La policía sudafricana detuvo este miércoles a 45 personas durante una protesta contra las malas condiciones de vida en el oeste de Johannesburgo.
Los arrestos se produjeron en la ciudad de Fochville, donde las fuerzas policiales recurrieron a balas de goma para dispersar a los manifestantes.
Según la policía, los manifestantes quemaron la casa de un consejero del Congreso Nacional Africano (ANC), partido gobernante en Sudáfrica, y saquearon muchos comercios.
“La gente estaba lanzando piedras contra la policía y bloqueó las calles quemando neumáticos”, declaró la portavoz de la policía, Katlego Mogale.
Desde el pasado jueves, Fochville, donde la mayoría de los habitantes viven en chozas, es escenario de protestas en demanda de mejores viviendas y acceso a agua corriente.