Millones de personas en 52 países protestan este sábado contra la compañía Monsanto. Entre dichas naciones destaca Argentina, donde la transnacional logró imponer el modelo de producción agrícola con semillas modificadas y el uso de pesticidas.
Hace seis años que Verónica Cabana se mudó con su familia de la ciudad de Buenos Aires a una zona agrícola de la provincia. Buscaban aire libre. Pero se encontraron con glifosato, la sustancia que según los médicos provocó los serios problemas respiratorios que padece su hijo de 7 años.
“Hasta el año y medio Fausto no había tenido ni un resfrío, no había tenido nada. A los dos meses que nos vamos a vivir ahí empieza con su primer broncoespasmo”, cuenta esta ama de casa a RT.
La fumigación con agroquímicos se practica a solo 200 metros de su casa, a pesar de que un fallo de la Corte Suprema de Justicia impide hacerlo a menos de un radio de 5 kilómetros. La impotencia se mezcla con el sentimiento de culpa en esta madre, que siente que acercó a sus hijos a un riesgo impensado.
RT