Con el fin de atraer a las hembras y de repeler a sus rivales masculinos, estos animales gritan en la dirección en la que se van a mover, ha revelado un estudio realizado por antropólogos de la Universidad de Zurich (Suiza), que durante años han observado a orangutanes de Sumatra.
Durante mucho tiempo, se ha pensado que sólo los seres humanos tienen la capacidad de anticipar sus acciones futuras, mientras que los animales están atrapados en el aquí y el ahora. Sin embargo, en los últimos años, diversos experimentos con grandes simios en zoológicos han demostrado que éstos recuerdan eventos pasados y pueden planificar el futuro. En entornos salvajes sucedería lo mismo.
En general, los orangutanes se mueven solos por los bosques, pero también mantienen relaciones sociales. Según los investigadores, cuando los machos adultos emiten “llamadas largas” fuertes lo hacen para atraer a las hembras y para espantar a sus rivales que, al oírlas, corren en dirección contraria.
Por otra parte, los investigadores constaron que la dirección de esas “llamadas” determinaba la dirección a la que se encaminaba el orangután al día siguiente. Además, los orangutanes avisaban con nuevas llamadas, más potentes, si cambiaban de dirección por el camino.
“Nuestro estudio pone de manifiesto que los orangutanes salvajes no sólo viven en el presente, sino que además pueden imaginar un futuro e incluso anunciar sus planes. En este sentido, por tanto, se han vuelto un poco más como nosotros “, concluyen los científicos.