Una colaboración de D.Epifanio Alcañiz Rubio
Nuestra Señora de Atocha es una de las cinco basílicas que actualmente existen en Madrid, las otras cuatro son: San Francisco el Grande, Jesús de Medinaceli, San Miguel y La Milagrosa.
Se encuentra en la parcela que ocupó al antiguo convento de los dominicos con el mismo nombre y este a su vez debió ser construido en el lugar donde se situaba la antigua ermita y santuario de esta imagen.
Es un lugar muy importante sin duda en la historia de Madrid, por esta imagen han sentido especial predilección un buen número de nuestros reyes. Felipe II tenía una gran devoción por esta virgen a la que consideraba la patrona de Madrid y de todos sus reinos, solía visitar el santuario antes y después de cada batalla. Felipe IV la proclamó protectora de la Familia Real y de la Monarquía española en el año 1643. Felipe V bautizó allí a su primogénito en el año 1707. En ella se celebró la boda de Alfonso XII con su prima Mercedes de Orleans (María de las Mercedes).
Existe una tradición en la Familia Real de que sus príncipes e infantes sean presentados a la virgen unos 40 días después de su nacimiento. Alfonso XIII tenía 45 días cuando pasó por allí por vez primera. Los tres hijos de nuestro actual monarca también le fueron presentados a la virgen, al igual que las infantas Leonor y Sofía, además el príncipe Felipe y doña Leticia se desplazaron el día de su boda desde la catedral de la Almudena hasta la Basílica para depositar el ramo de novia ante la Virgen de Atocha.
La imagen de la virgen es una pequeña talla que no alcanza los 60 cm., labrada en una madera dura, sin policromar, de estilo tardorrománico, posiblemente tallada entre los siglos XIII-XIV, su rostro es moreno, casi negro y aparece sentada en un trono con el niño sobre su rodilla izquierda y una manzana en su mano derecha, ambos miran al frente.
La historia de este enclave a primera vista no parece encerrar demasiados enigmas, aunque siempre existen datos en los que conviene recrearse para analizar con detenimiento. Si nos remontamos a los primeras referencias que aparecen sobre la Virgen de Atocha hemos de citar la carta que se conserva en la Catedral de Toledo en la cual San Idelfonso, indicaba a un canónigo de Zaragoza que al pasar por Madrid “se acordara de que en su vega, había una devota imagen de Nuestra Señora con un Niño en el brazo izquierdo y una manzana en la mano derecha, llamada la Virgen de Atocha” de la cual el santo dice recibió muchos consuelos. Esta referencia data del siglo VII y se cree que la imagen de la virgen en principio estuvo en la vega del Manzanares, en la ermita de San Felipe y Santiago, conocida popularmente como la ermita de Santiago el Verde ubicada al parecer en el Sotillo, una de las islas que formaba el río Manzanares entre el puente de los Franceses y Villaverde. De esta ermita hay diversas referencias, Lope de Vega popularizó la romería que en ella se celebraba el día 1 de Mayo en las alamedas y sotos del río Manzanares, Zorrilla y Calderón también escribieron sobre ella y la frase “bajar al sotillo” era muy utilizada por los madrileños en el siglo XVI. Se menciona que esta celebración cayó en el olvido posiblemente debido al fallecimiento de Felipe IV, casualmente el día 1 de Mayo, por lo que se decide, debido al luto real, trasladar la fiesta al día 15 de Mayo, coincidiendo con la festividad de San Isidro, el derrumbe de la ermita a mediados del siglo XVII sin que nadie se ocupe de su reconstrucción, propicia que ermita y romería caigan en el olvido.
Las referencias que tenemos no son demasiado concretas, pero la isla de El Sotillo, se situaba en un lugar cercano a la Dehesa de la Arganzuela, conocemos que esta dehesa eran unos pastizales utilizados por el ganado desde el Puente de Toledo hasta pasada la Plaza de Legazpi. En el siglo XVII estos terrenos pertenecían al municipio de Villaverde por lo que la ermita de Santiago el Verde, no se encontraría en terrenos pertenecientes a la Villa de Madrid, sino a Villaverde, sin embargo su romería era popular también entre los vecinos de Madrid.
