Hispan Tv: En Portugal, la grave crisis política desatada por el pedido de dimisión de varios ministros de la coalición gubernamental está dañando la economía del país. La troika mira atenta a Lisboa, mientras los inversores internacionales abandonan el país europeo.
A la grave crisis política por la que pasa Portugal hay que agregarle un imprevisible conjunto de consecuencias económicas.
La salida de varios miembros de la coalición en el poder, los democristianos del CDS, podrá significar, a corto plazo, una ruptura en el gobierno y su incapacidad para gobernar. Será imposible aplicar las reformas, pues el partido mayoritario en la coalición, el PSD, no contará con los votos suficientes en el Parlamento. La austeridad parece ser, en estos momentos, la madre de todos los males, los económicos y los políticos. Se viene aplicando a rajatabla y los portugueses están más pobres.
Un clima de inestabilidad económica que los portugueses conocen bien. Sucedió algo parecido en la revolución de los claveles en 1974, pero también en los ochenta.
Este jueves, el primer ministro luso, Passos Coelho, deberá encontrarse con el presidente de la República, Cavaco Silva. Ambos pertenecen al PSD, partido liberal conservador y el miembro más importante de la coalición en el poder.