Según la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDC, siglas en inglés), la producción de opio en Afganistán aumentó en un 49% en 2012 y debe elevarse aún en un 36% en 2013. Se estima que en 2014 Afganistán proporcionará el 90% de la producción mundial de opio.
La economía afgana está volviéndose de nuevo casi exclusivamente hacia la producción de droga en momentos en que las fuerzas internacionales preparan su retirada y en que se aproxima la elección de un nuevo presidente, prevista para abril de 2014.