Una colaboración de lalunagatuna
En los alrededores del río L’Ariege, muy próximo a los Pirineos, existen multitud de sitios vinculados a viejas leyendas, a historias de muerte, guerra, misterio y religión. A sectas exterminadas a golpe de espada y fes exterminadas por el fuego. A castillos con fantasmas, a puentes malditos, … Hoy vamos a hacer un pequeño recorrido por algunos de estos lugares. Algunos, muy conocidos, otros, mucho menos, pero no por ellos menos interesantes.
EL CASTILLO DE FOIX
 Castillo de Foix |
Comenzamos nuestra ruta en la población de Foix. Foix está presidida por un gigantesco y espléndido castillo en lo alto de un peñasco desde el que se domina toda la ciudad y es la entrada al valle del río L’Ariege. Las primeras reseñas del castillo datan del año 987, aunque se sabe que fue construido sobre una fortificación anterior. En el año 1002, Roger I, conde de Carcasona lega el castillo a su hijo Bernard. |
En 1034, el castillo pasa a pertenecer al Condado de Foix y durante los dos siglos siguientes se convierte en el centro de la resistencia occitana ante la cruzada albigense. Durante 6 siglos resistio independiente hasta que en 1590, el último conde, Enrique IV unio definitivamente a Foix con Francia. Ansiado por Simon de Monfort, el castillo de Foix sigue en pie aún hoy día tan espléndido como entonces, habitado, según me comentaron, por un fantasma que ronda durante la noches.
EL PUENTE DEL DIABLO
| Muy próximo a Foix y junto a las poblaciones de Montolieu y Ginabat, se encuentra el conocido como “Pont du Diable”. Cuenta la leyenda que en tiempos antiguos los pobres habitantes de Ginabat y Montolieu vivían aislados, ya que el río era casi imposible de atravesar a causa de los remolinos que se formaban (y todavía se forman). Un día, un hombre del lugar tuvo la idea de invocar al Diablo para que les construyera un puente. El Diablo se ofrecio a construirlo en una sola noche pero, como de costumbre, con una condición: quedarse con el alma del primero que cruzase el puente. La gente aceptó y el Diablo se pasó toda la noche, junto a muchas más criaturas infernales construyendo un puente que, de haber sido hecho por humanos, hubiera llevado 3 años en construir. A la mañana siguiente, la gente contempla el puente infernal sin que nadie se atreva a cruzarlo. De repente, un nativo se presenta con una bolsa: de ella sale un gato al que asusta y hace cruzar el puente. Satán entra en cólera y de los gestos de rabia que hace termina cayendo al río, justo en el centro de un remolino. |  El puente del diablo |
El cura de Ginabat le lanza agua bendita y Satanás termina siendo tragado por el remolino. Hoy día son muchos los turistas que cruzan este puente, sin saber el peligro que corren, ya que tarde o temprano Satanás puede escapar del remolino y volver para reclamar el pago de su obra.
EL CASTILLO DE MONTSEGUR
 Montsegur |
El lugar del gran exterminio cátaro sobre el que tantas cosas dicen la historia y las leyendas. Entre sus muros se ha llegado a decir que estuvieron ocultos el Santo Grial, el Tesoro de los Templarios o hasta el gran secreto de los cátaros. A pesar de que su popularidad viene precisamente por los cátaros, lo cierto es que el castillo de Montsegur ya tuvo diversas construcciones anteriores y su ubicación, en lo alto de una montaña de paredes prácticamente inexpugnables lo convirtio casi en un templo al sol. En sus alrededores se pueden encontrar muchos símbolos e inscripciones extrañas, especialmente en una ruta de subida distinta a la turística. |
En el pie de la montaña se encuentra el famoso “Camp des cremats”, el lugar donde el último bastión importante de cátaros fue hecho pasar por la hoguera. Allí se encuentra una famosa lápida en recuerdo a los 210 “hombres buenos” que se lanzaron a las llamas cantando.
Al igual que ocurriera con Montserrat, el nombre de Montsegur también atrajo a los nazis en su busca del Santo Grial hasta estas tierras. Aún hoy quedan vivos diversos ciudadanos franceses que contactaron con los agentes nazis. La elección de estos dos sitios para la búsqueda se basaba precisamente en el parecido del nombre con Montsalvat, la montaña donde se encontraba el Grial en, por ejemplo, las óperas de Wagner sobre el tema. Los nazis, auténticos amantes de Wagner, no dudaron en buscar allí. Y dada la leyenda cátara del tesoro secreto descendido la noche antes de la hoguera, aún lo hicieron con más convencimiento.
LA CRUZ DE MORENCI
 La cruz de Morenci |
A muy poca distancia de Montsegur se encuentra, escondida entre la vegetación, la conocida como “Croix de Morenci”. Una extraña cruz en cuyo centro existía un rostro que un día, un borracho, destruyó pegandole un tiro. En la parte inferior, un símbolo “8″ perfecto. Al parecer, la cruz se colocó para “cristianizar” el sitio, y el 8 podrían ser dos círculos tangentes indicando la posiciónes más alta y más baja del sol a lo largo del año. A escasos metros de la cruz se encuentra un menhir en cuyo interior un niño encontró una misteriosa mano de piedra hace algunas décadas. Una mano que no deja de ser un misterio y de la que mucha gente piensa que no es lo único extraño y misterioso que puede hallarse dentro.