Hay algunos investigadores que sitúan el lugar donde estuvo levantada esta ermita en el antiguo camino de Villaverde a Vallecas, es posible que así lo piensen porque en ese lugar se encontraba el vado de Santiago el Verde y relacionen ambos lugares, este lugar se encontraba en lo que actualmente es el Nudo Sur de la M-30. Frente al edificio del tanatorio sur, durante las obras de la citada M-30 (carretera de circunvalación de Madrid) aparecieron en este lugar unas ruinas romanas que por desgracia no debieron considerar de interés ya que desaparecieron con las obras de la carretera, es posible que esto haga pensar a estos investigadores que como en tantos otros casos, ruinas romanas y templo cristiano ocupasen un mismo lugar, sin embargo en este caso no es así, he chequeado toda la ribera sur del Manzanares, en fotos aéreas y personándome en la zona, desde Legazpi hasta pasado Villaverde Bajo, incluyendo también los cerros o atalayas naturales del otro lado del río, junto a Mercamadrid, lugar donde también algunos pretenden situar esta ermita, también el lugar donde encontraron las ruinas romanas, que en este caso carecen de interés telúrico. Tan solo he encontrado dos vórtices en toda la zona prospectada siguiendo el cauce del río, ambos están cercanos entre sí, les separa una distancia aproximada a los 300 metros, uno es de 24500 UB y otro de 13500 UB. Yo no tengo ninguna duda de que la ermita de Santiago el verde fue construida al igual que las demás sobre un vórtice, imagino que ambos fueron descubiertos y que el elegido fue el de 24500 UB, más si tenemos en cuenta que se trata de una virgen morena y que estas, relacionadas en demasiadas ocasiones con los caballeros templarios solían ser situadas en templos energéticamente especiales. Estos dos vórtices se encuentran actualmente en el distrito de San Fermín en un parque creado para albergar la Caja Mágica, un estadio multiusos construido para el proyecto olímpico de Madrid 2016. Ambos vórtices se localizan en este parque, cercanos al río y perfectamente pudo haber una isla en ese lugar ya que es un terreno llano y pudo haber dos brazos de río que rodeasen una porción de terreno, en la actualidad todas las islas que formaba el río han desaparecido.
Hay vórtices por los que siento una especial predilección, este de 24500 UB, es uno de ellos, por el momento no señalaré el lugar exacto de su ubicación, aunque invito al que se sienta con ganas a buscarlo, la porción de terreno a prospectar ahora es mucho más pequeña que cuando yo inicié la búsqueda, no lo hago publico en este momento porque pienso que quizás algún día habrá algún edil concienciado con estos temas que decida invertir un poco de dinero en habilitar y potenciar este vórtice para disfrute de todos los que quisieran visitarlo para recargarse en el lugar, si alguna vez esto sucede estaré encantado de mostrar este lugar que al estar situado en un parque público, considero idóneo para lo que propongo, estoy convencido de que se convertiría en un punto de referencia para la ciudad.
Volvamos al principio de la historia, a ese punto donde los datos no coinciden y el baile de fechas es evidente. Hay una parte de la historia que nos narra que esta ermita se construyó tras la dominación árabe, cuenta la leyenda de manos de Álvarez de Baena que allá por los años 720 de nuestra era, se llevó a cabo una hazaña guerrera por el caballero madrileño don Gracián Ramírez que era devoto de la talla de la virgen, la imagen desapareció de su santuario y tras una intensa búsqueda la encontraron escondida en un atochar, entre la hierba tocha o esparto, entonces con ayuda de otros vecinos decidieron construir la nueva ermita en el lugar donde encontraron la imagen, los moros al observar las obras pensaron que estaban construyendo una fortificación y les atacaron, viendo la inferioridad en que se encontraban y temiendo perder la batalla, para evitar que su esposa e hijas fueran ultrajadas y ante los ruegos de las mismas decidió decapitarlas y llevar sus cuerpos ante la virgen, sin embargo lo que no parecía probable sucedió, vencieron a los moros y estos huyeron, al volver ante la virgen para darle gracias se encontró a su mujer e hijas vivas, como consecuencia de un milagro de la Virgen de Atocha. Esta es la leyenda ha sido recordada por Lope de Vega, Rojas, Zorrilla y Hartzembusch.
