilarse o dedicarse a un hobby.

Para cada conflicto existen múltiples posibles soluciones. Muchas de ellas están ya programadas por la naturaleza. Por ejemplo, antiguamente los depredadores devoraban muchos corderos. La ovejas solucionaban el conflicto quedando preñadas lo más rápidamente posible y trayendo al mundo nuevo corderos. En los humanos, y de forma general, todo tipo de conflicto se detiene al tercer mes de gestación, y ya no se puede seguir desarrollando ningún cáncer porque el embarazo tiene prioridad absoluta.

En el plano cerebral, la mayoría de las complicaciones aparecen durante la fase de curación cuando, como signo de curación, aparece el edema cerebral local presentándose hipertensión craneal (intracraneal), y siendo preciso vigilar al paciente para que no entre en coma. Durante esta fase, y en los casos más leves, el café, el té, azúcar de uva (glucosa), la vitamina C, la Coca Cola y una bolsita de hielo en la cabeza resultan -como en la antigüedad- más que suficientes. En los casos graves la elección de remedio recae actualmente en la cortisona por su acción enlentecedora. Lacortisona no es un remedio contra el cáncer sino más bien un medio puramente sintomático contra el edema cerebral así como contra todos los edemas orgánicos de la fase de curación como por ejemplo, los edemas óseos provocados por la inflamación del periostio.

En los casos graves, y como regla general, conviene recordar lo siguiente:

  • absorber poco líquido;
  • mantener la cabeza sobrealzada;
  • evitar la exposición directa al sol y, en caso de edema cerebral lateral,
  • evitar en la medida de lo posible inclinar la cabeza hacia el lado del edema cerebral.

En el plano orgánico, la única terapia que se contemplaba hasta ahora era la de suprimir el tumor -o lo que se creía un tumor-, sin intentar averiguar si éste se había desarrollado durante la fase activa del conflicto o bien si se trataba de una proliferación desarrollada en el transcurso de la fase de curación. Se extirpaban indiferentemente uno y otro. Este nivel orgánico se nos presenta hoy en día bajo una perspectiva completamente diferente. Cuando el conflicto ha quedado resuelto, el tumor no debe ser operado ni eliminado salvo en rarísimos y excepcionales casos.

Los tumores de proliferación en fase de curación -que es la forma correcta de definirlos- raramente tienen necesidad de ser operados. Tan solo en aquellos casos en los que ocasionan una importante molestia mecánica o limitan al paciente en sus movimientos, como sucede por ejemplo con un gran quiste renal, o un gran bazo consecuencia, durante la fase de curación, de una necrosis preliminar. (La necrosis del bazo se presenta en el substrato orgánico en un conflicto de sangrado y herida, con caída de trombocitos en la fase de actividad conflictual, y como esplenomegalia, es decir, aumento del volumen del bazo, en la fase de curación).

Bajo el prisma de la Nueva Medicina es preciso un replanteo total y un cuestionarse en cada ocasión acerca de lo que debe hacerse, lo que es prudente o no hacer. En efecto, si le dejamos al paciente la elección de si quiere o no operarse de un pequeño tumor intestinal, sabiendo el paciente que el conflicto que lo ha generado está ya definitivamente resuelto y que, en consecuencia, este tumor según un grado de probabilidades rayando la certeza, no va a proseguir su desarrollo, resulta evidente que en un 99,9% de los casos el paciente responderá: «Doctor, dejemos el tumor tal como está. No me molesta y no volverá a molestarme en los 30-40 años que me quedan todavía de vida».

Doctor Hamer ¿podría usted explicarnos por qué esta Ley de Cáncer se denomina de Hierro?

Porque al igual que el hierro es inalterable. Y es una ley biológica de la misma manera que es ley biológica el que un niño tenga siempre un padre y una madre, ya que se precisa la participación de los dos para engendrar un nuevo ser. Es así como en la Nueva Medicina tenemos cuatro leyes biológicas que son casi de hierro. La segundaes la Ley de las Dos Fases de las Enfermedades. La tercera es el Sistema Ontogenético de los Tumores y Equivalentes del Cáncer. Y la cuarta es el Sistema Ontogenéticamente condicionado de los Microbios.

Todas estas leyes son de hierro al igual que la Ley de Hierro del Cáncer, y todas son, en el sentido estrictamente científico del término, reproducibles, es decir, pueden ser controladas y verificadas desde el primer caso que se nos presente. Decir que se tiene una ley biológica quiere decir simplemente que se tiene una regla que enuncia cómo y según qué ley algo tiene lugar. No detalla lo que se ha programado. Es según estas mismas reglas matemáticas como se calcula el debe y el haber. Lo que es determinante es lo que el organismo tiene programado. Si ha programado la solución del conflicto, es decir, si el conflicto se resuelve, entonces la terapia se desarrolla casi automáticamente. Si no puede programar la solución del conflicto y éste permanece sin resolver, entonces, y en virtud de estas mismas leyes, el individuo muere. He aquí por qué estas leyes se denominan Leyes de Hierro Biológicas.

Doctor Hamer, ¿qué papel juega en este contexto el factor tiempo, en particular en lo que respecta a las complicaciones a las que se deberá hacer frente durante la fase de curación?

Naturalmente, el paciente pregunta a su médico: «¿Cuánto tiempo más o menos pasará hasta que esté curado de mi enfermedad?»

Por poco que hayamos hecho bien nuestro trabajo, localizando el Síndrome Dirk Hamer y el momento en que el conflicto ha quedado resuelto, podemos calcular la duración del conflicto. A condición de haber realizado una buena anamnesis, habremos podido discernir la intensidad del conflicto. Y en función de la duración y de la intensidad del conflicto estamos en disposición de evaluar la masa de conflicto.

Normalmente es un hecho que en el 90% de los casos no se presentan complicaciones notables en la fase de curación. Queda el 10% restante. En los casos en los que el conflicto ha durado más tiempo o la intensidad ha sido considerable (o ambas cosas a la vez) el paciente presenta una masa importante de conflicto que, una vez solucionado, puede crear complicaciones en forma de edemas cerebrales y, sobre todo, de crisis epilépticas o epileptoides. Debemos conocer estas complicaciones que, por otro lado, no son temibles más que en un 10% de los casos en los que, llegado el momento, pueden conducir a la muerte.

Lo más importante es, sin embargo, que a pesar de todas estas complicaciones el paciente tenga hoy en día un nuevo enfoque de su enfermedad a través del cual sabe que su médico está perfectamente al corriente del desarrollo global de ésta -fase activa y fase de solución del conflicto-, y que es capaz de controlar y dominar la situación. Como consecuencia el paciente confía verdaderamente en su médico, y con toda razón.

Ahora, y gracias a la Nueva Medicina, podemos practicar una terapia bien dirigida a sabiendas, cosa que anteriormente y bajo la perspectiva de la medicina académica no nos era posible. Gracias a este conocimiento global de la medicina el paciente no cae nunca en un estado de pánico. O por lo menos, se asusta lo mismo que cuando antiguamente su médico le diagnosticaba una angina purulenta. Y sin embargo, ¿qué era una angina purulenta ? Respuesta: la fase de curación consecutiva a un adenocarcinoma de las amígdalas.

Cada vez más a menudo los médicos proceden a excisiones exploratorias e informan a los pacientes -lo que es correcto- que tienen un carcinoma amigdalino. Lo que pasa luego es que el paciente, que no sabe nada de la Nueva Medicina, entra en un estado de pánico. Este pánico puede general nuevos choques conflictuales tales como el miedo al cáncer y el terror a la muerte, que desencadenan un nuevo cáncer. El primer diagnóstico médico queda así, en apariencia, brillantemente confirmado.

¿Qué sucede en los animales? En el reino animal prácticamente no se ven nunca aparecer las supuestas metástasis. Un profesor austríaco de Klagenfurt ha encontrado una original fórmula que explica este fenómeno: «Hamer nos toma a todos por imbéciles. Dice que los animales tienen suerte porque no comprenden la voz de los médicos-jefe, lo que explica que no desarrollen metástasis».

Según usted pues, ¿las metástasis no existen?

Sin ningún tipo de rodeo le contesto que NO. Lo que los ignorantes académicos tomaban como metástasis son nuevos cánceres desencadenados por nuevos choques conflictuales completamente yatrógenos, es decir, choques provocados por diagnósticos y pronósticos médicos.

Esta fábula de las metástasis se fundamentaba en hipótesis sin pruebas e indemostrables. Ningún investigador ha podido todavía encontrar una sola célula cancerosa en la sangre arterial de un paciente con cáncer. Y es ahí donde deberían ser localizadas, si es que se dirigen a nado hacia la periferia, es decir, hacia las regiones exteriores del cuerpo. Es sobre esta fábula, completamente hipotética, en que se basa la tesis de que las células cancerosas durante su migración -todavía no observada nunca a través de la sangre- se habrían incluso metamorfoseado durante el camino con lo que, por ejemplo, una célula cancerosa del intestino (que en el interior del intestino produce un tumor compacto en forma de coliflor) de repente empezaría a emigrar hacia los huesos donde será capaz de metamorfosearse en necrosis. Se trata de una hipótesis aberrante digna de un dogmatismo medieval.

El sistema ontogenético demuestra de forma definitiva que es imposible que una célula gobernada por el cerebro antiguo, y que desarrolla tumores compactos, pueda dejar de repente los puntos cerebrales que la gobiernan, se relacione con el telencéfalo y fabrique una necrosis. Se puede admitir que casi el 80% de los segundos y terceros cánceres han sido provocados por la maquinaria insensata de ignorantes que se hallan todavía en el estadio de escolares de la medicina.

Doctor Hamer, en la génesis del cáncer ¿qué papel juegan las substancias denominadas cancerígenas? ¿Piensa usted que una nutrición sana puede detener o retardar el cáncer?

No existen substancias cancerígenas. Se han realizado innumerables experimentos de vivisección en animales y sin embargo todavía no se ha podido demostrar realmente que se haya encontrado una substancia cancerígena. Desde luego, las pruebas que se han realizado han sido completamente idiotas, ya que durante un año se ha estado inyectando en las narices de ratas unas dosis concentradas de formaldehído, que estas pobres bestias evitan normalmente como veneno virulento, realizando grandes rodeos. Al final las ratas han desarrollado un cáncer de la mucosa nasal. De hecho, el cáncer no fue debido al aldehido fórmico o formol, sino que dado que estas pobres ratas tienen horror a este producto, que es su bestia negra, han desarrollado un conflicto de mucosa nasal, por tanto un Síndrome Dirk Hamer, un conflicto biológico de no querer oler, podríamos decir.

Además, se sabe que no es posible producir cánceres en órganos cuyas conexiones nerviosas con el cerebro han sido cortadas. No obstante esto se han llevado a cabo investigaciones sobre casi 1.500 substancias pretendidamente cancerígenas, que deben tan solo su etiqueta de producto cancerígeno a la reglamentación insensata impuesta por la vivisección. Con ello no quiero decir que todas estas substancias resulten inofensivas para nosotros, únicamente que no producen cáncer o, por lo menos, que no lo producen sin la intervención del cerebro. En efecto, hasta ahora era admitido que el cáncer era resultado de células orgánicas que se disparaban por azar.

Todas estas elucubraciones relativas al papel cancerígeno del tabaco, al poder cancerígeno de la anilina o de otros productos, son tan solo puras hipótesis que no han sido jamás probadas y que resultan indemostrables. Por el contrario, se ha observado que los 6.000 hamster expuestos al humo de cigarrillo habían vivido una media de tiempo superior que sus 6.000 congéneres que durante 6 años no habían sido ahumados. El hecho que les pasó por alto fue que los goldhamsters no tienen en absoluto miedo al humo por la simple razón de que viven bajo tierra. He aquí por qué en su cerebro no tienen registrado ese código, esa señal de alarma contra el humo.

En los ratones domésticos sucede todo lo contrario, a la menor emanación de humo les entra un terrible pánico y huyen. Cuando en la Edad Media se veía una multitud de ratones huyendo de una casa, se podía estar seguro de que en uno u otro rincón había fuego. Por tanto, a un cierto número de estos ratones se les puede provocar cáncer -en forma de manchas redondas en el pulmón-, lo que se corresponde con un conflicto de miedo a la muerte.