A unas decenas de metros, escondida entre la vegetación, se encuentra la Roc de la Fougasse, un altar de sacrificio al que podemos llegar por una senda que parte al retroceder unos metros por el mismo camino por el que hemos subido y que nos lleva directo a ella.
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Todo este conjunto de extrañas piezas arqueológicas se encuentra a escasos kilómetros de Montsegur, tan escasos que desde el menhir se divisa estupendamente la cima del castillo de Montsegur.
LA FUENTE DE FONTESTORBES
| Dice la leyenda que en Fontestorbes había una gruta, hoy bloqueada, habitada por hadas madrinas que golpeaban sus vestidos de lino con oro provocando el tremendo ruido que proviene del interior de la fuente. Un día una de estas hadas le pidio a una mujer del lugar que dejase que uno de sus niños entrase a la cueva. En agradecimiento por haber confiado en ellas, las hadas obsequiaron a la mujer con una varita mágica de oro capaz de hacer realidad todos sus deseos. Cuando la mujer murio, los hijos se pelearon por la varita partiendola en trozos que volvieron a ser madera sin poderes mágicos. |  Fontestorbes |
La fuente de Fontestorbes es una fuente peculiar ya que se encuentra situada en el interior de una cueva cuyo camino de acceso queda sumergido debajo del agua en periodos cíclicos de x minutos. Una vez el agua comienza a crecer, has de salir rápidamente si no quieres acabar dandote un buen baño.
EL CASTILLO DE PUIVERT
 El castillo de Puivert |
Siguiendo hacia el este divisaremos este castillo que, además de ser un importante castillo cátaro, muchos lo reconocerán por el ser el castillo que aparece en la película “La novena puerta”, basada en la novela “El Club Dumás” de Arturo Pérez-Reverte. Puivert es un bonito pueblo que además de este castillo cuenta con un lago con playa. |
Gaillard de Congost fue el hijo de Bernardo, Señor de Puivert y cátaro, que murio en el Castillo de Montsegur en 1242. Durante su estancia en Puivert, promovio el castillo como centro de la cultura occitana. Poetas y músicos eran animados para que permanecieran en el castillo.
El castillo fue atacado en 1210. Bernardo logró escapar por un tunel subterraneo llevando a su hijo, Gaillard, en sus brazos. En 1242 hubo una masacre en Avignonet contra 11 oficiales de la Inquisición. Entre los atacantes estaba Gaillard, tomandose la venganza por lo ocurrido en su infancia.
RENNES LE CHATEAU
| ¿Qué voy a contar de Rennes Le Chateau que no sepan a estas alturas? Rennes Le Chateau es el pueblo conocido por la extraña historia de su párroco Berenger Saunier y la cantidad de rumores y leyendas que giran en torno a él y su supuesto tesoro hallado bajo el altar de la iglesia cuando se realizaban unas reformas. Lo que al principio fue la simple suposición del hallazgo de un tesoro material se conviritio luego en rumores sobre el Santo Grial, María Magdalena, los viajes en el tiempo y otras extrañas teorías. Un pueblo cuya historia inspiró “El Enigma Sagrado” y “El Legado Mesiánico”, que a su vez inspiraron a “El Código Da Vinci”. |  El diablo que sostiene la pila de agua bendida en la Iglesia de R.L.C. |
Lo primero que ve uno cuando llega a Rennes Le Chateau es un cartel indicando que “están prohibidas las búsquedas”. Y es que, en su día, dejaron lo suelos de Rennes Le Chateau como un queso de gruyere. Merece la pena visitar el museo, que no es sino el acceso a Villa Bethania, donde se puede ver la casa tal y como era, con toda su extraña decoración y, por supuesto, la famosa Torre Magdala. Es imperdonable no visitar la iglesia, por supuesto, con todos sus mensajes esperando ser descifrados. Es muy bonito el cementerio, aunque con las contínuas visitas a la tumba de Berenger, esta ha sido desplazada hasta Villa Bethania y el cementerio cerrado para que sólo accedan los familiares de los difuntos. Para quien sea más “aventurero”, merece la pena hacer un poco de senderismo por los alrededores. Algunos dicen que por allí está la tumba de Constantino, otros que la del propio Jesucristo. En fin. Lo que sí es cierto es que existe la famosa leyenda del joven que cayó en una cueva llena de tesoros y que el párroco Sauniere daba largos y misteriosos paseos por la zona. En cualquier caso, por si no saben francés, avisados están de que no se les ocurra hacer un agujero.
Para quien quiera realizar esta ruta he diseñado un mapa con Google Maps que pueden usar como referencia. Un punto ideal de inicio podría ser Toulouse y de fin Carcasona. O incluso se puede completar un círculo, porque ambas están unidas por autopista. Además, en el camino existen otros muchos sitios dignos de ver que no he mencionado: Mirepoix, Vals, etc… En el mapa, las ubicaciones de algunos sitios no son del todo exactas, ya que las fotos satélite de Google no tienen la suficiente calidad y no he podido ajustar las posiciones. Para ver el mapa, pulsar aquí.