La siguiente mención data del siglo XI, tras la conquista de Madrid por el rey Alfonso VI de Castilla, en el fuero de Madrid se afirma que con las posesiones que tenía se podía atender el sustento de varios capellanes encargados del culto en el prado de Tocha. Durante la permanencia de los árabes en Madrid fue estipulado en las condiciones de la capitulación que serian respetados el culto a la Virgen de Atocha y la parroquia de la Santa Cruz, lo cual nos da una muestra de la importancia de este pequeño santuario.
Nos encontramos ante dos historias diferentes que parecen entremezclarse en ocasiones y que nos dan pie a pensar que pudo haber dos imágenes de la Virgen de Atocha, con dos lugares de culto diferenciados, o que la historia se nos pierde en algún lugar y nos confunde, por un lado san Idelfonso en el siglo VII la sitúa en una ermita de la vega de Madrid, hay referencias suficientes para pensar que la ermita de Santiago el Verde existió y que desapareció en el siglo XVII y puede que en esa ermita se encontrase la talla de una virgen que al parecer llamaban la Virgen de Atocha. Por otro lado nos encontramos con la ermita santuario de Nuestra Señora de Atocha, situada a extramuros de la ciudad en el camino de Vallecas, de esta virgen y su santuario ya tenemos noticias en el siglo XI, cuando Alfonso VI entra en Madrid. Aunque la referencia no es clara, es posible que la desaparición de la imagen en el siglo VIII que nos narra la leyenda de don Gracián Ramírez fuese de la ermita de Santiago el Verde y apareciese en el atochar, lugar situado en el camino a Vallecas y ese fuese el nuevo emplazamiento de la ermita que custodiaría la imagen de la Virgen de Atocha, lo cierto es que en las narraciones sobre la romería de Santiago el Verde no se vuelve a mencionar la talla relacionada con esta ermita, aunque hay que señalar que San Idelfonso al citar la ermita de la vega de Madrid, ya menciona a la imagen con el nombre de Virgen de Atocha y está claro que el terreno donde actualmente se encuentra la basílica no ha sido nunca una vega, por lo tanto algo erróneo o al menos confuso hay en la historia.
Por otro lado tenemos la talla que actualmente se venera en la Basílica, es una imagen de los siglos XIII-XIV, con lo cual no es la talla original a la que se refería San Idelfonso, del momento en que la primitiva imagen se pierde no hay constancia.
Solo he querido reflejar estos datos para que la historia pueda ser recreada con la mayor precisión posible, pero si alguien cree que aquí acaba el artículo está en un error.
Olvidemos la ermita de Santiago el Verde y la imagen que allí se custodiaba y volvamos a los terrenos que ocupa la actual Basílica de Nuestra Señora de Atocha. En el plano de Texeira del año 1656, el convento aparece perfectamente identificado, con su iglesia que no ocupaba el lugar donde ahora se encuentra la actual basílica y todos los terrenos colindantes, el camino de Vallecas es la actual Avenida Ciudad de Barcelona, el convento ha desaparecido así como la antigua iglesia, que se situaba en la zona donde ahora se encuentra el colegio que desde 1963 acoge a unos 2000 alumnos.
La pequeña ermita de la que hay constancia en el siglo XI, al parecer se trataba de una capilla de 15 pies de larga por doce de ancha, en el siglo XVI, se convierte en una iglesia y se construye el convento de los religiosos de Santo Domingo, tomando posesión de la misma el día 2 de Junio de 1523.
