Tras el silencio que ha mantenido Washington ante las manifestaciones masivas contra sus aviones no tripulados en Pakistán, el Gobierno de Islamabad ha decidido hacerse cargo de la protección de sus ciudadanos.
En este sentido, en la mañana de este miércoles ha finalizado con éxito una maniobra militar denominada ‘Azm-e-Nau 4′, destinada a controlar y derribar los drones y aviones de combate del supuesto enemigo.
En los simulacros, han tomado parte los aviones ‘Mirage’, ‘F16′ y ‘B7′, y se han probado misiles tierra-aire.
A este evento nacional han acudido representantes de 50 países del mundo y las altas autoridades pakistaníes: el primer ministro, Nawaz Sharif; el ministro del Interior, Chaudhry Nisar Ali Jan, y el asesor especial del primer ministro en materia de Asuntos Exteriores, Sartaj Aziz.
El Ejército pakistaní ha anunciado que esta maniobra se ha realizado como respuesta a otra efectuada por La India y Rusia en Rajastán, el mayor estado indio (noroeste).
Las relaciones entre Islamabad y Washington se han tensado más por el sistemático ataque de estas aeronaves teledirigidas. Ambos gobiernos se aliaron en 2001 en una fracasada ‘guerra contra el terrorismo’ cuyo objetivo era erradicar la inseguridad en el país asiático, causada principalmente por los taliban.