Imagina que una cámara escondida siguió tus pasos durante los últimos siete días. Esta cinta grabó todas tus acciones, desde las discusiones con tu pareja y los malos ratos en el trabajo, hasta tus textos y conversaciones por teléfono.
Hoy esta película la verán en pantalla grande, y con palomitas de maíz en mano, todas las personas que te conocen.
¿Estarías de acuerdo con presentar esta premiere, o harías todo lo posible por cancelarla? Conozco personas que podrían sufrir un ataque masivo al corazón antes de que comiencen a salir los créditos en pantalla.
En tu caso, si tus conocidos vieran el filme, ¿cuál de las siguientes críticas piensas que ellos expresarán?
“Qué cinta tan aburrida, antes de que acabara pude descifrar el final”. “Algunas escenas interesantes, pero es mejor esperar a que salga en video”. “¡Qué escándalo, no esperaba ésto!”. “Es un blockbuster, que película tan inspiradora”.
Reflexiona, y si tu filme fue algo que no quisieras revelar, entonces no estás siendo íntegro contigo y con tus principios; seguramente hay personas, relaciones o conductas que debes eliminar o modificar.
Te pregunto: ¿A quién estás lastimando? Si te consideras una persona de buen corazón, debes actuar de una manera que refleje tu bondad y tus valores. O, ¿acaso te estás hiriendo a ti mismo?
Si estás actuando erróneamente, aunque no sea intencionalmente ¡deja de hacerlo! No hay excusas para continuar haciendo algo que te resta valor como ser humano. Tú puedes hacer cambios que mejoren la calidad de tu vida.
Procede de tal forma que puedas caminar con la cabeza en alto y sintiéndote orgulloso de ti mismo porque protagonizas un rol que inspira a los demás a nominarte para un Oscar.