El 8 de diciembre de 1808, las tropas francesas expulsan a los religiosos y convierten estas dependencias en cuartel, los religiosos fueron acogidos en el convento de Santo Tomás, de la calle Atocha hasta el año 1834. Pese a los destrozos ocasionados en la iglesia y demás edificaciones la reina Isabel II se preocupó de restablecer el culto en el convento, la virgen permanecía en una pequeña capilla provisional. En noviembre de 1863, a petición de la reina Isabel II, el papa Pío IX concede al santuario de Atocha la dignidad de Basílica. Más adelante y debido al deterioro de las instalaciones con peligro de derrumbamiento y con la idea de construir un nuevo templo, la reina regente María Cristina (viuda de Alfonso XII) ordenó el derribo de las edificaciones, la imagen de la virgen es trasladada provisionalmente a la iglesia parroquial del Buen Suceso.
La reina decidió que la nueva basílica contase con un panteón que diera acogida a los restos de personajes ilustres, convocado un concurso público, en 1890 se eligió ganador el proyecto “Nigra sum sed Formosa” (soy negra, pero hermosa) presentado por el arquitecto Fernando Arbós y Tremandi. El conjunto de estilo neo-bizantino, incluía un panteón, que tenía carácter de claustro de la basílica, inspirado en el camposanto del Campo dei Miracoli en la ciudad italiana de Pisa, también contaba con una torre de campanario exenta del edificio principal, al estilo de algunos templos italianos, esta torre contaba con un reloj de cuatro esferas y tres campanas. El proyecto en sí, era muy ambicioso ya que se pretendía utilizar la nueva basílica en las ceremonias reales.
En 1891 se da comienzo al proyecto, del que tan solo se construirían el campanil y el panteón, este fue construido entre 1892 y 1899 y se dieron entonces por concluidas las obras por el elevado coste de las mismas y por el inicio de la construcción de la cripta en la catedral de la Almudena. En 1901 se trasladan a este panteón los restos de José de Palafox, Francisco Castaños, Manuel Gutiérrez de la Concha, Juan Prim y el político Antonio de los Ríos Rosas, en años posteriores acogió los restos de diversos políticos, pero poco a poco fueron reclamados por sus ciudades de origen y en la actualidad tan solo acoge los restos del político José Canalejas.
En el año 1924, los dominicos solicitan al rey Alfonso XII que les concediese facilidades para construir la basílica y el convento de Nuestra Señora de Atocha. Realizadas las obras con rapidez en noviembre de 1926 se traslada de nuevo la imagen de la virgen a la nueva iglesia donde fue recibida por Alfonso XIII y su madre, la reina María Cristina. El 20 de Julio de 1936 en la guerra civil, convento e iglesia son asaltados e incendiados y los religiosos martirizados, la imagen de la virgen se salva porque unos días antes se dio en custodia a una familia cercana a la comunidad. En 1939 entre las ruinas se habilita el salón del sótano como capilla para albergar la imagen de la virgen.
La actual basílica fue inaugurada en la Navidad de 1951.
Analicemos ahora la energía del lugar, los vórtices que hicieron que misteriosamente la imagen de la virgen apareciese en ese atochar como indicación de que quería permanecer en ese lugar, una historia tantas veces repetida a lo largo de la historia, este hecho fue en muchas ocasiones la justificación para construir un templo en un lugar determinado que siempre contaba con un vórtice.
Hay algo extraño que aún no he llegado a comprender, el antiguo templo, me refiero a la iglesia del siglo XVI ya aparece así dibujado en el plano de Texeira y también así se aprecia en antiguas fotografías, la iglesia, después basílica, ocupaba el lugar donde ahora se encuentra el colegio Virgen de Atocha, salvo que yo esté equivocado en la apreciación y la actual Avda. Ciudad de Barcelona no coincida con el antiguo camino a Vallecas, entre las aulas del colegio se pierde el vórtice de 13500 UB sobre el cual se levantaba el templo, en el plano de Texeira, está perfectamente señalado un humilladero que había antes de llegar a la iglesia, he localizado sin ningún problema el Punto de Meditación de 11500 UB que motivó la construcción de este humilladero, hoy se pierde en el parque triangular que hay por delante del colegio, lo energéticamente más curioso es que la actual basílica, la que fue inaugurada en el año 1951 alberga un vórtice de 24500 UB y no está perdido, es decir no está allí por casualidad, aunque estoy seguro de que los actuales monjes no tienen idea de la importancia del mismo ya que se encuentra delante del altar de una capilla al fondo de la nave lateral de la izquierda, donde he visto a veces la imagen de una virgen y en otras el Belén que suelen montar en Navidad.