Bastan estos dos ejemplos para explicar y hacer comprender que todas las experiencias que actualmente se llevan a cabo en animales no son más que crueldad absurda hacia éstos, dado que en todas ellas se presume que el alma del animal no existe. Resumiendo, no hay ninguna prueba de que existan substancias cancerígenas que actúen sobre un órgano, sin que medie la intervención del cerebro.

¿Y en cuanto a los efectos radioactivos?

La exposición a una radiación radioactiva, como la liberada en el accidente nuclear de Chernobil, destruye indiscriminadamente las células del cuerpo, siendo sin embargo las más perjudicadas las células germinativas (los gametos), y las células óseas, ya que son estas células las que la naturaleza ha dotado de una tasa de división más elevada.

Cuando la médula ósea -donde se fabrica la sangre- queda perjudicada y empieza su curación, asistimos a una leucemia que, en principio, es la misma leucemia que se presenta durante la fase de curación consecutiva a un cáncer óseo desencadenado por una desvalorización de sí mismo. Por tanto, y rigurosamente hablando, debemos decir que los síntomas sanguíneos de la leucemia son no específicos, es decir, que no se manifiestan únicamente en el cáncer sino en toda curación de la médula ósea. El hecho de que apenas existan leucémicos sobrevivientes de su enfermedad se debe únicamente a la ignorancia de la medicina de escolares, cuyo tratamiento con quimio y radioterapia destruye lo que todavía quedaba de la médula ósea, es decir, que hace justo lo contrario de lo que debería haberse hecho. En conclusión, la radioactividad es perniciosa, destruye las células, pero no provoca cáncer porque éste puede sólo desencadenarse a partir del cerebro.

¿Y la alimentación sana?

Pensar que la alimentación sana puede impedir el cáncer es también algo absurdo. Naturalmente, un individuo -hombre o animal- que lleva una alimentación sana está menos sujeto o receptivo a todo tipo de conflictos, de la misma manera que resulta evidente que un rico desarrolla diez veces menos cánceres que un pobre porque se consiguen resolver mayor cantidad de conflictos con una cartera bien repleta.

Por igual motivo, un animal fuerte y robusto pilla menos cánceres que un animal enfermo y viejo. Es algo innegable que está en la naturaleza de las cosas, lo cual no quiere decir sin embargo que la vejez sea carcinógena. Lo que le sucede al animal de más edad es que, simplemente, es más débil. El ciervo viejo es menos fuerte y por tanto es expulsado fácilmente de su territorio por un ciervo más joven que rebose fuerza.

Doctor Hamer, en la medicina tradicional el dolor es considerado como un signo negativo. ¿Qué papel juega el dolor en la Nueva Medicina?

Pues sí, los dolores son un capítulo particularmente difícil. Existen diferentes calidades de dolor. Hay dolores en la fase activa del conflicto, tales como la angina de pecho o la úlcera de estómago. Y existe otro grupo: los dolores existentes en el curso de la fase de curación, que vienen provocados por inflamaciones, tumefacciones o edemas, o incluso por cicatrizaciones.

Los dolores de la fase activa del conflicto, tales como los de la angina de pecho, desaparecen inmediatamente que se ha resuelto el conflicto. Son dolores que, si se quiere, pueden ser resueltos psíquicamente.

Por el contrario, los dolores de la fase de curación que, en principio, son algo positivo, no pueden ser eficazmente combatidos a menos que el paciente comprenda las relaciones de causa y efecto, preparándose y adaptándose a ellos como a un trabajo realmente importante que se debe realizar. Naturalmente existen formas de atenuar los dolores del paciente, ya sea por medicamentos o por algicidas de uso externo.

Tanto en el hombre como en el animal, los dolores tienen fundamentalmente un sentido biológico: el de inmovilizar el organismo por completo y el órgano, de manera que la curación pueda realizarse de forma óptima. Así es como sucede en la curación del cáncer de hueso. La extensión del periostio (la membrana conjuntiva que recubre el hueso) provoca fuertes dolores durante la fase de curación. O bien, por ejemplo, la tensión de la cápsula del hígado, que resulta dolorosa durante el hinchamiento del hígado en la fase de curación de una hepatitis. Debe también mencionarse el dolor cicatricial en el transcurso de la fase tardía de curación, por ejemplo, durante el espesamiento del derrame pleural tras un cáncer de pleura, o bien el espesamiento de las ascitis, que constituye la fase de curación de un cáncer del peritoneo.

Lo terrible es que en la medicina actual todos los pacientes que tienen cáncer y dolores, aunque sean ligeros, reciben inmediatamente morfina o derivados de la morfina. Incluso una sola inyección puede resultar mortal, puesto que modifica aterradoramente la oscilación global del cerebro y desmoraliza al paciente por completo. A partir de ese momento también queda paralizado el intestino y no puede ya elaborar y asimilar los alimentos. El paciente desarrolla abulimia y no se da cuenta de que está a punto de que le maten cuando se encontraba ya en la fase de curación, y que tan solo con que se dejara a la naturaleza seguir su curso recuperaría la salud en el espacio de algunas semanas.

Decirle a un preso que se le va a ejecutar en dos semanas despierta una gran oleada de compasión, aunque sea uno de los peores criminales. Pero si se le dice a un paciente que se le va a ejecutar a través de inyecciones de morfina y que durará quince días, seguro que prefiere soportar los dolores antes que dejarse matar.

Cuando los pacientes consideran de forma retrospectiva el tiempo relativamente corto que han durado los dolores, agradecen que se les haya evitado la muerte por morfina, a la cual habrían sucumbido con toda seguridad en su fase de curación, al cabo de dos o tres semanas de recibir morfinaFortralValoron o Temgesic.

¿Pero es que acaso los médicos no saben esto?, se preguntan incrédulos. ¡Claro que lo saben los médicos! Se acorazan tras el punto de vista, dogmático y confortable, de que el dolor es el principio del fin y de que, de todas maneras, ya no se puede hacer nada. Empecemos pues por abreviar el proceso. La curación natural del cáncer queda simplemente ignorada por razones dogmáticas a fin de que el cáncer continúe siendo… una enfermedad de la que se muere obligatoriamente y a través de la cual el paciente continúa siendo manipulable.

¿Cómo resumiría lo esencial de la Nueva Medicina, lo más importante, su eje central?

La Nueva Medicina representa un giro total de la medicina de hipótesis practicada hasta ahora. A la medicina de escolares le hacen falta entre quinientas y mil hipótesis y algunos millares de hipótesis suplementarias para que, a excepción de un batiburrillo de hechos disparatados, no sepa nada en absoluto, y no haga más que trabajar basándose en estadísticas.

Por primera vez en el conjunto de la medicina, la Nueva Medicina sabe en función de qué leyes biológicas se desarrollan todas las enfermedades. Y sabe que en el fondo no son enfermedades reales sino que estas fases de conflicto activo son necesarias, que están ahí para ayudar a resolver un conflicto que teníamos en el marco de la naturaleza y que, en el fondo, el conflicto es para nosotros algo bueno. Es la primera vez que nos es posible tener realmente una visión sinóptica, en conjunto, de nuestras enfermedades. A nivel psíquico, en el plano cerebral y en el plano orgánico, en función de las cuatro leyes biológicas. Y por primera vez en mucho tiempo, la medicina vuelve a ser un arte, un arte para el médico que tenga buen sentido y manos cálidas. No se puede ya detener a la Nueva Medicina. Ni tampoco la nueva manera de pensar que emerge de ella, el fin de la peor forma de esclavitud existente: la total alienación de sí mismo.

El miedo resultante de la pérdida de confianza natural en nosotros mismos y en nuestro cuerpo; el abandono de la escucha instintiva de nuestro organismo, van perdiendo pie y empiezan a tambalearse. Y, comprendiendo las relaciones de causa y efecto entre el psiquismo y el cuerpo, el paciente capta también el mecanismo del miedo, el pánico irracional desencadenado por el pronóstico de los peligros -supuestamente inevitables-, que a partir de ahora sólo son inevitables y mortales en la medida que el paciente se lo crea y tenga miedo.

Se acaba también el inmenso poder de los médicos, engendrado por el miedo del pretendido mecanismo autodestructor del cáncer, por el temor del supuesto crecimiento incontrolado de las metástasis que consumen la vida, etc. La responsabilidad que los médicos nunca han asumido ni han podido asumir, tendrán que restituirla ahora a los propios pacientes. Esta Nueva Medicina sólo puede significar la auténtica libertad para aquel que la ha comprendido realmente.

Para finalizar, doctor Hamer, ¿puede explicarnos qué significa el título original de su libro Vermächtnis einer neuer Medizin, es decir Legado de una Nueva Medicina?

Considero que el descubrimiento de la Nueva Medicina es el legado de mi hijo Dirk, cuya muerte originó mi cáncer testicular. Yo administro este legado para transmitirlo fiel y concienzudamente a todos los pacientes, de forma que con ayuda de esta Nueva Medicina queden capacitados para comprender su enfermedad y que, habiéndola comprendido, la puedan vencer recobrando así la salud.

Entrevista al Doctor Ryke Geerd Hamer

domi Tu cerebro juzga las caras incluso ¡antes de verlas!

Imagen: The Journal of Neuroscience

De la importancia de las caras para nuestro cerebro ya hemos hablado muchas veces en Neurolab. Somos buenos reconocedores de rostros y no solo podemos distinguir una cara en medio de otros patrones visuales, sino que distinguimos la carga emocional de un gesto con poquísimas pistas. Pero lo que acaba de confirmar un equipo de investigadores de la Universidad de Nueva York es todavía más impresionante: nuestro cerebro es capaz de juzgar el nivel de confianza que merece una cara antes incluso de que esa información pase a nivel consciente.

¿Y esto cómo se mide? Los investigadores generaron un espectro de caras simuladas con distintos niveles de agresividad, de modo que unas inspiraban más confianza que otras. La posición delas cejas y los labios, según otros muchos estudios, juegan un papel determinante, como puedes comprobar en este vídeo de la Universidad de Princeton.

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Una vez obtenido el catálogo de caras, los voluntarios eran expuestos a estas imágenes por un período de 33 milisegundos y a continuación se les ponía durante 167 milisegundos una máscara neutra para asegurarse de que no siguieran viendo la primera imagen. Al mismo tiempo se analizaba la actividad cerebral de los sujetos y lo que vieron los neurocientíficos fue que, a pesar de que las personas no eran ni siquiera conscientes de que habían visto una cara, cuando se les exponía a un rostro de esos que preferirías no encontrarte en un callejón oscuro, un pequeño núcleo del cerebro conocido como la amígdala se activaba como si fuera un botón de emergencias.

Situación de la amígdala en el encéfalo (Wikimedia Commons)Situación de la amígdala en el encéfalo (Wikimedia Commons)

«La amígdala presentaba respuestas muy sensibles a pesar de que, objetivamente, la cara no era vista», explica Jonathan Freeman, uno de los autores del estudio. Este núcleo del cerebro, implicado en algunas respuestas muy primarias como el miedo, presenta una respuesta antes de que la información pase a la corteza cerebral y la persona sea capaz de tomar una decisión. «La amígdala está fuertemente asociada con el procesamiento de señales de amenaza«, explica el profesor de Psicología Ricky van der Zwan. «Trabaja para mantenernos salvo. Intenta darnos la oportunidad de sobrevivir un poco más, en este caso, manteniéndonos lejos de la gente poco fiable«.

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Aunque el fondo del asunto ya se conoce bien desde hace años, lo que refuerza este estudio publicado en The Journal of Neuroscience hace unos días es que de alguna manera prejuzgamos y tomamos decisiones sobre la gente influidos por una primera impresión que no tiene que ver con criterios a nivel consciente. En otros contextos, los científicos ya han demostrado un fenómeno llamado «ceguera a la elección« por el cual somos capaces de justificar a posteriori decisiones que ni siquiera hemos tomado. En el caso de la amígdala, lo llamativo es que cuando los sujetos eran expuestos a la fotografía con más tiempo – y no subrepticiamente- ya no presentaba los mismos niveles de activación de la primera prueba.

