Un 10 por ciento de la población checa se encuentra por debajo del límite de la pobreza, con una tendencia al incremento de ese índice en los próximos años, señaló un informe divulgado hoy por medios locales.
Según un reporte del Centro para la Estrategia Económica y Social presentado la víspera ante el Senado, un millón de checos vive en condiciones precarias, de los cuales 400 mil están la pobreza extrema.
Se trata de ciudadanos que reciben menos del 60 por ciento del ingreso anual medio de una persona, por lo que solo disponen de dos mil 500 euros para sustentarse en 12 meses.
Adicionalmente, otras 700 mil personas tienen ingresos ligeramente superiores al límite de la pobreza y se espera que próximamente puedan pasar a las filas de quienes viven en situación de miseria.
El reporte indica además que los sectores sociales más afectados son los desempleados por largos periodos de tiempo, las madres solteras, las familias numerosas, los miembros de minorías étnicas, y los mayores de 65 años.
Sobre este último grupo, aunque se indica que los jubilados disfrutan de manera general de pensiones relativamente buenas, se espera que en el futuro vayan perdiendo poder adquisitivo y mayor cantidad de ancianos pasen a la pobreza.
Por otro lado, se señala que la precariedad está concentrada en determinadas zonas del país alejadas de los principales centro económicos.
Mientras en esta capital el índice de desempleo es bajo y existe mayor atención a los ciudadanos por parte de las instituciones, en otras regiones persisten problemas como la exclusión social y la falta de oportunidades, apuntó el informe.
Al respecto, el experto en desarrollo Tomás Tozicka afirmó que el país necesita una descentralización, o más bien una policentralización que permita formar nuevos centros económicos mejor distribuidos por la geografía nacional.
“La esfera política contribuye a esta desigualdad cuando centraliza en Praga la distribución de los recursos públicos, por lo cual la capital recibe mucho más por habitante que en los otros municipios. La situación debería estar como mínimo equilibrada e invertir la misma cantidad de recursos por habitante”, sostuvo.
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