Esto no tiene demasiado sentido, lo normal es que la antigua ermita santuario ocupase este lugar, podemos imaginar que en el siglo XVI al construir la iglesia y el convento cambiasen la ubicación del templo y en realidad el pequeño santuario inicial se levantase sobre el vórtice de 24500 UB, pero no lo veo claro, ni tampoco encuentro una explicación razonable, existe otro vórtice de 13500 UB que se encuentra en el claustro del Panteón de Hombres Ilustres, como fue construido al finalizar el siglo XIX lo normal es que no supieran de su existencia, pero está perfectamente ubicado, el Mausoleo conjunto se levanta sobre el vórtice ¿casualidad?.
Pero aún hay otro tema más preocupante, el General Prim murió el 30 de diciembre de 1870, a causa de un atentado que sufrió tres días antes o tal vez le estrangularon en su convalecencia como apuntan algunas hipótesis surgidas tras unos exámenes realizados a su cuerpo momificado, hay indicios que señalan a Juan Prim como un gran maestre de la masonería, quien haya leído otros artículos míos quizás conozca mi teoría de que la momificación puede ser inducida porque una alta concentración energética inhibe el desarrollo de la bacteria responsable de la putrefacción, siempre que se mantengan unas circunstancias que protejan de un ambiente húmedo e impidan el paso de los insectos, estas circunstancias se dan si un féretro cerrado con un cadáver en su interior es depositado durante unos meses sobre un vórtice de 24500 UB ya que el anillo energético que forma a su alrededor puede albergar sin problemas el cuerpo de una persona, el cadáver del General Prim se llevó hasta la Basílica de Nuestra Señora de Atocha, allí fue su velatorio y fue enterrado en el Panteón de Hombres Ilustres, pero 30 años después de su muerte, me faltaba ese dato, mi pregunta es la siguiente: ¿donde reposó el cuerpo de Juan Prim esos 30 años o al menos los meses posteriores a su muerte? alguien de su entorno, conocía perfectamente que su cuerpo quedaría momificado, la prueba de ello es que al analizar su cuerpo momificado descubrieron que sus orbitas oculares eran de cristal, es decir alguien se molestó en quitar los ojos a su cadáver ya que estos se secan en un proceso de momificación y le puso unos de cristal, alguien que sin duda sabía o al menos esperaba que su cuerpo quedase deshidratado ¿extraño, no? ¿permaneció el cuerpo del General Prim sobre este vórtice los meses posteriores a su muerte? y por último, la fuente del Ángel Caído que se encuentra en el parque de El Retiro fue inaugurada en el año 1885 y “casualmente” se construyó sobre un vórtice de 19500 UB, el que ocupaba una de las siete ermitas perdidas de El Retiro, concretamente la de San Antonio de los Portugueses, la similitud de las fechas me lleva a pensar que alguien de aquella época, relacionado sin duda con el entorno del General Prim, detectaba estos vórtices conocía su secreto y los utilizó de la manera que consideró más oportuna.
Tal vez ahora quien visite a la Virgen de Atocha, que por cierto fue silencioso testigo de mi boda, después de leer este artículo tenga un poco más clara su ajetreada historia y puede que un día no lejano algún responsable de la basílica decida colocar la imagen de la virgen en el lugar idóneo para ella, el lugar de donde nunca debió ser movida, en el centro del vórtice levógiro de 24500 UB que existe en la capilla que cierra el lateral izquierdo de su nave.
Epifanio Alcañiz
Investigador de las energías telúricas
http://www.radiestesiaysalud.com/la_virgen_de_atocha.htm