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domi El cine inmortaliza el despropósito de que solo usamos el 10% de nuestro cerebro

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La leyenda urbana de que solo utilizamos el 10% de nuestro cerebro no parece conocer fronteras. El último empujón se lo acaba de dar una película que se estrena esta semana, dirigida por Luc Besson, en la que la protagonista, interpretada por Scarlett Johansson, toma una sustancia que potencia sus capacidades cerebrales. La película se llama “Lucy” y en el cartel oficial, que ya había visto pasar hace unos días por Twitter, dice literalmente: “Una persona normal solo utiliza el 10% de su capacidad cerebral. Ella utiliza el 100%”.

Que un medio como el cine, que llega a millones de personas, haga de caja de resonancia defalsas creencias como ésta ya me parece grave, pero la cosa se pone peor. Antes de nada, hay que explicar que este mito de que usamos solo el 10% de nuestro encéfalo no tiene ningún sentido y no se corresponde con nada de lo que se sabe hasta ahora en neurociencia. Sencillamente porque el cerebro no funciona así, no es como el motor de un fórmula 1 que va metiendo marchas y empleando distintos niveles de rendimiento según sea uno más listo o menos espabilado. Es más, muy al contrario, una actividad cerebral desmesurada (me refiero al flujo sanguíneo que se mide en las resonancias funcionales) es a menudo señal de algún tipo de problema en ciernes, como una demencia senil. Por explicarnos, un cerebro con problemas que se pone a trabajar el triple que uno sano, como si fuera una lavadora centrifugando, recluta más áreas de las que son necesarias y puede terminar sufriendo daños.

lucy_cartel_gEl secreto de la actividad cerebral no es, por tanto, un problema de emplear muchos recursos, sino que está más bien en la forma de emplearlos y cómo se combinan las señales neuronales y unas áreas con otras. Hay otros aspectos que pueden resultar antiintuitivos sobre su funcionamiento, como el hecho de que una actividad eléctrica sincronizada no indica que el sujeto esté pensando, sino que está dormido como un tronco o inconsciente, mientras que el pensamiento se manifiesta con un patrón desordenado de la señal. Pero eso es harina de otro costal.

Volviendo a la película. Conociendo esto (creo que debe haber millones de artículos en los últimos años desmintiendo el mito del 10%), el señor Luc Besson ha decidido seguir adelante con su guión y montar una historia de ficción. Bien. El problema, como digo, está en intentar reforzar la ficción con el argumento de que la ciencia respalda lo que nos quieres vender, por no hablar de la repercusión social que tiene un estreno de estas características. Y como muestra del daño que hace, me gustaría poner la pieza que han emitido este mediodía en el Telediario-1 de TVE.  Es muy breve, pero sustancioso:

Como veis, la redactora asume de entrada que lo del 10% es una “premisa real” y luego refuerza sus argumentos explicando que  Besson “habló con expertos, incluidos 12 premios Nobel para hacer reales los discursos del profesor Norman”. No sé quiénes son esos premios Nobel, pero quizá es hora de que en Estocolmo revisen sus criterios de excelencia. Por si fuera poco, todo el mensaje de la pieza del telediario está destinado a reforzar que la película es interesante porque contiene parte de verdad sobre la ciencia.  Y un instante después nos cuentan que “la promoción ha incluido una sesión de telepatía e hipnosis para despertar la curiosidad sobre el cerebro” (olé con olé) y como autoridad nos incluyen el testimonio de un señor que presentan como “mentalista experto en hipnosis“.

A estas alturas del telediario, como podéis imaginar, a mí estaba a punto de darme un tabardillo, pero antes de precipitarme he decidido ver el tráiler de la película, no fuera a ser que todo se deba a una interpretación incorrecta de lo que Besson nos quiere contar. Pero  el tráiler empeora las cosas, con un Morgan Freeman (ay, Morgan, que te pierdes) engoriladísimo con el tema científico y una Scarlett que, como usa el 100% del cerebro (ojo a esto), ha desarrollado poderes de telapatía, telequinesia y va por ahí lanzando gente por los aires en una especie de mezcla entre Darth Vader y los X Men.

Más allá del disparate de argumento (que puede ser legítimo en una obra de ficción) me gustaría destacar la responsabilidad que tienen las distribuidoras y el mundo del cine en la difusión de este tipo de estupideces.  Es legítimo generar argumentos fantásticos, pero hasta ellos tienen un punto de responsabilidad social a la hora de difundir su mensaje. Cuenta tu bola, pero no la arropes con presunta ciencia y trates de colársela a los periodistas despistados.

Y ahora viene la segunda parte, la más grave, en mi opinión,  y es la responsabilidad de los medios de comunicación,  en especial de un medio público como Televisión Española. La pieza del telediario de hoy no solo ha sido la colada de un acto promocional, sino que además ha promovido las pseudociencias de manera acrítica e irresponsable, dando voz a un mentalista como si fuera una voz autorizada en materia de neurociencia y perpetuando un error que hasta el más desinformado de los redactores ya debería conocer. Entendemos que es verano, que quizá hay poco personal, pero, por favor, traten los cerebros de sus espectadores con un poco más dignidad.

El cine inmortaliza el despropósito de que solo usamos el 10% de nuestro cerebro

domi El ser humano y el trabajo

Existen muchas citas en relación al hombre y el trabajo:

  • Cuando el hombre ya no encuentra placer en su trabajo y trabaja sólo por alcanzar sus placeres lo antes posible, entonces sólo será casualidad que no se convierta en delincuente.
  • Algunos dicen que el trabajo duro no ha matado a nadie, pero yo me digo ¿Por qué arriesgarse?
  • El aburrimiento es una enfermedad cuyo remedio es el trabajo.
  • Cuando el trabajo no constituye una diversión, hay que trabajar lo indecible para divertirse.
  • El trabajo es el refugio de los que no tienen nada que hacer.
  • Ganarás el pan con el sudor de tu frente.
  • El trabajo dignifica al hombre.
  • La oxidación por falta de uso gasta mucho más las herramientas que el propio trabajo.

Existen teorías opuestas en relación al hombre y el trabajo.

Una de ellas, defiende que al hombre por naturaleza le causa aversión el trabajo y siempre que las circunstancias lo permitan intentará huir de él o evitarlo. De manera, que se desprende que para conseguir que un ser humano trabaje se deberán administrar medidas punitivas o en su defecto refuerzos o remuneraciones.

La teoría opuesta defiende que el trabajo en el hombre es una necesidad natural y por tanto se realiza sin requerir el uso de amenaza o remuneración, al menos económica. Según esta línea de pensamiento el ser humano se ve suficientemente motivado con las ganancias que se obtienen del hecho mismo de trabajar (desarrollo de  iniciativa, imaginación, logro de objetivos…).

Estas teorías quizás sean demasiado simplistas y existan múltiples factores que determinen la decisión de trabajar o no y la elección de determinados trabajos y no otros.

Para algunas personas trabajar es simplemente el medio para subsistir o para conseguir determinado estatus social o económico. Para otras, trabajar constituye un fin en sí mismo.

Supongamos idealmente que todas las personas pudieran elegir su trabajo. ¿De qué factores dependería tal elección?

  1. Aptitudes y aficiones.
  2. Carácter (timidez, sociabilidad, creatividad, búsqueda de emociones, evitación de riesgos, competitividad…).
  3. Preferencias acerca de poseer autoridad o de ser un subordinado, con las ventajas y desventajas que cada situación acarrea…

De esto se desprende que conseguiremos más fácilmente la felicidad en un trabajo para el que poseamos aptitudes, en el que debamos poner en juego características presentes en nuestra personalidad y por último que podamos elegir libremente.

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domi Trabajo y Dignidad

1-El tema que nos ocupa es la dignidad y su relación con el mundo del trabajo.

El enfoque que pretendemos darle al trabajo es filosófico, sin perjuicio de no poder despegarnos, aun en forma conciente, de nuestra formación jurídica que suele darnos muchas veces otra perspectiva de las cosas, por lo que sería entonces una mirada filosófica-jurídica del tema. Trataremos de ver además la relación del trabajo, como derecho fundamental y la dignidad como derecho humano, en aquello que Kant[1] llama el mundo del Ser y el del Deber ser.

Como forma de introducirnos en el tema podemos decir que el mundo del ser está representado por las leyes naturales, las cuales tienen tres características: son inviolables, causales y necesarias, mientras que el mundo del deber ser está representado por las normas jurídicas, las cuales también tienen tres características: son violables, normativas y contingentes.

Podemos ir un paso más y decir que el ser es el estado al que el individuo llega con sus acciones, por lo tanto es la consecuencia de todas aquellos actos que lo llevan al estado en el que se encuentra, mientras que el deber ser, es aquel establecido por las normas, cualquiera sean estas y su proveniencia. Podemos decir entonces que el individuo entra en conflicto con la jurisdicción del deber ser, cuando el ser de este se encuentra en una falta hacia el deber ser.

Conviene también puntualizar que a lo largo de nuestro trabajo se ha tenido en especial consideración los postulados expuestos por el reconocido filósofo, Gustav Radbruch[2] quien dando un giro en su pensamiento abandono su postura relativista y legalista y se acercó un poco más al jusnaturalismo, a través del cual pretende exigir en todo Derecho, lo que perfectamente podría ser Derecho del y al Trabajo, un mínimo de justicia, entendiendo que solo así, mediante un “derecho justo”, podían respetarse los derechos humanos.

El destacado filósofo llega a la conclusión de que la esencia de  todos los derechos humanos, dentro de los cuales podemos incluir como mencionáramos anteriormente, el derecho de y al trabajo, se encuentra en la intrínseca dignidad del ser humano, y como tal adquiere un carácter de inalienable e insustituible, en consecuencia, todos estos derechos que poseen los individuos como tales están inmersos en la inalienable dignidad, siendo entonces de esta misma naturaleza, y por lo tanto no pueden ser vulnerados ni menoscabados.

Este pensamiento de Gustav Radbruch, que pretendimos exponer en breves palabras, resume cuan importante es la dignidad para las personas y más aun, cuan importante es  para los hombres trabajar dignamente.

Teniendo en cuenta esta disquisición es que intentaremos probar la correspondencia o no del trabajo con la dignidad, tanto en el mundo del ser como en el del deber ser.

2- Relación trabajo-dignidad.

Es importante mencionar que el trabajo visto como un derecho, ha sido visto y entendido por las corrientes humanistas de todas las épocas como un punto de suma relevancia dentro de sus teorías, incluso podemos decir que remontan el origen del mismo al comienzo de la era cristiana. Si leemos el texto Bíblico, José era carpintero y su humildad y decencia se veían reflejadas también en su trabajo, lo que además le daba y le dio una mirada no solo de sacrificio a su vida, sino también dignificante.

Sin ni siquiera entrar de lleno al punto de estudio que nos ocupa, podemos ver cuan inmenso es el tema y la cantidad de lugares desde los cuales se podría enfocar el análisis de la relación entre el trabajo y la dignidad, bien podría ser observar su evolución histórica, o  ver su vigencia y que lugar ocupa en las distintas sociedades, etc.

Como primer aspecto a resaltar debemos tener claro que desde antaño, el trabajo ha sido y es el único modo digno que tiene el hombre de ganarse la vida. El hombre como trabajador es ante todo persona y en consecuencia posee derechos y deberes universales, inviolables e inalienables, dentro de los cuales sin lugar a dudas se encuentra el trabajo.

Demos un paso más y miremos ahora la relación que se da entre el “Trabajo y la Dignidad, en el mundo del Ser y del Deber Ser”, este tipo de cuestiones que para quienes nos encontramos dentro del campo de estudio del derecho supone una continua reflexión es lo que nos incumbe en un primer momento.

Aquí podemos hacer una división muy clara, por un lado, y resulta lógico, el mundo del “Ser[3]”,aquí es donde las cosas se muestran tal cual son, esto supone que nos damos de frente con la realidad más allá de que cada sujeto vea lo que el cree como su propia realidad, que probablemente sea distinta a la de los demás, ya que cada sujeto posee su propia perspectiva de las cosas.

En este punto la realidad que mencionamos anteriormente puede llegar a ser muy cruel, muchas veces dignidad y trabajo, no van de la mano, ya que no todos los trabajos siempre son dignos o por lo menos no necesariamente cumplen con la misión de dignificar.

