Es una ley, no falla, la creación habla por sí sola, como es el caso del megalodón, el cual fue una especie de tiburón gigante hallado por el Instituto Español de Oceanografía. Dentro de la noticia del medio que se hace eco del hallazgo se hace una afirmación demoledora para los creyentes en la pseudo religión evolucionista.
vivió aproximadamente desde hace 20 millones de años (en el mioceno) hasta hace tan solo 2 millones de años (plioceno)
Es decir, otro bicho más que se une la lista de no evolucionados, aunque lo raro es encontrar a tan solo uno de los evolucionados. Estos magníficos tiburones que se alimentaban de ballenas se extinguió tal como aparición en el registro fósil durante 18 millones de años. También existían ejemplares más pequeños.
Como siempre ante una noticia de este tipo cabe hacerse varias preguntas, ¿cual es el antepasado evolutivo inmediatamente anterior al tiburón?, ¿cómo?; ¿no oigo?, ¿puedo ver un fósil? Ah que no existen fósiles, ah que no se sabe… ¿cómo, que ya aparecerá?, vale esperare sentado.
Sobre la anatomía del megalodón se puede comprobar que era un tiburón echo y derecho, como un tiburón blanco gigante y que aparece con tal sofisticación por primera vez en el registro fósil hace 20 M.a.
C. megalodon es considerado como uno de los mayores y más poderosos depredadores en la historia de los vertebrados.2 Los estudios sugieren queC. megalodon lucía en vida como una versión corpulenta del gran tiburón blanco actual, Carcharodon carcharias, llegando a alcanzar los 16 metros de longitud total.1 (Wikipedia)
Pero no nos llevemos a engaños, dentro de los tiburones existen especies que tienen 360 M.a como el del género Stethacanthus o pez “tabla de planchar”. Los tiburones son tiburones desde siempre y así aparecen en el registro fósil. El marcador de nuevo hace vencer a Dios frente a Darwin, con el marcador del farsante científico a 0.
Stethacanthus, un fósil de unos 330 M.a
La obra y la voluntad de Dios no pueden ser silenciadas por los fanáticos Darwinistas psicópatas actuales. Lucas 19:40 “…Les aseguro que si ellos se callan, gritarán las piedras”.