SANTIAGO (EFE) — El juez español que atiende el caso del accidente de tren del pasado 24 de julio imputó este martes a los responsables de seguridad de la infraestructura ferroviaria en el tramo donde ocurrió el siniestro.
En un auto, el magistrado del juzgado de Santiago de Compostela detalló que dará fecha de audiencia como imputados a los responsables una vez que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias de España informe sobre la identidad de tales personas.
En el accidente fallecieron 79 personas y más de 150 resultaron heridas.
El juez Luis Aláez detalló que las muertes y lesiones que causó el siniestro se encuentran “obviamente conectadas” con la conducción inadecuada por exceso de velocidad del maquinista, Francisco José Garzón.
Pero señaló que un examen de las circunstancias del siniestro “permite inferir también su conexión con la omisión de medidas de seguridad preventiva de naturaleza vial y, en definitiva, con una conducta imprudente de las personas responsables de garantizar una circulación segura en el tramo de la vía donde se produjo la catástrofe”.
En el auto se expone que ante un posible error humano, se deberían haber adoptado otros procedimientos que salvaran o evitaran una “predecible” equivocación “advirtiendo del peligro”.
“Cierto es que el maquinista es el responsable de manejar y guiar el tren”, pero “también lo es que era claramente previsible que un descuido o desatención de aquel podía provocar un accidente con alto riesgo para la vida e integridad de los pasajeros”, dice el auto.
Este accidente ferroviario, el segundo más grave en la historia de España, se produjo a la entrada de Santiago de Compostela, capital de la región de Galicia, en el noroeste del país.
Entre los fallecidos había ocho extranjeros: dos de Colombia, una estudiante de México y otros de República Dominicana, Brasil, Estados Unidos, Italia y Argelia.