En muchas oportunidades se cambia dignidad por degradación de la persona, y aunque resulte una mirada negativa y pesimista de las cosas, no por ello es menos real. Más allá de que muchas veces al trabajo lo caracterizan el sacrificio, el cansancio, etc. lo que realmente lo convierte en sufrimiento y lo degrada es la injusticia que suele acompañarlo: horarios y condiciones abusivas, salarios de miseria, sindicatos corruptos o aliados a la administración para explotar al trabajador en la búsqueda de un mayor beneficio para el empleador, es lo que terminan devastando el concepto de trabajo digno.

En cambio podemos dar un segundo paso y trasladarnos al mundo del “deber ser”, es decir aquel mundo donde las cosas son perfectas o perfectibles, de acuerdo a determinados cánones sociales, no podríamos pensar en separar al derecho de la dignidad y viceversa, aquella frase de que el trabajo dignifica, encuadra perfectamente en este esquema. Si bien como mencionáramos antes es interesante ver como a veces la idiosincrasia de una sociedad tiene como valederas estas premisas, es más interesante aun, ver que trasladando el pensamiento de  Nietzsche, no dejan de ser grandes ideas con bases fácilmente removibles (gigantes con pies de barro). Analizando concretamente el mundo del deber ser, entendemos entonces que dignidad y trabajo deberían ser sinónimos, en consecuencia todo trabajo para ser tal debe ser completamente digno. Esta entonces sería la premisa central, todo trabajo debe ser digno, por lo tanto si tengo trabajo, este es digno o al menos teniendo en cuenta lo expuesto hasta ahora, debería serlo.

Allí entonces donde se respeta la dignidad del trabajador y con ello su tarea y su vocación, el trabajo puede ser incluso una diversión, llegando al extremo de ser una razón más para vivir. Muchas veces cuestionamos a aquellas personas que viven para el trabajo, pero ¿donde está el error?, esto suele conformar una línea muy delgada, que sin dudas escapa a nuestro análisis.

3-Dignidad como valor, en relación al trabajo.

Pero ¿qué es la dignidad?, de la que tanto venimos hablando, más allá de entenderla como el  respeto del individuo a si mismo, a sus convicciones e ideales; podemos decir, sin hesitación que es un valor, y el uso del valor, es muy anterior a la reflexión sobre él mismo, entonces puede advertirse, no solo viendo todas las doctrinas filosóficas sin excepción, sino también en el lenguaje vulgar, que el valor se compone tanto de juicios de valor como de existencia, y por lo tanto todo saber que podamos obtener acerca del valor en si mismo, depende de la perspectiva desde la cual, este es visto, por ejemplo en un momento determinado de la historia[4].

La significación de la dignidad y el trabajo comprende no sólo la dignidad del trabajador, es decir la dignidad de la persona laboral, sea ésta dependiente o autónoma, sino también, en un sentido amplio de la dignidad del mundo del trabajo, comprender también dentro del mismo concepto al empresario empleador.

Según Max Weber[5] se parte de un presunto sujeto de preferencia, es decir de un sujeto que elige entre la oferta de satisfacciones (en este caso sería trabajo) que el mercado le ofrece. Puede sonar como un lujo y hasta excesivo hablar de calidad de empleo y de posibilidad de elección del mismo en países donde los índices de desempleo son elevados y gran parte de la población no consigue trabajo es fácil advertir entonces que, nunca se alcanzará una solución satisfactoria para el problema del trabajo humano si el objetivo cuantitativo de pleno empleo se persigue menoscabando todo el tiempo las condiciones cualitativas del mismo desde el modo y cantidad de remuneración, hasta la seguridad y bienestar que deben acompañar la tarea, entonces es aquí que nos preguntamos, que pasa con la dignidad, y sin duda volvemos a darnos de frente con la realidad y los incesantes problemas sociales. Tal es así que realidad y  dignidad como valor aparecen caóticamente mezclados, las vivencias de los hombres, no son más que cosas teñidas de valor y desvalor, sin la menor conciencia de que ese valor y desvalor provienen del que los considera y no de las cosas y de los hombres mismos. Aceptar una tasa “natural” de desocupación, utilizando como pantalla la necesariedad de su existencia para la supervivencia de los modelos económicos, es invertir la jerarquía de los valores humanos, así sin lugar a dudas se está  afectando a la dignidad, al coartarse el mundo del trabajo con la desocupación, con el subempleo, la disminución de la protección a la persona laboral, hombre o mujer, y al condicionarse el desenvolvimiento del trabajador en sus tareas[6].

En otro sentido podemos señalar al ser real y al ser social[7], el enfrentamiento entre ellos no debería desvirtuar el concepto de persona e igualdad, dentro del cual podemos encontrar tanto al poderoso como al débil, al poseedor y al pobre, la débil persona individual y la poderosísima persona colectiva.

Podríamos hablar entonces de prestaciones equivalentes y estas son conmensurables entre si, solo cuando los sujetos que las intercambian, parten de una base igualitaria. Lo que podemos dar a llamar como el derecho obrero enfoca su accionar en la protección del “débil frente al poderoso adinerado”, aquí se nos presenta la lucha del hombre real, que se corresponde con el hombre del ser, del que hablábamos al comienzo, y el hombre ideal o social, involucrado esencialmente con el hombre del deber ser.

4- Evolución en el tiempo de la relación planteada.

Siguiendo con la evolución histórica podemos decir que ya en la edad moderna se apoya el derecho al trabajo, justamente como eso, como un derecho, impregnado de libertad, de valores, donde la dignidad aparece como bandera, pero debemos preguntarnos, ¿libertad para quién?, para el patrono de elegir a sus empleados o del obrero para elegir a su patrono, y es entonces en este punto donde vemos la fuerte lucha del individuo, entre mantener intacta su dignidad o verla desaparecer ante las necesidades que su propia realidad le impone. La dignidad se desvanece cuando el trabajador debe someterse a las condiciones impuestas por su empleador.

4.1-¿Qué hizo el derecho del trabajo por la dignidad de los trabajadores?.

Esta pregunta resulta inevitable, habiendo llegado a este punto en nuestro trabajo. Con ella también surgen otras interrogantes, por ejemplo, si el derecho pudo o al menos intentó darle un lugar a la dignidad de los trabajadores en sus legislaciones, o como el derecho, en caso de dar una respuesta afirmativa a la interrogante anterior, ayudo a dignificar el trabajo en el transcurso del tiempo, etc.

Si hacemos un análisis de la legislación laboral en nuestro país en el transcurso del tiempo y atendemos con especial cuidado los primeros avances en el derecho laboral de nuestra legislación, podemos puntualizar varias cosas.

El ilustre Profesor Américo Plá Rodríguez[8], nos enseña que desde un principio la reglamentación del trabajo, ya sea sus principios básicos como las condiciones en que este debía desarrollarse, fue sumamente difícil de conciliar entre los distintos actores sociales que en ese momento se encontraban en juego. Sin lugar a dudas la poca permeabilidad de los empleadores y la ideología y política reinante en ese momento eran muros muy difíciles de derribar. Una vez que se comenzara a legislar en materia de trabajo, y a contemplarse gran cantidad de situaciones y de derechos iba a ser muy difícil de detener ese empuje legislativo, y por suerte así fue, tanto que a nivel latino americano se vio a Uruguay como uno de los países más progresistas de la época en ese sentido. Pero lo que debemos hacer más allá de marcar la evolución señalada, es ver en esto donde ubicamos la dignidad, si es que alguien se acordó de ella en algún momento de la historia o si preferimos pensar que así fue y sin embargo no es más que la consecuencia de un efecto rebote de haber legislado sobre una cantidad de aspectos a lo largo de la historia.

Entre los argumentos que se utilizaban para darle impulso a la legislación de los derechos laborales se encontraban tres grandes vertientes, por un lado se argumentó en un primer momento razones biológicas de lo individuos, como para por ejemplo limitar la jornada de trabajo, luego como segundo argumento se atendió a las razones culturales y sociales y se dejo para un tercer momento las motivaciones económicas. No obstante poder pensar que si miramos el segundo argumento, podríamos incluir en él la dignidad, me atrevo a pensar que podría haberse hablado en forma expresa en ese momento de dignidad y no dejarlo como algo subyacente.

Es decir porque no hablar de que por razones de dignidad humana, como valor en si mismo de los individuos había que por ejemplo limitar la jornada de trabajo a 8 horas en lugar de tener que trabajar 14 0 15 horas diarias, sin dejarle al trabajador un momento de esparcimiento con su familia o bien consigo mismo. Es verdad que una de las razones que se esgrimió en ese momento fue esta, pero en ningún momento se habló de dignidad. ¿Será que lo vemos como algo intrínseco a lo que no debemos ni siquiera hacer mención? Pues bien, yo creo que no, creo que en realidad la dignidad se encuentra en todos los momentos de la historia, no solo de la evolución legislativa, sino de la humanidad, sumergida ante la necesidad, necesidad de trabajar de vivir o sobrevivir, y el deber de enfrentar la adversidad y el agotamiento en pro de poder subsistir actúa todo el tiempo como factor limitante de la dignidad.

Podemos mencionar una serie de leyes que fueron de las primeras en materia laboral y que tienen relación con el tema; Ley sobre la limitación de la jornada (1915), relativa al uso de la silla del personal femenino (1918), prohibición del trabajo nocturno en las panaderías (1918), pensiones a la vejez no-contributivas (1919), salario mínimo rural (1923), etc.[9], esto no quiere decir que aquí se terminó de legislar en materia de trabajo, simplemente lo que sucedió fue que por los años 50, se dejó de primar la política social, y se la pasó a un segundo plano, colocando en su lugar las políticas económicas, por lo tanto toda la estructura legislativa y política giraba alrededor de los factores económicos y con ello la legislación laboral, que entonces se adecuaba según la política económica lo necesitara. Luego ya en la década del 60’ se vuelven a contemplar las políticas sociales por encima de las económicas y se incorporan nuevas normas al derecho laboral que nos devuelven el optimismo. Esto claro está no pretende ser una evolución histórica del derecho laboral, sino que pretende dar un paso más y ver cuanto incidió la dignidad como valor en él y viceversa.

Tal como fuéramos detallando, podemos concluir en este punto que la dignidad queda sumergida dentro de las políticas sociales quienes se encargan a su vez de legislar el derecho laboral; cuando existe un cambio en el tipo de política o paradigma que rige determinado período, la consecuencia de ello  también la padece el derecho laboral.

Esta parece ser una conclusión muy amplia, pero si tenemos en cuenta todo lo que mencionáramos al principio de este punto, es decir donde estaba la dignidad en el derecho del trabajo, veíamos que nos encontráramos en un campo difuso entre lo que se da por entendido y lo que realmente se dice, cuestión que nos permite arribar con acierto a la conclusión anteriormente mencionada.

5-Conclusiones.

 En síntesis, la concepción social no debería disolver el concepto de igualdad y dignidad en la diversificación de tipos, de los patronos, obreros y empleados. Estas serían simplemente las distintas situaciones en que se encuentra la persona, faltaría el denominador común, sin el cual no cabe pensar ninguna igualación ni comparación, ninguna consideración de justicia, ningún derecho privado y quizás también ningún derecho absoluto, esto es lo que nos permite ver la artificialidad del sujeto de derecho frente al sujeto real y pleno.

El sistema bajo el que debemos trascurrir es predominantemente materialista. La persona se encuentra al servicio de la economía y no a la inversa, como lo exige la dignidad. Todo lo que el trabajador absorba, debe tener al menos un destello de dignidad.

Esto lo vemos reflejado en las normas propias del proteccionismo social, a pesar de que la economía sin humanismo y el egoísmo del capitalismo han creado nuevos sistemas de esclavitud.

