En una aparente respuesta a los días de protestas, las autoridades chinas han declarado la ley marcial en algunas partes de la región interior del noreste de la Mongolia autónoma, según Amnistía Internacional.
La región ha sido escenario de tensiones étnicas entre los mongoles, que han vivido en la zona durante siglos, y el pueblo Han, al que llegaron en mayor número después de la fundación de la República Popular de China en 1949.
En el informe publicado este viernes, Amnistía Internacional mandó una protesta detallada en los alrededores de la ciudad de Xilinhot, como se le conoce en Mongolia, o Gol Xilin como se le conoce en mandarín.
CNN se puso en contacto con los funcionarios de las áreas afectadas, pero no quisieron hacer comentarios.
De acuerdo con la organización de derechos humanos, 2,000 estudiantes mongoles salieron a las calles este miércoles en Xilinhot, en una muestra de solidaridad con un pastor de Mongolia que fue asesinado a principios de este mes, cuando fue atropellado por un camión de carbón que era conducido por ciudadanos étnicos de Han.
Amnistía informó que los conductores de los camiones de carbón están en custodia de las autoridades chinas.
Según Amnistía, las protestas, que comenzaron el lunes pasado, han sido en gran medida pacíficas, pero por lo menos 18 personas resultaron heridas en enfrentamientos con la policía al noreste de Xilinhot.
«Las protestas son un llamado de atención para las autoridades. Al igual que en otras zonas de minorías étnicas, las autoridades deben empezar a prestar atención al mensaje en lugar de atacar a los mensajeros», dijo Catherine Baber, de Amnistía Internacional.
En los medios de comunicación y las redes sociales de China, el hablar de las protestas es algo limitado.
En el popular sitio de microblogs Weibo Sina, los términos de búsqueda «ley marcial», «Wu Qi Xi» y «Mergen» fueron bloqueados.