La ex esposa del rey de Arabia Saudí: “Ya son doce años que el rey se venga de mi por el divorcio”

La ex esposa del rey de Arabia Saudí: “Ya son doce años que el rey se venga de mi por el divorcio”

© Collage: La Voz de Rusia

Ya son más de diez años que no le permiten a la princesa Anud al-Faiz verse con sus hijas, las cuales, desde el año 2001 están bajo llaves en la patria de su padre, el rey de Arabia Saudí.

En una entrevista exclusiva a La Voz de Rusia, la princesa Anud acusó a los medios de comunicación mundiales de hacer una conspiración de silencio de esta escandalosa situación para los cánones del siglo XXI.

La ex esposa del actual rey de Arabia Saudí, Abdalá bin Abdelaziz al-Saud, proviene de una familia jordana noble. En el año 2003 y ya divorciada de su pareja, ella se vio obligada a abandonar el país, y desde entonces vive en Londres. El título de princesa de Arabia Saudí se le conservó después del divorcio. Sin embargo, todos estos años no han sido de mucha felicidad para la antigua esposa del rey. Así, la princesa Anud ha contado a La Voz de Rusia, conteniendo las lágrimas, que cada hora de su vida la pasa pensando en la suerte de sus cuatro hijas.

–Ya son doce años que sus hijas, princesas del reino saudita, están bajo arresto domiciliario y los medios de comunicación no difunden esta situación. La Voz de Rusia le pide comentarnos esta situación.

Ya son doce años que mis hijas se encuentran bajo arresto domiciliario. Tal es la voluntad de su padre, el actual rey de Arabia Saudí. Ya son más de diez años que solo vivo de la esperanza de que su vida cambie y puedan vivir felizmente. Ahora mismo, ni siquiera pueden casarse. Son doce años que espero que su padre tenga sentimientos y tenga misericordia de ellas, pero no ocurre nada. Hemos escrito a la ONU y a otras organizaciones internacionales de derechos humanos con la solicitud de ayudar a mis hijas, pero hasta ahora no tenemos respuesta. 

¿A quién usted le confío llevar el caso de “las cuatro princesas”?

El caso lo está llevando mi abogado, el ex ministro de exteriores de Francia, Roland Dumas y otro jurista, Max Coupé. También yo decidí que mi representante personal sería Read as-Saidabi, el cual me ayuda mucho ya que tiene mucha experiencia de trabajo con las organizaciones internacionales de derechos humanos. 

¿Tiene usted información sobre el estado de salud y las condiciones de vida de sus hijas?

Su salud ha desmejorado mucho en los últimos años. Dos de ellas se enferman a menudo y su condición física es deplorable. Ellas viven completamente aisladas del mundo y la sociedad, como en una prisión en el gran palacio de la ciudad de Djiba. Ellas no tienen ni sirvientas ni acompañantes. Es que en nuestra sociedad la mujer no puede hacer nada sola. (Nota del redactor: en la sociedad alauita la mujer no puede salir sola de casa, solo en compañía de algún hombre). 

Así, ellas dependen solo de sí mismas, sin ayuda de nadie. Yo, a su tiempo, le mostré a Read as-Saidabi una carta recibida de Arabia Saudí donde me escriben que, supuestamente, mis hijas viven lujosamente y como reinas, que no les falta nada. Pero eso no es así, yo sé que sobre ellas ejercen presiones psicológicas, incluso, no les permiten tener aire acondicionado. Disculpen, yo no puedo describirle con más detalles porque cada que cuento las torturas a las que las someten, empiezo a llorar. 

¿Tiene usted la posibilidad de comunicarse con sus hijas?

Sí, nosotros hablamos por teléfono, su padre todavía les permite eso. Él tiene este gesto para demostrar que hombre tan cariñoso es, incluso les permite hablar con su mamá. Incluso ha echado a rodar el rumor de que si yo me fuera con ellas, el me permitiría vivir con mis hijas y nadie me molestaría. 

Solo que la causa principal de mi salida de Arabia Saudí fue el mismo rey Abdalá y sus hermanos. Ellos, hasta el último momento me amenazaron y me sometieron a una guerra psicológica hasta que no me marché del país. Después he tratado de regresar a Arabia Saudí, pero a todas las embajadas le prohibieron prolongar mi pasaporte. La familia real pudo, incluso, prohibir a Jordania (Anud al-Faiz es nativa de Jordania) actualizar mi pasaporte jordano para que yo no tuviera la posibilidad de regresar a mi país. 

Roland Dumas escribió una carta a la ONU con la solicitud de ayudar a sus hijas. ¿Han obtenido respuesta?

No, nada. Yo responsabilizo de lo ocurrido con mis hijas tanto a la ONU como a las organizaciones internacionales que ignoran nuestra solicitud de ayuda. 

¿Usted considera que los medios de comunicación internacionales desinforman o esconden la verdad sobre las cuatro princesas que están en arresto domiciliario?

Los medios de comunicación no es que desinformen, sino que sencillamente se niegan a dar a luz nuestro problema. Cuando todo esto estaba empezando, yo viajé a Londres y contraté abogados de EEUU y el Reino Unido. Los agentes alauíes les compraron para que ellos retardaran el caso e impidieran que llegara a niveles internacionales. Más aún, durante mucho tiempo me fue imposible hallar un jurista que no saliera corriendo y quisiera defender a mis hijas. 

¿Por qué tratan tan mal a sus hijas si sus medios hermanos y hermanas viven una vida completamente diferente?

La respuesta es muy simple, el rey Abdalá se venga de mí por el divorcio. Todas sus hijas e hijos viven una vida libre y llena de lujos, excepto mis cuatro hijas. Ellas pagan este precio por mi divorcio con su padre. 

La comunidad internacional y la ONU han señalado repetidamente que la situación de las mujeres en Arabia Saudí ha empeorado muchísimo en los últimos años. ¿Podría usted comentar este hecho en relación con su problema?

Lamentablemente, la comunidad internacional se encuentra bajo el poder del dinero, lo cual siempre lleva a evaluar subjetivamente los acontecimientos. En Arabia Saudí, la mujer, como antes, ocupa un lugar muy bajo en la sociedad. El acuerdo firmado por el reino alauita y la ONU el año pasado para mejorar los derechos de las mujeres en el país, ha sido ignorado completamente por las autoridades sauditas. 

¿Qué quisiera usted decirles a los seguidores de La Voz de Rusia en todo el mundo?

Yo me dirigiré a toda la comunidad internacional, y a todo el mundo en general. Mis cuatro hijas se encuentran bajo arresto domiciliario, esto es un problema humanitario. Yo no le temo a esta palabra, pero mis hijas están destinadas a una muerte lenta y dolorosa, ya su salud está completamente minada. Ya son doce años de dolor constante, no hay un solo minuto que yo no sufra por mis hijas. Imaginen a sus hijos en la miseria y que ustedes pidan ayuda, pero que nadie les oiga…. 

ovm/kg

Nota: Las opiniones expresadas por el autor no necesariamente coinciden con los puntos de vista de la redacción deLa Voz de Rusia.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.