Las distintas culturas y sociedades organizadas fueron incorporando en sus leyes tales postulados y fueron reconociendo la dignidad del trabajador en todos sus planos. Todo lo que reciba debe tener el signo de la dignidad, pero no solo como trabajador sino también como persona. Si bien es pertinente mencionar además que, no hay actividad que reclame mayor dedicación del tiempo que el trabajo. Y claro esta que muchas veces la manera como cada persona asume su tarea ya sea profesional o de otro tipo, incide de manera increíble en toda su existencia, para algunos, el trabajo eses el lugar de donde se obtienen las más grandes alegrías y satisfacciones, en cambio para otros, es nada más que fuente de continuas frustraciones.

http://www.gobernabilidad.cl/modules.php?name=News&file=print&sid=2298

domi LO GLOBALIZARON TODO (O CASI)

Globalizaron a su Dios y el culto al dinero se impuso en todos los rincones del planeta. Se dio por finalizado el combate religioso por imponer al verdadero Dios, todo el mundo quedó convencido y así nos propusimos adorarle hasta las últimas consecuencias, unificando los diferentes cultos en uno sólo y con un sólo precepto: “harás cualquier cosa por poseerme”

 

Globalizaron la guerra y enfrentaron a los que jamás tuvieron ganas de hacerlo, consiguiendo convertir el planeta en un enorme campo de batalla donde el asesinato es la cara habitual de la vida y donde uno puede alegrarse de que en su tierra se fabriquen las armas que matan a cualquiera en cualquier parte del mundo.

 

Globalizaron el hambre hasta convertirla en tan normal que pasó desapercibida ante nuestros ojos y empezamos a verla como algo tan natural que pensamos que pasar hambre era bueno para la salud.

 

Globalizaron el afán de tener, de poseer. Y nos encontramos con un mundo en que todo tiene propietario y por tanto todo es susceptible de ser vendido: los seres vivos, los inertes, el agua, la luz, la tierra, el cielo, hasta la luna es objeto de compra-venta.

 

Globalizaron la producción de todo tipo de inutilidades y consiguieron que la miseria se extendiera imparablemente por todo el planeta mientras unos pocos llenaban sus bolsillos con esa miseria.

 

Globalizaron la democracia y la ausencia de libertad se hizo más patente que nunca.

 

Globalizaron la cultura y la comida basura apareció hasta debajo de las piedras mientras la poesía era desterrada a un universo paralelo.

 

 

Lo globalizaron todo, o casi todo. Se olvidaron de nosotros, del ser humano. Para nosotros tenían un plan diferente, totalmente contrario.

 

Nos atomizaron, nos individualizaron, nos convirtieron en seres inconexos para hacernos creer que éramos únicos mientras nos transformaban en una masa amorfa y homogénea incapaz de reconocernos como iguales. Anularon nuestra capacidad de globalizar los sentimientos, de empatizar, de amar, de sentirnos como uno sólo frente a su mundo salvaje y miserable. Consiguieron arrastrarnos y situarnos en la posición justa que debíamos ocupar para que toda la maquinaria de miseria y muerte que supone su globalización funcionara a las mil maravillas. Nos impusieron y nos dejamos hacer un moldeamiento a medida de la injusticia y el dolor que ha supuesto su modelo.

 

Así nos convertimos en seres capaces de devorar cualquier producto, a cualquier precio, de cualquier parte del planeta pero que no conseguimos ver el dolor a nuestro lado, ni siquiera en nosotros mismos.

 

Somos incapaces de reconocer que nos golpeaba a diario un látigo que nos hace un poco más serviles cada día, un poco más inútiles como personas.
LO GLOBALIZARON TODO Y NOS CONVERTIMOS EN NADIE, EN NADA.

http://quebrantandoelsilencio.blogspot.com.es/

domi LA FASE. ¿Quién ha limitado el desarrollo humano?

«Los humanos podemos ver, oír, movernos y experimentar sensaciones que nos son familiares. ¿Pero terminan ahí nuestras facultades? ¿Es posible que alguien nos haya arrebatado, para sus propios fines, nuestra facultad más importante prohibiendo incluso que se mencione? Como resultado, hay algo por ahí que ha transformado para siempre la historia y la cultura del hombre – algo de lo que no sabemos nada.

¿Qué nos están ocultando? ¿Quién ha construido un imperio privándonos de lo mejor que puede ofrecernos la vida? ¿Quién ha limitado el desarrollo humano y quién tiene algo que ganar con ello? ¿Qué se esconde dentro cada uno de nosotros y qué nos reserva para el futuro?»

Edgardo Castillo, thank you for subtitles!

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=3qzstR5URG8[/youtube]

domi ¿Y TÚ QUE SABES… DE POLÍTICA?


Te han hecho creer que la política es sucia y corrupta, para que no participes, para que dejes «eso» en manos de los sucios y corruptos. ¿No has dicho alguna vez que la política es una mierda?
Te han hecho creer que el patriotismo es una lacra, una idea que propicia el genocidio, para instaurar ejércitos de mercenarios genocidas, al servicio de los intereses apátridas. ¿No es eso lo que ocurre cuando se va tras los intereses del dinero?
Te han hecho creer que sólo se puede ser «de izquierdas» o «de derechas», que la izquierda es apátrida e internacional, que la derecha es mejor administradora. ¿Es que acaso no hay comunistas y capitalistas patriotas?.
Te han hecho creer que sin dinero no puede hacerse nada y te han falseado toda la historia. ¿Acaso existían las finanzas, la usura y los bancos en las culturas iniciáticas que nos precedieron?
Te han hecho creer cien cuentos de «terroristas», para que vivas aterrorizado. Guerra atómica, meteoritos que impactan la Tierra, invasiones extraterrestres… Para ocultar que el verdadero peligro está en las armas que controlan unos pocos tecnócratas al servicio de la élite de banqueros. ¿Dónde están los verdaderos terroristas?
Te han hecho creer que la anarquía es algo posible, y que lo contrario es la dictadura, cuando lo contrario a anarquía es organización participativa y asamblearia. ¿Acaso existe o ha existido algún colectivo sin organización?
Te han hecho creer que es igual dictadura que tiranía, y te han hecho creer que con votar a ciertos representantes, ya estás libre de los tiranos y los dictadores. ¿No vivimos en una dictadura oculta llamada «de los mercados»?
Te han hecho creer que todos los líderes de masas han sido y son dictadores, tiranos, antidemocráticos, cuando han disuelto los parlamentos corruptos, o cuando han abolido la partidocracia. ¿Vivimos mejor ahora, con crisis de toda clase?
Te han hecho creer que la educación privada siempre es mejor que la pública. ¿Te parece justo si acaso fuese verdad?
Te han hecho creer que mientras más estudios tienes, más sabes. ¿Sabes quién eres, de dónde vienes y adónde irás?
Te han hecho creer que mientras más noticieros veas y periódicos leas, mejor informado estás. ¿Qué conoces de la Realidad Global?
Te han hecho creer que otros «pueblos gamberros» están deseosos de invadir tu país. ¿Cuáles lo ha hecho, por qué y cómo?
Te han hecho creer que eres libre, porque puedes elegir gobernantes, trabajo, qué comer, cómo vestir… ¿Cuántos lo son realmente? ¿Cuántos trabajan en lo que realmente les gustaría?, ¿Cuántos comen realmente lo que les viene en gana?, ¿Cuántos visten como quisieran según su Ser Interior?
Te han hecho creer que el pueblo no debe tener armas porque es peligroso. ¿Crees que los ejércitos y las policías se componen de personas mejores que tú?
Te han hecho creer que un día vendrá a salvarnos la virgen María, los hermanitos extraterrestres o el mismísimo Jesús, o el Espíritu del Profeta, o los ángeles de Iahvé. ¿Por qué no han venido antes para evitar los actuales sufrimientos, humillaciones y vejaciones? ¿Qué les dirías a los miles de millones de muertos en medio de espantoso sufrimiento desde hace siglos?
Te han hecho creerr que «no puedes hacer nada» ante todo el dolor del mundo. ¿No te has planteado ser al menos alguien realmente libre, Uno en la conciencia de todos y poner al menos tu granito de arena?
Te han hecho creer que los políticos profesionales pueden encargarse de tu destino educacional, económico, de tu salud y la de tu familia. ¿Acaso eres un idiota que no cuenta a la hora de tomar decisiones?
Te han hecho creer que las vacunas realmente te protegen de las enfermedades y que no representan ningún riesgo extra. ¿Has averiguado cómo se fabrican, cómo se componen y las denuncias que hay al respecto?
Te han hecho creer que la mujer es el «sexo débil» para polarizarnos y enemistarnos allí donde más necesitamos uno de la otra, unidos, respetuosos y amantes. ¿Te podría haber parido tu padre o engendrado tu madre?
Te han hecho creer que sólo puedes trabajar en una cosa, ese trabajo de mierda que muchas veces matarías para que no te lo quiten. ¿Acaso naciste con una marca que diga «has nacido para esto»?. Eso es posible; y si es así, eres un afortunado entre cientos de millones.
Te han hecho creer que la política profesional no debe hablar de Amor, Inteligencia, Voluntad, valores humanos y espirituales como Lealtad, Dignidad, Misericordia, Autoconsciencia, Satisfacción Vocacional… ¿Les has escuchados a tus «políticos» hablar de estas cosas?
Te han hecho creer que Dios está fuera tuyo, que el poder no depende de ti, que no puedes evitar que el mundo vaya por donde va…
Te han hecho creer que arreglar el mundo es una utopía y que «utopía» es sinónimo de «imposible». ¿Sabías que todos los inventos y descubrimientos que hoy disfrutas fueron primero tachados de utopías, de absurdos, imposibles, y que sus inventores y descubridores tuvieron agrias luchas para poder imponerlos?
Te han hecho creer que no hay ninguna solución a la vista, y que el sistema es tan complejo que dejarían de funcionar las fábricas, las industrias, las producciones de alimentos, de indumentaria, etc. ¿No sabes que el trabajo puede continuar sin dinero mediante y así ha sido durante las guerras, con producciones fabulosas? Imagínate una economía de guerra… ¡Pero en plena paz, sin derivar esfuerzos a la fabricación de armas ni mantener ejércitos!
Te han hecho creer que la gente es mala, que es mala la naturaleza humana. ¿Es mala tu naturaleza? Puede que sí, porque puede haber excepciones, pero mírate en el espejo y piensa… «¿Quién soy yo?».
Te han hecho creer que eres culpable por lo que piensas, por lo que sientes o por lo que haces. Y quizá lo eres en algún sentido, puesto que lo has creído. ¿Eres culpable de los males del mundo?
Te han hecho creer que la Patria y la bandera sólo valen cuando hay que disputar un mundial de fútbol. ¿Has ganado algo cuando ganó tu club o selección favorita?

Te han hecho creer tantas cosas irreales o parciales, que puedes sentir terror al darte cuenta. Es normal, pues los verdaderos terroristas que se dicen «antiterroristas» cuentan con ello. Sólo si te liberas de tus falsas creencias y empiezas a razonar sin miedo a la verdad, sin miedo a «lo que puedas perder» (trabajo, estabilidad, recursos, tu casa, etc.), descubrirás que los verdaderos terroristas son los genios de las finanzas internacionales; descubrirás que los políticos a los que votas son meros esbirros de esos poderes y a veces ni siquiera son conscientes de ello; comprenderás que en un Estado financiero con políticos al servicio de «los mercados», no tienes absolutamente ninguna seguridad. No hay una sociedad de Ciudadanos que te respalde, ni un líder decente que se juegue la vida por ti. Si eres empresario, no estará segura tu empresa porque dependa de «los mercados» y de los bancos. Sólo estarás realmente seguro como productor, empresario, empleado o profesional, cuando toda la sociedad pueda respaldarte, cuando el valor «dinero» no esté en manos de usureros privados y más seguro estarás tú y tu familia y todos, cuando en un paso ecologénico posterior, el Valor Trabajo reemplace definitivamente al valor de la moneda, y que ésta se convierta en «fichas», sin valor usurario, sin valor especulativo, como un mero instrumento del Estado y que tú seas parte de ese Estado.
¡… suena a comunismo…!
Cierto, esto último «suena» a Comunismo, pero no lo es; porque los banqueros internacionales crearon el comunismo ruso del mismo modo sangriento y corrupto desde el principio, como lo fue la Revolución Francesa. Con grandes y bonitos ideales pregonados, sí, pero con una serie de aberraciones aumentadas por los cabecillas que en ambos casos fueron cuidadosamente preparados para dirigir a las turbas emocionalmente y sin organización Asamblearia, sin participación real en la toma de decisiones. Se formaron así diferentes movimientos políticos en América, dando lugar a supuestas «democracias», pero todas con una misma lacra: la representatividad, por sobre la participación ciudadana.

