El régimen de Erdogan no es capaz de impedir la infiltración en su territorio de hombres armados desde Siria, pese a las estrictas medidas de seguridad que ha tomado a lo largo de la frontera, así ha declarado este lunes el presidente turco, Abdolá Gül.
Tomado de Radio del Pueblo ::
Los grupos radicales, apoyados, financiados y armados por occidente y Turquí, se están infiltrando en el país desde el territorio sirio, y este tema se ha convertido en una preocupación seria para la seguridad nacional, según el titular turco que se encuentra en la ciudad de Nueva York para asistir a la 68ª sesión anual de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Gül ha lanzado estas declaraciones un día después de dejar claro que Ankara no va a “tolerar” la presencia de los grupos extremistas en el conflicto sirio, curiosas afirmaciones si se tiene en cuenta que hasta ahora las principales formaciones terroristas fueron armados y entrenados en el suelo turco.
“No vamos a permitir que ninguna formación, más allá de nuestras fronteras, amenace a Turquía y a toda la región. No podemos tolerar esto”, informó el diario Milliyet citando a Gül.
Los comentarios del presidente turco contravienen el apoyo que ha prestado Ankara a los militantes que luchan contra el Gobierno de Damasco desde hace dos años.
La semana pasada, Turquía cerró uno de sus pasos fronterizos con Siria, luego de que se comunicaran enfrentamientos entre los grupos vinculados a Al-Qaeda y el llamado Ejército Libre de Siria (ELS) en la localidad de Azaz, sita a 30 kilómetros al norte de Alepo y a cinco kilómetros de la frontera con Turquía.
Desde marzo de 2011, los terroristas en Siria, apoyados por países de la región como Catar, y otros occidentales como EE.UU., iniciaron sus ataques con el objetivo de derrocar al Gobierno del presidente Al-Asad que cuenta con un espectacular apoyo en Siria del 70% de la población.