El significado arcano de los símbolos: Introducción (1)

Frente a estos cambios tan radicales y profundos necesitamos mapas, y las referencias que pueden servirnos de guías son, como siempre han sido, los símbolos: el lenguaje de las imágenes arquetípicas y ancestrales que constituyen un auténtico diccionario universal, más allá de las distancias culturales o de las épocas históricas, esto es, más allá del tiempo o del espacio.
Diana y Karolus

En innumerables escritos se nos dice que el hombre está a punto de entrar en una Nueva Era. El vocablo alemán “zeitgeist” describe adecuadamente este concepto, pues su traducción alude al “espíritu de los tiempos”, a una renovación de paradigmas, alteraciones tan importantes como espectaculares en la consciencia del hombre.

La historia está colmada de “zeitgeists”, momentos donde nacieron visiones diferentes de la realidad, siempre más amplias que las anteriores. En cada cambio mueren unos dioses y nacen otros nuevos. Dioses y Diosas son arquetipos de nuestra psique, que se expresan a través de símbolos, de imágenes que hablan a nuestro inconsciente.

Dichos símbolos no siempre son utilizados ni interpretados como debiera. Asimismo, todo símbolo tiene su cara luminosa y su cara oscura, su ying y su yang, y depende de nosotros su comprensión y manejo. Internet, por ejemplo, es un hervidero de malas interpretaciones y manipulaciones. También algunos sectores y determinados grupos los han usado en beneficio propio, desvirtuando su significado original.

Hoy, nuestro “zeitgeist”, nuestro salto de consciencia, radica en hallarnos a nosotros mismos, en viajar hacia adentro, en tomar consciencia y entender quienes somos. Debemos hallar el conocimiento interno que complemente tantos años enfocados en el exterior, en las formas, en los modos, en las personalidades –persona significa “máscara” en griego-.

Estamos viviendo un momento de conmoción socioeconómica a nivel mundial –exterior-, y, sincrónicamente, un momento de emerger espiritual, de búsqueda de nuevos valores –interior-. Este es el cambio que se está produciendo en la psique colectiva de la humanidad.

Toda esta reevaluación de la vida es parte de la necesidad de valores más significativos, y por ello existe el interés de retornar a antiguas ciencias cargadas de simbología –astrología, alquimia, mitología…- La ciencia empírica, que durante siglos ha mantenido la última palabra en lo referente a la realidad, se sorprende hoy a sí misma aproximándose cada vez más a lo que podríamos llamar “estudios arcanos”.

Nos dicen que las plantas reaccionan ante las emociones humanas, o que les gusta la música, y que podemos “cargar molecularmente el agua” con altas vibraciones para restablecer nuestra salud psicofísica; que el sol y la luna emiten “energías” que ciertamente nos afectan; que nuestra mente posee capacidades “telépatas” que pueden entrenarse….
Así que puede que al final concluyamos que Dios está perfectamente oculto en la materia, y que goza de buena salud…

La ciencia se encuentra actualmente en los umbrales de un universo que se parece más a un mágico cuento de hadas que a la visión estrecha y dogmática del racionalismo empirista. Vivimos, también, una reevaluación de dicha disciplina, el emerger de una nueva ciencia, y no tanto su desaparición.

Frente a estos cambios tan radicales y profundos necesitamos mapas; y las referencias que pueden servirnos de guías son, como siempre han sido, los símbolos: el lenguaje de las imágenes arquetípicas y ancestrales que constituyen un auténtico diccionario universal, más allá de las distancias culturales o de las épocas históricas; esto es, más allá del tiempo o del espacio.

La nueva ciencia de la psicología es, de hecho, la heredera de la astrología de antaño. “Psico-logía” proviene de dos palabras griegas: “Psyche” –que significa Alma-, y “Logos” –que significa Sabiduría, y el estudio del alma humana fue dominio de la astrología durante miles de años.

Aunque Psicología y Astrología usen lenguajes diferentes, su tema de investigación es el mismo: el estudio de la consciencia humana, sus cambios, su crecimiento, su despertar, su evolución.

Hablamos, naturalmente, de la Astrología Arcana, de aquella que se ha transmitido durante miles de años, y no de las predicciones de las revistas del corazón o los periódicos, que son un ejemplo más de como un mal uso de una disciplina, o símbolo, puede acabar convirtiéndolo a ojos ajenos en algo banal.

Una carta Natal, por ejemplo, no es otra cosa que un mapa simbólico de la psique humana de un individuo,como una semilla que contiene ciertos elementos o códigos para desarrollarse, crecer, convertirse en… Carl Jung y Roberto Assagioli sabían esto perfectamente y ambos elaboraron sus modelos psicológicos a partir de la antigua ciencia de la Astrología.

Un modelo psicológico es una alusión, una inferencia, una lente a través de la cual podemos ver aquello que no es articulable en palabras, porque son los misterios del corazón del ser humano, del alma humana, de la consciencia humana lo que andamos buscando.

Eso es justo lo que transmite un símbolo: una “aprehensión”, un conocimiento instantáneo de algo, captar un concepto saltándose los sentidos, un conocer por una impresión, sin pasar por el intelecto. La información contenida resuena en nosotros porque ya estaba dentro. Nos habla de algo que está el los orígenes y que, aunque no nos acordemos, vive en nuestro inconsciente personal y colectivo.

Este funcionamiento lo heredó el arte, que también a través del símbolo logra transmitir algo que se capta sin necesidad de explicación técnica o comprobación empírica.

En los mitos y en los cuentos existe una sabiduría subjetiva que se dirige a algo en nosotros que no es el intelecto, sino el Alma. El Símbolo es su expresión, porque como reza la expresión popular: “una imagen vale más que mil palabras”. Los dragones, los príncipes y las princesas, los tesoros escondidos, las maléficas brujas, los magos, las espadas célebres o las lámparas mágicas significan algo, y podemos aprender mucho sobre nuestro mapa interior cuando nos abrimos a apreciar en estas imágenes la simbología que representan… Como Alicia cayendo por la madriguera y descubriendo su País Interior…

Todos somos el héroe en busca de la amada, tal es nuestro viaje interior, al que debemos acceder para hallar nuestra integridad, nuestro “ser completo”. Por ello tales símbolos son captados de un modo tan claro e inmediatocuando los reconocemos.

La vida, nuestra vida, tiene el significado que nosotros le infundimos. Necesitamos el coraje de experimentar con instrumentos nuevos, sin prejuicios, para vivir de un modo más pleno y significativo. Y los símbolos son tales instrumentos.

Para ayudar a entender mejor el significado de los símbolos arcanos publicaremos aquí, en El Blog Alternativo, una serie de posts en los que intentaremos explicar y clarificar lo más significativo a través de una selección que hemos hecho:

Los Cuatro Elementos, El Árbol, La Serpiente, El Caduceo, El Ojo, La Luna, El Loto, El Huevo del Mundo, La Cruz, El Círculo, El Pentáculo, El Triángulo, La Pirámide, La Esvástica, La Estrella de David, El Tridente, El Obelisco, La Espiral.

Diana y Karolus.

http://www.elblogalternativo.com/2011/03/13/el-significado-arcano-de-los-simbolos-introduccion-119/

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