¡Aprende, comprende y actúa!

http://humanidadlibre.com/ECOLOGENIA/ytuquesabesdepolitica.htm

domi Ensañamiento terapéutico y aumento del gasto sanitario debidos a las creencias religiosas

1 sacralidad vida humana don dios inviolable

Aunque las religiones presentan una innumerable variedad de creencias, dogmas o rituales mutuamente excluyentes (y demasiado a menudo porfiadamente enfrentados entre sí),la idea de la sacralidad de la vida en todo momento y bajo cualquier circunstancia es uno de los pocos elementos comunes a los dictados de sacerdotes, ayatolas, rabinos y demás mediadores de lo divino. Pero desgraciadamente, en muchos casos esta ortodoxia inamovible conlleva no sólo el sufrimiento más despiadado sino también el despilfarro económico más inútil.

Diversos estudios realizados a lo largo de los años sugieren que las personas a menudo suelen recurrir a la religión cuando se enfrenta a situaciones de estrés y que la religión se vuelve más importante cuanto mayor es el nivel de esta ansiedad. Y quizás uno de los mayores motivos de angustia del ser humano es cuando nos enfrentamos a una enfermedad grave, máxime cuando se trata de pacientes ingresados en unidades de cuidados intensivos (UCI). Pues bien, para analizar el papel de la religiosidad sobre la atención médica unosinvestigadores estadounidenses realizaron un estudio que ha sido recientemente publicadoexaminando diversas variables médicas y económicas de los registros de más de 2.000 pacientes ingresados en cuidados intensivos de hospitales estadounidenses.

Primero se estudiaron aquellos enfermos terminales ingresados y que habían fallecido durante los 30 días posteriores a su admisión en la UCI. Y los resultados no pueden ser más llamativos, ya que el estudio encuentra una notable asociación entre la afiliación religiosa con diversos marcadores de agresividad en el tratamiento médico recibido. Así frente a los enfermos no religiosos, los pacientes religiosos habían estado de media un 23% más de días hospitalizados y había transcurrido un 30% más de tiempo hasta su muerte. También los creyentes estuvieron un 25% más de tiempo conectados a máquinas de ventilación y respiración asistida. En resumen, los enfermos religiosos habían soportado mayor grado de tratamientos médicos agresivos, por lo que se puede hablar de ensañamiento terapéutico o distanasia (lo contrario a la eutanasia) ligado a las creencias religiosas.

Cuando se analizaron los gastos médicos asociados a ambos tipos de pacientes se encontró que esta distanasia implicaba un aumento de un 23% de los gastos hospitalarios ligados a los enfermos religiosos. Teniendo en cuenta que los autores del estudio calcularon en alrededor de 200.000 dólares por paciente el costo de los cuidados intensivos en este tipo de enfermos, estaríamos hablando de unos 45.000 dólares despilfarrados únicamente en prolongar artificialmente el sufrimiento de cada uno de estos pobres enfermos. Y tal y como indican diversos estudios [12 y 3] la atención a este tipo de enfermos terminales es una de las principales partidas del gasto sanitario de los EEUU y por extensión del resto de los llamados países desarrollados, por lo que quizás estemos hablando de miles de millones de dólares (o euros en el caso europeo) que se dilapidan cada año innecesaria y sádicamente en el incuestionable altar de la sacralidad de la vida humana debido al adoctrinamiento religioso.

Además, los autores del estudio analizaron también si entre todos los pacientes de la UCI existían diferencias entre la supervivencia de ambos tipos de enfermos (recordemos que todo el análisis anterior se realizó sólo con aquellos pacientes que habían fallecido durante los 30 días siguientes a su admisión), no encontrándose diferencia alguna ligada a la religiosidad. Por tanto, ello descartaría que los pacientes religiosos tuvieran algún tipo de “reserva fisiológica” (como lo denominan los mismos autores del estudio) o mayor “ansia o apego a la vida” que los no religiosos (cosa que no entiendo, puesto que una persona religiosa debería estar en principio más satisfecha con morir, verse con su creador y disfrutar de la vida eterna, a no ser que piense que ha sido un mal creyente y que va a arder toda la eternidad en el infierno por sus pecados, en cuyo caso siempre será mejor un poco más de agonía en la Tierra que no toda una eternidad en las calderas de Pedro Botero), por lo que los autores concluyen finalmente que

La afiliación religiosa se ​​asocia con unos cuidados intensivos más agresivos, sin mejoría alguna en la supervivencia global entre los pacientes críticamente enfermos o heridos.

La asociación entre religiosidad y recepción de asistencia médica más agresiva se ha demostrado previa y específicamente en pacientes oncológicos [45 y 6]. Y como la mente del creyente es un pozo sin fondo de irracionalidad, pues muchos pacientes religiosos, habitantes de los profundos estados sureños del Cinturón de la Biblia estadounidense, ven la atención médica agresiva en pacientes en fase terminal como un medio a través del cual su dios actúa, es decir consideran a los médicos como simples autómatas o marionetas bajo la guía y dirección del supuestamente todopoderoso dios cristiano [7], que por motivos incognoscibles quiere seguir viendo sufrir a su bienamada criatura, alargando al máximo su terrible agonía. Además también otros pacientes (y no lo olvidemos sus familiares) fuertemente creyentes quieren continuar el máximo tiempo posible con cualquier tipo de atención médica, (incluso las más agresivas en contra muchas veces del criterio médico) con el desesperado e irracional anhelo de un milagro [89 y 10], como si su todopoderoso dios no pudiera realizar el portento completo y necesitara, por tanto, de la ayuda de la más avanzada tecnología médica actual para llevar a cabo su omnipotente designio: el salvar a su familiar o a sí mismo de ese terrible cáncer que ha metastatizado por todo el organismo. Misterios insondables para la mente de este pobre ateo.

 http://lacienciaysusdemonios.com/2014/07/22/la-religion-aumenta-tanto-el-ensanamiento-terapeutico-como-el-gasto-sanitario-en-enfermos-terminales/#more-37506

domi No vemos, lo que no queremos ver

El ser humano tiene una capacidad increíble para ver solo una parte de lo que sucede a su alrededor y una capacidad aún mayor para no darse cuenta de ello.
Venda en los ojos

Para esto utiliza múltiples herramientas, como son el ignorar lo que no le interesa, utilizar un lenguaje adulterado para camuflar lo que sucede, convencerse de que lo que está pasando es normal, etc.

Es capaz de generar a voluntad una visión fragmentada, focalizar en un punto e ignorar el resto. Lo curioso es que una vez que realiza esto, deja de ser consciente de que lo está realizando (!).

Vamos con ejemplos para entender mejor esto:

Un lance en el siglo XVII (Francisco Domingo Marques 1866)Estamos viendo una película del viejo oeste americano, con el típico duelo al amanecer, los dos vaqueros de turno enfrentados. Esto se suele calificar de emocionante, de aventura. Cuando lo que sucede, es que hay dos hombre que se quieren matar el uno al otro y uno de ellos morirá. Si se cambia de película a una de las llamada de «capa y espada«, cambiamos de ambiente pero en el fondo tenemos lo mismo, dos hombres que se quieren matar, por mucho que se pretenda rodear de un halo de romanticismo y aventura.

Vamos a ver un combate de boxeo, donde dos hombres se enfrentan para ver cual es el más fuerte y el que mejor técnica tiene. Cuando lo que estamos viendo es a dos hombres dándose una paliza.

Perros y útiles de caza (Goya 1775)Un grupo de personas que van a cazar al bosque. Emoción, aventura, el hombre contra la naturaleza. Cuando lo que se va es a matar a seres vivos por el simple placer de matarlos (darles caza), por diversión, (ya que no hay necesidad para alimentarse de ellos), equipados con todos las prendas y equipo modernos del que sea capaz de costear, para el enfrentamiento del hombre contra la naturaleza. Y para disimular el hecho de la crueldad de matar por diversión, se le llama “el noble arte de la caza”; y cuidado que noble significa “Preclaro, ilustre, generoso”.

Toros en un pueblo (Goya 1812-1819)Una corrida de toros. Cientos de espectadores disfrutando del espectáculo. El hombre contra la bestia. El hombre armado con una espada y un capote, rodeado de compañeros que lo apoyan y un toro (la bestia) que no para de ser aguijoneado por lanzas y banderillas con la consiguiente perdida de sangre y de fuerzas. Otro caso en el que se usa el lenguaje para suavizar los hechos donde también se le llama “el noble arte del toreo” y dentro tenemos la especialidad del “noble arte del rejoneo”.

La primavera (Pierre Auguste Cot 1873)La típica película de “amores”, que suelen gustarle sobre todo a las mujeres, donde en el 90% de las ocasiones hay tres personas envueltas en la trama y a una de ellas laengañan y abandonan. Lo que se suele decir, “le ponen los cuernos”. Sin embargo estás películas tienen un calificativo casi unánime, “que bonita”. Pues fíjate lo bonita que tiene que ser para la persona que es engañada. Ejemplo de libro: “Los puentes de Madison” (The Bridges of Madison County de Clint Eastwood). Película “bonita” para (casi) todo el mundo, donde se ignora inconscientemente la envergadura de la historia, porque ¿cuantos se paran a pensar en el marido de la protagonista?. Y si  fueras ese marido, ¿te parecería bonita la historia que cuenta?

Otro ejemplo, es el tema de los cuentos infantiles que ya se ha comentado en este blog.

En el día a día, también nos estamos ocultamos constantemente los hechos y no vemos lo que no queremos ver.

Cuantos casos de parejas hay, donde a una de ellas todo sus allegados le dicen que su pareja es una mala persona y se niega a creerlo pero luego, con el tiempo, cuando se separan de repente “se hace la luz” y todo lo que no había visto en los años que estuvieron juntos, lo ve muy claro. ¡Ahora!, ¿como es que no lo veía antes?

O el caso de los padres que tienen un hijo que saca malas notas, es amonestado constantemente en el colegio, los padres son llamados varias veces por los tutores y sin embargo, lo padres están convencidos de que su hijo es muy bueno y que la tienen tomada con él. No quieren ver.

La lista de ejemplos se haría interminable.

Lo que en resumen resulta, es que utilizamos múltiples mecanismos para distorsionar lo que ocurre a nuestro alrededor para filtrar dicha información y adaptarlo lo máximo posible a lo que quisiéramos que ocurriera realmente.

Esto ni es malo ni es bueno en si mismo, es el funcionamiento que tenemos. Lo que si es malo, es cuando no somos conscientes de este “filtrado”. Cuando vamos por la vida de paseo sin pararnos a pensar lo que estamos haciendo.

La mayoría de estos “filtros” de la realidad, pueden hacerse patentes con un pequeño ejercicio de voluntad de pararnos y llevar la vista un poco más allá de nuestra nariz. Nos dará más perspectiva y más información, para poder reaccionar mejor que el resto de los mortales.

http://nohayrealidad.blogspot.com.es/2010/04/no-vemos-lo-que-no-queremos-ver.html

domi Se parte de la Solucion

Muchas veces en nuestras vidas nos encontramos frente a frente con situaciones verdaderamente críticas, en donde de un momento a otro, sin avisar, el cielo se nos cae a pedazos y el mundo se cierra, todo se pone en nuestra contra e irremediablemente sentimos que vamos en caída libre, sin que nada nos detenga.
Nos abrumamos ante la crisis y nos acobardamos ante la pérdida, nos convertimos en un manojo de nervios, incertidumbre y pánico. Los problemas se acumulan, el tiempo se acaba y todas las circunstancias difíciles se juntan y de la peor manera posible.

Pero a pesar de que la situación sea muy crítica, lo más grave es que nuestra reacción exagerada de pánico, pesimismo y angustia, complica mucho más el problema y hace que sea más difícil de sobrellevar y solucionar la desagradable situación. Sólo la calma y la serenidad, además de una actitud optimista, una confianza plena en nosotros y en la vida, un plan de acción concreto y realizable, y una acción serena y continua, serán las herramientas que paso a paso nos lleven a puerto seguro.

