En cierta ocasión un grupo de personas que buscaba entender el mal rumbo que lleva nuestra sociedad (guerras, hambruna, pobreza, discriminación racial, destrucción del medio ambiente, etc., etc.….) fueron en busca de un anciano de gran sabiduría y famoso por sus respuestas, claras, concretas y concisas.
Y le preguntaron: SABIO ANCIANO ¿POR QUÉ SIEMPRE GANAN LOS MALOS?
EL SABIO LES RESPONDIÓ………PORQUE VOSOTROS LOS BUENOS QUE SOIS MÁS SE LO PERMITÍS…………….
Esto enlaza con una historia real, cuando Roma estaba en su más alto esplendor, por el centro de la ciudad paseaban dos senadores romanos y uno de ellos ante la gran cantidad de esclavos que había, le dijo al otro:
DEBERÍAMOS OBLIGAR A LOS ESCLAVOS A LLEVAR UNA MARCA PARA IDENTIFICARLOS, A LO QUE EL OTRO SENADOR ROMANO LE RESPONDIÓ……….NI SE TE OCURRA NO VES QUE ENTONCES SE DARÁN CUENTA QUE SON MUCHOS MÁS QUE NOSOTROS Y NOS DERROTARÍAN……..
Es más de lo mismo la historia se repite, quizá porque aun no hemos sabido o no hemos querido solucionar esta situación donde unos pocos….tienen dominados a todos los demás……….
De hecho en el momento actual se calcula que no llega al 10% las personas que tienen el control sobre el resto de todos nosotros que somos el otro 90%.
La creación es perfecta y nadie puede ir más allá de una lección no superada, por eso tenemos que seguir intentando hacer un mundo donde todos seamos felices de verdad.
“ES EVIDENTE QUE LA NO VIOLENCIA NO ES UNA FORMA DE INACCIÓN O FALTA DE VOLUNTAD SINO LO OPUESTO”. De hecho, es mucho más fácil alzar la voz o lanzar una piedra que mantenerse firme ante el embate de las fuerzas oscuras que constantemente incitaran el uso de la rabia y frustración.
PARA ACTUAR PACÍFICAMENTE HEMOS DE TENER CORAJE Y MUCHA FUERZA DE VOLUNTAD. Un movimiento basado en la conciencia tiene como objetivos el equilibrio y la armonía, en lugar del aniquilamiento del adversario. Por ello, decide perdonar sus errores y aplicar justicia si es necesario, enmendar rumbos y continuar el camino en pos de la colectividad a la que pertenece.
Ese hermoso multiorganismo que algunos llaman sociedad, un reflejo Macro de el propio cuerpo humano, millones de conciencias que deciden su propio rumbo dentro del gran Ser, pero que a veces se vuelven contra sí mismas al no comprender que son absolutamente codependientes”
Indignarse era el primer paso tras abrir los ojos y contemplar el abismo donde nos está llevando una mal modelo de sociedad y quienes la conducen. Pero las reacciones tras la indignación pueden ser de distinta naturaleza, y de elegir bien depende el futuro de los movimientos de cambio y el éxito de sus demandas.
La vía de violencia, que al sistema le encantaría que tomáramos -incluso provocándolo- para desacreditar al activismo colectivo y para justificar contra-medidas, es un retroceso a niveles de conciencia que debemos precisamente dejar. En cambio, la vía pacífica, con firmeza y aplomo, puede convertirse en un arma de destrucción masiva de viejos paradigmas. Reflexiones en un momento en que todos los pueblos del mundo se están movilizando para cambiar las reglas de juego y el rumbo de todos…
Alrededor del mundo podemos observar la masiva intención de encontrar soluciones a problemáticas que según muchos se trata de un despertar de conciencia colectiva. Pero ello conlleva un desafió aun mayor, ya que la mayoría se desestabiliza al analizar situaciones que como mínimo les causan molestia e incomodidad hasta depresión o desesperanza dependiendo del caso, lugar y circunstancias.
Ante ello, encontramos dentro del baúl interno múltiples herramientas, muchas de ellas ya oxidadas por el uso excesivo y otras obsoletas, pero al final de cuentas, somos libres de elegir la que consideremos más apropiada para solucionar el problema en el que estemos entrampados aun cuando no sea la más efectiva.
Muchos en momentos complejos siempre optan por la opción más simple que es condenar tal o cual situación pero solo actuar cuando ya no se vislumbre arreglo posible y arremeten violentamente, descargando toda su ira y frustración contra el causante o quienes los resguardan, actitud que no comparto pero que comprendo muy bien.