Cuide su actitud: No se ponga demasiado pesimista. Es normal que perdamos confianza y veamos todo negro, pero recordemos que si entramos en negativismo total, dedicándonos a renegar y a compadecernos de nosotros mismos, quejándonos y magnificando la situación difícil, perdemos la perspectiva y matamos cualquier iniciativa que nos ayude de alguna manera a superar nuestra crisis.
Tampoco abandone sus sueños, es normal que tendamos a protegernos y desanimarnos, pero recordemos que todo siempre pasa, sólo tenemos que tratar de mantenernos firmes y tratar de pasar el mal momento de la mejor manera y sobrevivir, afectándonos lo menos posible mientras amaina la tempestad. Ponerse demasiado optimista es también peligroso, pues si perdemos nuestro polo a tierra y nos volvemos soñadores, evadiendo la realidad, esto impedirá que actuemos con buen criterio y determinación. Recordemos que si no tomamos una decisión y acción inmediatas, las cosas se van complicando más y más, pues de verdad las cosas usualmente no se arreglan solas casi nunca.

Miremos desapasionadamente la situación, consultemos con los amigos o expertos, si es el caso, y busquemos una salida con confianza y fe tratando de tomar decisiones sanas.

Ni rabia ni miedo: Las dos emociones más destructivas que siempre acompañan las crisis, son la ira desenfrenada y el miedo paralizador.

Aunque los hechos sean desoladores debemos mantener siempre la cabeza fría, evitar la rabia y nunca agredir a los nuestros (familia o colaboradores), sin importar la presión o el estrés que estemos soportando. Mantenernos unidos es vital. El echarnos culpas, el regañar o el gritar los unos a los otros no mejora la situación, sólo la empeora. Tratemos de canalizar nuestra frustración y tranquilizarnos; es fundamental permanecer unidos sin agredirnos a pesar de la adversidad. El miedo es también un gran obstáculo para sobrellevar las crisis. El pánico nos impide pensar con claridad, además de que nos paralizará y evitará que tomemos cualquier acción. Asimismo, nos llevará a sufrir el doble con un gran desgaste emocional.
Para combatir el miedo, hágase estas preguntas: ¿Qué tan posible es que me pase lo que tanto me preocupa? ¿Qué puedo hacer para minimizarlo o evitar que eso pase? ¿Y si pasa, qué? En verdad, ¿a qué le tengo miedo?

Es aconsejable tomarse unos momentos para reflexionar y, de ser posible, conversar con un buen amigo que nos dé otra perspectiva de la situación. Unas palabras de aliento o una opinión diferente a la nuestra aclaran los pensamientos y nos permiten ver elementos que antes no veíamos a pesar de ser absolutamente obvios.

Siempre hay tiempo: Cuando enfrentamos una situación de crisis, corremos sin cesar y sin saber a dónde, tenemos una falsa sensación de acoso, corremos sin ton ni son. Lo mejor es detenernos un momento y pensar con calma a pesar de la situación, ahorrar energía y tiempo, evaluar lo que disponemos y lo que nos falta y después actuar con tranquilidad y seguridad, la calma en estos momentos es vital.
Disponga lo mejor que pueda de lo que tenga en donde esté. Con limitados recursos y ante todo pronóstico trate de salir adelante, en eso radica la diferencia entre un ganador y un perdedor. Agudice su ingenio, déle rienda a su creatividad, duplique o triplique su esfuerzo, anímese y sin mirar para atrás salga con todas sus fuerzas de esa situación difícil. Siempre se puede. Recordemos que el que no sale a ganar ya ha perdido.

Todo pasa. La rueda de la vida es un continuo subibaja, todo es cuestión de tiempo, lo importante es sortear los momentos difíciles inteligentemente. Espere y prepárese para cuando llegue una nueva oportunidad. En muchas ocasiones lo tenemos todo y no logramos vivir plenamente. Y entonces nos llegan situaciones inesperadas, que en principio parecen negativas, aunque son verdaderas bendiciones. Después, en el tiempo, cuando hayamos dejado atrás esos instantes de crisis que parecían insuperables, sonreiremos y las recordaremos sólo como dulces experiencias, al ver cómo salimos airosos de ellas.

http://uytierra.blogspot.com.es/search?updated-min=2008-01-01T00:00:00-08:00&updated-max=2009-01-01T00:00:00-08:00&max-results=50

domi Gripe H1N1 – La verdad sobre la vacuna


¡Altamente recomendable!



Teresa Forcades es una monja Benedictina del monasterio de San Benet en Montserrat, en las cercanías de Barcelona, España. Antes de ingresar al monasterio Teresa ejerció la medicina durante varios años como médica especializada en medicina interna. Es médica de Salud Pública habiendo estudiado en la Universidad de Barcelona. También tuvo un período de investigación en la Universidad del Estado de Nueva York.

En este video presentación (divido en 6 partes con un total de 50 minutos) Teresa debate los probables origenes del actual virus de la gripe H1N1, y porque, a pesar de las declaraciones de la OMS, no existe una pandemia. También discute los detalles y riesgos del programa de vacunación, la política y economía que la conducen, y el peligro de que, bajo una artificial locura de «pandemia» por parte de la OMS, se introduzcan las vacunaciones obligatorias.

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=A0JqQyl09zQ[/youtube]

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=jAmbOrVxMBo[/youtube]

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=TqOqo-Zo6Ao[/youtube]

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=K-Ea_yCuL34[/youtube]

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=A9_A588mqH0[/youtube]


Hechos y datos objetivos principales sobre la vacunación 

Para quien no pueda o no quiera ver los videos señalados ponemos aquí las afirmaciones principales de la Dra. Teresa Forcades:

1) PRIMER HECHO Y DATO CIENTÍFICO: La Influenza A/H1N1 o “Gripe porcina” NO ES UNA ENFERMEDAD NUEVA (Virus A hay varios, de la Gripe común o “estacional”, así como también hay B y C de esta “Gripe común”)… Los “antígenos H y N” tampoco son nuevos. El grupo A/H1N1 es el mismo grupo de la Pandemia de 1918 y que duró hasta mediados de los años cincuenta… Pero reaparece en 1977 POR HABER SIDO RESINTETIZADO O REFABRICADO EN UN LABORATORIO (Todos estos datos y sus detalles pueden consultarse en “The New England Journal of Medicine”, la Revista Médica de mayor impacto y más considerada en el mundo)… Lo único nuevo es la “cepa viral”, que se diagnostica por primera vez el 17 de abril de 2009 y se llama “Cepa S-OIV” (dos casos en California)…

2) SEGUNDO HECHO Y DATO CIENTÍFICO: Del 17 de abril al 15 de septiembre de 2009 (última revisión de estadísticas) están registrados en Europa 137 casos de muerte, lo cual es una mortalidad menor que la del “virus normal” de cada año según médicos prestigiados que ella cita…

3) TERCER HECHO, COMO IRREGULARIDAD GRAVE O HECHO OBJETIVO GRAVE INEXPLICADO y por el que la periodista austriaca Jane Bürgermeister ha denunciado a la OMS, a la ONU y a varias personas con altos cargos en gobiernos y empresas (cargos de “bioterrorismo e intento de cometer asesinatos en masa”): A finales de enero de 2009, poco antes de que este “virus nuevo” fuera descubierto, la Corporación Farmacéutica americana “BAXTER”, a través de su filial en Austria, distribuyó a cuatro países europeos (Austria, República Checa, Eslovenia y Alemania) material de vacunación (72 kilos, miles y miles de dosis) para la Gripe Estacional que debían administrarse en febrero y marzo… Por una “casualidad” inesperada, uno de los técnicos en un laboratorio de la República Checa, al parecer en forma autónoma, realizó una prueba extra de seguridad antes de que nadie hubiera aplicado esta vacuna: inoculó esta “vacuna” a varios hurones (pequeños mamíferos que se utilizan desde 1918 para pruebas de “gripe”) con el resultado de que MURIERON TODOS, lo cual supuestamente no debía suceder. Al darse cuenta dio aviso y entonces otros expertos analizaron el material de estas vacunas, pues si se trataba de “vacunas” era inexplicable que los animales hubieran muerto… La investigación hecha en el material de Baxter concluyó que se trataba de DOS VIRUS VIVOS NO ATENUADOS –contrario a lo que debía contener la vacuna: un solo virus, el de la gripa estacional, y atenuado-, uno era el virus de la gripe aviar de 2005, causante de una gran mortalidad aunque mínimamente contagioso y el otro era el virus estacional de mortalidad ínfima pero altamente contagioso… El significado de este hecho es elemental: esta mezcla de virus para distribuir a miles de personas está maximizando la probabilidad de que estos dos virus se unan, se recombinen, y aparezca un “virus nuevo” que sea a la vez muy letal y sumamente contagioso… Esto es un hecho. La Empresa Baxter lo ha aceptado. No ha dicho que sea mentira de la periodista o de quienes hicieron la investigación. En el material entero que ellos distribuyeron –no en un parte sino en los 72 kilos- estaba realmente esta mezcla letal de virus… ¿Podría haber ocurrido esto por “casualidad”? Eso es extremadamente poco probable. En ciencia no se puede decir “imposible”, pero extremadamente poco probable significa que estos laboratorios que operan con estos tipos de virus tienen bioniveles de seguridad 3 – el máximo y el que se debe aplicar en estos laboratorios- lo cual implica una probabilidad ínfima de que ello ocurriera por “casualidad” o “accidente”… Son además dos hechos juntos de altísima improbabilidad para “accidente” o “casualidad”: 1) Que estuvieran dos virus mezclados, y 2) Que no estuvieran atenuados –no sometidos a tratamiento de radiación para minimizar su acción enfermante-… Estos hechos improbables para “accidente” o “casualidad”, juntos, hacen que sea más probable deducir “mala intención” que no hacerlo, y por ello el asunto sigue actualmente bajo investigación… Un hecho adicional que se deduce es que si no se hubiera descubierto casualmente esta contaminación en la República Checa y se hubiesen entonces aplicado las “vacunas” de la Corporación Baxter, como estaba previsto, HOY HABRÍA REALMENTE UNA PANDEMIA DE PROPORCIONES ENORMES QUE ESTARÍA ENFERMANDO Y MATANDO A MUCHA GENTE y no la “falsa pandemia” que están maximizando…

4) CUARTO HECHO, AÚN MÁS INEXPLICABLE DESPUÉS DE ESTA IRREGULARIDAD GRAVE RECIÉN SEÑALADA: LA CORPORACIÓN BAXTER ES UNA DE LAS QUE SON RESPONSABLES PARA HACER LAS VACUNAS QUE SE APLICARÁN EN ESTE 2009… Es obvio que el sentido común de cualquier persona mínimamente informada sobre el “error”, accidental o intencional, que cometió esta Empresa y que ahora fabricará las vacunas que le invitarán u obligarán a ponerse, le haría decir un ROTUNDO NO, mientras no concluyan las investigaciones sobre lo descubierto en enero en la República Checa…

5) QUINTO HECHO, COMO IRREGULARIDAD GRAVE O HECHO OBJETIVO GRAVE INEXPLICADO: El 29 de abril de 2009, sólo doce días después de aparecer los dos primeros casos del “virus nuevo” A/H1N1, la Dra. Margaret Chan, Directora General de la OMS, apareció públicamente y dijo que había un estado de alerta mundial de Nivel 5 para la prevención de una Pandemia… El Nivel 5 es el nivel inmediato inferior a la declaración de Pandemia… El 11 de junio, mes y medio más tarde de señalado el Nivel 5, declara el Nivel 6, Nivel de Pandemia… ¿Cómo pudo hacer esto la OMS si el virus A/H1N1 tiene una mortalidad muy inferior a la mortalidad del Virus Estacional de cada año? ¿Cómo es que no se declara una Pandemia cada año, si es peor el virus de gripa estacional anual que este “virus nuevo”?… La respuesta es simple: En el mes de mayo de este 2009 LA OMS ACABA DE CAMBIAR LA DEFINICIÓN DE “PANDEMIA”… Antes de este cambio “Pandemia” se definía como: “Infección por un agente infeccioso, simultánea en diferentes países, con una MORTALIDAD SIGNIFICATIVA en relación a la proporción de población infectada”. En la nueva definición de “Pandemia” se ha eliminado esta característica de la “mortalidad” (British Medical Journal)… Es decir, sin esta “definición nueva” la llamada “Pandemia por A/H1N1” no tendría nada de excepcional y no tendría que estarse haciendo el escándalo que se hace, ni el gasto que se hace y hará, ni el temor que se genera… O, en todo caso, tendría que estarse haciendo el mismo escándalo por otras muchas enfermedades… En correlación con esta irregularidad de la OMS y como antecedente de la nueva definición de Pandemia hay que recordar que el 26 de abril de 2009 los Estados Unidos declaran “Emergencia Nacional Sanitaria” con sólo 20 infectados del A/H1N1 y CERO MUERTOS…

6) SEXTO HECHO Y DATO CIENTÍFICO: La “documentación” de cualquier caso de Influenza como caso de A/H1N1 no es fácil ni exacta. Y ADEMÁS YA NO SE ESTÁ REALIZANDO. Fue en el mismo junio o quizá julio de 2009 que la OMS dijo: No hagan más comprobaciones de laboratorio. Si hay síntomas de Gripe anótense como de “Gripe A/H1N1”. En Inglaterra, por ejemplo, basta con dar los síntomas telefónicamente para que se anote como Influenza A/H1N1… Por lo tanto la cuenta que se está haciendo de número de casos de infección o muerte por virus A/H1N1 no es realmente de casos comprobados por laboratorio y eso significa que se están inflando arbitrariamente los datos para este “virus nuevo”…

7) SÉPTIMO HECHO, COMO CONSECUENCIA POLÍTICA DE UNA DECLARACIÓN DE “PANDEMIA”: La OMS es una organización mundial que hace normalmente “recomendaciones” a los países y luego cada país es soberano para aplicarlas o no según su criterio, sus circunstancias y sus propios estudios internos… Pero esto cambió en 2005 para el caso de las “Pandemias”. PARA UN CASO DE “PANDEMIA” –declarada por la OMS- LA OMS NO HACE “RECOMENDACIONES” SINO QUE DA ÓRDENES QUE LOS PAÍSES TIENEN QUE ACATAR OBLIGATORIAMENTE… Nótese que para la definición de “Pandemia” en 2005 esto tiene algún sentido y tiene alguna justificación –pues se trata de alta mortalidad por contagio infeccioso-, pero respecto a la definición de “Pandemia” en 2009 estas “órdenes” son injustificadas y arbitrarias –pues la mortalidad por el virus A/H1N1 no es hasta ahora significativa-… En esto se basaría la VACUNACIÓN OBLIGATORIA –no como recomendación- PARA ESTE 2009… Quien no acepte vacunarse tendría como consecuencias multas (en Massachussets se ha propuesto una multa de 1000 dólares diarios) o cárcel… Otras formas de obligar, que ya se están haciendo, es con amenazas de despido en empresas públicas o privadas…

8) OCTAVO HECHO, COMO CONSECUENCIA ECONÓMICA Y POLÍTICA DE LA DECLARACIÓN DE “PANDEMIA”: La OMS ha “recomendado” TRES VACUNAS PARA ESTE AÑO, situación que por primera vez ocurre en la historia: La de la “Gripe Estacional” que ya se está distribuyendo y luego –en la mayor parte de los casos en dos dosis- la de la “Nueva Gripe (A/H1N1), CON LO QUE SE MULTIPLICA POR TRES LA POSIBILIDAD DE EFECTOS SECUNDARIOS… Hay tres factores que hacen distinta esta vacuna nueva de la estacional de cada año: 1) Que será en dos dosis… 2) Según denuncias documentadas se está utilizando en esta vacuna un “coadyuvante” (mezcla de polisorbitol y escualeno) que no se había autorizado antes y que no se ha probado hasta ahora, cuya función es estimular el sistema inmunitario para provocar una respuesta inmunitaria 10 veces mayor a lo habitual, y que se dio a los soldados en el Golfo Pérsico con efectos secundarios graves en sistema nervioso central. La justificación de las farmacéuticas es que la cantidad que se les ha pedido, alrededor de 4,6 billones de dosis, sólo sería posible con el uso de estos “coadyuvantes” pues así se utilizaría menos “antígeno” (menor cantidad de virus atenuado), lo que implica menor excitación “natural” y más excitación “artificial”. No se sabe, porque no se ha hecho antes, en qué medida esta estimulación artificial va a provocar enfermedades autoinmunitarias, una de las cuales es la “parálisis ascendente de Gillain-Barré” que podría multiplicarse como efecto secundario (en la vacunación en EEUU de 1976 hubo denuncias por alrededor de 3000 casos afectados con este síndrome; los CDC –Centers for Disease Control and Prevention- ya han anunciado que ocurrirán inevitablemente “algunos” casos de esta enfermedad grave)… Esta sola enfermedad grave hace absurda la idea de una vacunación para una gripa que NO TIENE MORTALIDAD SIGNIFICATIVA –es decir, puede haber más muertes por la vacunación que por la enfermedad misma-… Al menos debería informarse a todas las personas sobre esto para que cada uno decidiera si ponerse la vacuna o no, pero no se está haciendo… 3) Para esta vacuna las compañías farmacéuticas están exigiendo documentos escritos para quedar exentos de toda responsabilidad legal respecto a los efectos secundarios de esta vacuna, incluida la muerte (en EEUU la Secretaria de Salud ya ha firmado un documento semejante que da inmunidad-impunidad legal y económica a estas farmacéuticas y a los políticos que tomen estas decisiones). Esto implica que no hay garantías de ninguna especie para la población y tampoco esto se está informando…

9) NOVENO HECHO Y DATO OBJETIVO: En 70 años no ha habido ni “mutación” ni “segunda ola” para el Virus de Influenza A, y sin embargo se está hablando de eso como si fuese un hecho para este 2009… ¿Habrá alguna información que la mayoría desconocemos?… Si se juntan todos los hechos y datos señalados antes da la impresión que cualquier “Pandemia real”, con alta morbilidad y mortalidad, que sucediera después de las vacunaciones 2009, sería efecto de las vacunas y no de la propia infección viral… CON LOS DATOS SEÑALADOS HAY MÁS RIESGO EN LA VACUNACIÓN QUE EN LA ENFERMEDAD POR EL VIRUS A/H1N1…

10) DÉCIMO HECHO Y DATO OBJETIVO: Si una vacuna realmente protege contra un determinado virus y ha creado ya anticiuerpos contra ese virus, ENTONCES ES ABSURDO ESTAR VACUNANDO CADA AÑO –como se hace para la “Influenza estacional”-… Si el virus “mutara” –lo que no ha ocurrido en 70 años- entonces tendría que hacerse una nueva vacuna que se adapte a la nueva “mutación” específica y no repetir la que ya no es útil… No parece haber razones para esta vacunación anual, a no ser “razones” no médicas –políticas, económicas, etc.-…

11) ONCEAVO HECHO Y DATO OBJETIVO: Los “expertos”, profesionales, académicos, investigadores, más formados e informados en las cuestiones de la Salud tienen un problema cuando se trata de la verdad y de evaluar críticamente la gran cantidad de información sobre este asunto que está circulando: que de lo que digan o hagan depende su trabajo y su sobrevivencia en el sistema de salud al que pertenecen. Es claro que se ven presionados y forzados, incluso en forma natural y espontánea, a ir de acuerdo, no separarse mucho, de lo que el sistema en conjunto esté haciendo y diciendo. Es lógico que SI NO ESTÁN AL CIEN POR CIENTO SEGUROS DE ALGO NEGATIVO O FRANCAMENTE EQUIVOCADO NO ABRIRÁN LA BOCA EN UN SENTIDO CRÍTICO O DE CUESTIONAMIENTO… La Dra. Teresa Forcades misma señala que si ella dice lo que dice y hace lo que hace respecto a estos asuntos de salud pública es porque ya no depende actualmente del sistema médico… Aun así, muchos profesionales de la salud en todo el mundo, evitando interpretaciones y “sospechas” subjetivas, están dando a conocer datos objetivos semejantes a los que aquí se han señalado…

12) DOCEAVO HECHO Y DATO OBJETIVO: Las muertes en Europa –según la ECDC- por complicaciones asociadas a la Gripa común oscilan entre 40,000 y 220,000 por temporada, y nunca se están anunciando todos los días cuántos muertos van pues eso provocaría un pánico innecesario e injustificado en personas no acostumbradas o no conocedoras de los datos estadísticos… En el caso de la Gripa A/N1H1 se está provocando pánico innecesario al estar señalando la OMS y los medios de comunicación cuántos muertos van casi cada día en esta temporada, pues dan la impresión –sea o no su intención- que esa mortalidad es “nueva”, o “inesperada”, o “mayor” que en otra tipo de infecciones LO CUAL ROTUNDAMENTE NO ES ASÍ. De hecho, por la Gripa A/H1N1 las muertes han sido menores a las de la Gripa común en el mismo período de tiempo… Y eso sin tomar en cuenta lo ya dicho sobre la recomendación de la OMS de que ya no se haga el análisis específico para A/H1N1 en enfermos con síntomas gripales por lo que en muchos países TODAS LAS GRIPAS SE ESTÁN CONTABILIZANDO COMO SI FUESE DEL VIRUS A/H1N1…

PROPUESTAS Y RECOMENDACIONES QUE HACE LA DRA. FORCADES:

1) Mantener la calma. No tener miedo… A la Gripe A conocida hasta ahora, en cualquiera de sus formas, NO SE LE DEBE TENER NINGÚN MIEDO. ESPECIALMENTE NO SE DEBE TEMER AL “NUEVO” VIRUS A/H1N1 QUE, SEGÚN TODOS LOS DATOS OBJETIVOS, TIENE UNA MORTALIDAD MENOR A LA DE LA GRIPA DE CADA AÑO… Respecto a posibles “complots” o “conspiraciones” de personas o de grupos que pretendan, con “buena” o con mala intención controlar y dominar al mundo, TAMPOCO HAY QUE TENER MIEDO, HAY QUE EVITAR EL MORBO Y EL CATASTROFISMO, pues a lo largo de la historia siempre los ha habido y LA CONCIENCIA Y LA BONDAD DE LA MAYORÍA DE LOS SERES HUMANOS SIEMPRE HAN PREVALECIDO… EN LUGAR DE MIEDO HAY QUE INFORMAR, TOMAR CONCIENCIA Y ACTUAR PRUDENTE, EFICAZ Y OPORTUNAMENTE (en el punto 4 se señalan acciones urgentes concretas)…

2) Precauciones habituales, de sentido común, para no contagiarse…

3) NO VACUNARSE ESTE AÑO ANTE TODAS ESTAS CIRCUNSTANCIAS YA SEÑALADAS, que por simple sentido común están haciendo numerosas personas, profesionales de la salud y organizaciones…

4) Activar, con carácter urgente, TODOS LOS RECURSOS CIUDADANOS Y LEGALES PARA LOGRAR DOS COSAS EN NUESTROS PAÍSES: 1) QUE NO SE OBLIGUE A NADIE A RECIBIR UNA VACUNA QUE NO DESEA RECIBIR, y 2) Aquellos que libremente desean recibir la vacuna puedan tener el derecho de demandar responsabilidades y/o a ser compensados económicamente en caso de que la vacuna les causara enfermedad grave o la muerte… HAY QUE ACTUAR SOCIAL Y POLÍTICAMENTE PARA QUE SE LOGREN ESTAS DOS COSAS EN NUESTROS PAÍSES… Aquí en México la Resistencia Civil Pacífica ha logrado resultados extraordinarios que muestran la Fuerza Ciudadana que se manifiesta y sale a las calles, por lo que también en este ámbito de la Salud y de los Derechos Humanos Fundamentales podemos y debemos actuar…

Yo añado una quinta recomendación:

5) DIFUNDIR ESTA INFORMACIÓN CON NUESTR@S AMIG@S, FAMILIARES, VECINOS Y CONCIUDADANOS A TRAVÉS DE CORREO ELECTRÓNICO, BLOGS, COPIAS FOTOSTÁTICAS Y TODA OTRA FORMA DE COMUNICACIÓN… Como en otros momentos de la historia, está de por medio nuestra supervivencia y crecimiento como especie… ¡Tomemos conciencia, seamos generosos y responsables, y ACTUEMOS EN LA MEDIDA DE NUESTRAS POSIBILIDADES!

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