Solo debemos analizar que la violencia no es más que una expresión desesperada, o más bien una súplica para que cambien las condiciones, pero, la evidencia de años de revueltas sociales y políticas demuestran lo contrario. Aquel sistema corrupto para algunos, o represor para otros, no hace más que seguir ideando nuevas formas de combatir contra los “enemigos” del sistema. Esa es, de hecho, una más de las causas directas de situaciones opresivas, el sistema necesita enemigos a quienes combatir, con ello justifica acciones inconscientes e injustas, pero al cabo, necesarias para su supervivencia.
Observo la misma esencia que ha ocurrido durante siglos donde cientos de vasallos indefensos exigieron al señor feudal “protección y seguridad”, que es en el fondo lo que prometen y promueven quienes están en el poder actualmente. Prometen un sistema perfeccionado, que nos resguardara ante cualquier peligro pero a cambio exige obediencia, sumisión e incondicionalidad.
Y EN CASO DE QUE NO EXISTA TAL PELIGRO, ELLOS MISMOS SE ENCARGAN DE GENERARLO, PARA A CONTINUACIÓN ELIMINARLO Y PRESENTARSE ANTE NOSOTROS COMO “NUESTROS SALVADORES”
Pero esto es solo en la forma externa. En el interior de los que nos gobiernan, sigue reinando la idea de que siempre es necesario generar y sembrar en el ser humano el miedo, la ignorancia y la desconfianza de quien está a su lado. Para tenerlo controlado.
Por ello, “La Vía Pacífica” viene a mostrar a través de seres fuera de serie como Gandhi y Martin Luther King, que aparte de la lucha armada disponemos esta vía, como una de las pocas formas en que el sistema no tiene como contraatacar de la forma convencional, es decir, siendo víctima. En otras palabras, le quitas la costumbre de defenderse.
Exponiendo sus reales deficiencias a los ojos de los no-despiertos, el sistema se vuelve en el atacante pero ello implica que estamos en conflicto, y esta no es la intención de la “no violencia”.
Por eso es necesario buscar la formula que nos lleve a….. una nueva sociedad, justa y equilibrada, en que prime la “ley del más sabio” en lugar de la “ley del más fuerte”, pero si nos encontramos ofuscados por la cólera o rabia difícilmente se podrá visualizar condiciones favorables o plantear lo que realmente se debe cambiar.
Respeto y Coherencia son legítimas aspiraciones que la mayoría considera como prioridad, pero además de las implicatorias a gran escala de la “No Violencia” están las implicanciones internas, o mejor dicho de nuestro “Ser interno”. Porque más allá del nombre y el papel que desempeñamos en la comunidad existen pistas de que somos seres espirituales ilimitados, que vivimos a través de nuestros sentidos e interpretamos el exterior según las percepciones entregadas.
Este Ser puede verse afectado por las condiciones externas y las limitaciones mentales impuestas, por ello la agresión y la critica continua sin formas constructivas dañan y obstruyen los canales perceptivos, la mente se empaña y lo único que redunda en la cabeza es el problema mismo o el recuerdo de una experiencia cumbre negativa.
Por esta razón, la Vía Pacífica mantiene convicciones sólidas, cohesión de ideas puras y permite observar con mayor claridad los obstáculos y errores, ya que la mente se mantiene serena, enfocada en su misión de limpieza y renovación, clara en su objetivo de exponer las incongruencias, pero firme en su meta de acoger a todo aquel que esté dispuesto a actuar en conciencia evitando el aislamiento.
ASIMISMO ES EVIDENTE QUE NO ES UNA FORMA DE INACCIÓN O FALTA DE VOLUNTAD SINO LO OPUESTO, DE HECHO, ES MUCHO MÁS FÁCIL ALZAR LA VOZ O LANZAR UNA PIEDRA QUE MANTENERSE FIRME ANTE EL EMBATE DE LAS FUERZAS OSCURAS QUE CONSTANTEMENTE INCITARAN EL USO DE LA RABIA Y FRUSTRACIÓN.
PARA ACTUAR PACÍFICAMENTE HEMOS DE TENER CORAJE Y MUCHA FUERZA DE VOLUNTAD. UN MOVIMIENTO BASADO EN LA CONCIENCIA TIENE COMO OBJETIVOS EL EQUILIBRIO Y LA ARMONÍA, EN LUGAR DEL ANIQUILAMIENTO DEL ADVERSARIO.