Unos 25 millones de litros del herbicida Round Up, producido por Monsanto, se utilizó en Paraguay para sostener los cultivos de semillas transgénicas del país,
Es “un volumen que contamina agua, aire, tierra y personas”, analizó E’a, el 30 de enero.
“Si multiplicamos la cantidad de hectáreas de soja cultivada para la zafra 2013-2014 calculada por la Cámara Paraguaya de Exportaciones y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (CAPECO) y los demás gremios de las soja, por la cantidad de litros de glifosato (8) que se usa para cada hectárea de cultivo, tenemos que en los sojales se derramaron 25.600.000 litros de agrotóxicos”, informó E’a. (Estadística de CAPECO)
“La semilla de soja del tipo RR, producida por la transnacional Monsanto, puede ser tratada solamente con el glifosato, que también es producida por esta transnacional”, agregó.
Un documento fechado en 2010 del Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas SENAVE indica que por cada hectárea de cultivo se necesitan al menos ocho litros de Round Up, un potente herbicida a base Glisofato. Hoy los cultivos de transgénicos del país suman 3.200.000 hectáreas, las cuales en su mayoría son de soya.
El ministro de Agricultura Jorge Gattini, dijo este jueves al impreso Popular, que la contaminación que se denuncia no existe y que la oposición es más bien una “cuestión ideológica”. El Ministro se refirió con esto a recientes protestas de campesinos por el uso de agrotóxicos. El comisario Odilio González, de Canindeyu, fue criticado por comandar una represión que dejó a una persona sin un ojo, informó E’a.
Por su parte el titular del SENAVE, Jaime Ayala (PLRA), dijo en marzo de 2013 que se insistirá en el control de las pulverizaciones con agrotóxicos, buscando que los productores respeten los procedimientos establecidos a fin de que no se perjudique la salud de la población circundante y los cultivos de los pequeños productores, informó Voto Informativo.
Campesinos de Itapua habían denunciado fumigaciones a los arrozales, maíz y mandioca de la comunidad.
Evidencias de la toxicidad del Round up
Anthony Samsel, científico consultor independiente, y Stephanie Seneff del Laboratorio de Inteligencia y Ciencias de la Computación de MIT, publicaron el 18 de abril de 2013 un estudio sobre los efectos del Glifosato.
“El glifosato, es el ingrediente activo de Roundup ®, el herbicida más popular que se usa en todo el mundo. La industria (Monsanto) afirma que es mínimamente tóxico para los humanos, pero aquí (el estudio) nosotros sostenemos lo contrario”, indica el estudio.
Según el informe, el glifosato inhibe las enzimas citocromo P450 (CYP), las cuales “juegan un papel crucial en la biología, al desintoxicar xenobióticos”. De esta manera, se transforma en un componente altamente tóxico para los mamíferos.
Otro estudio que registra datos de numerosos científicos a lo largo de 15 años de investigación, fue publicado en Argentina en 2013.
“Los cambios en los modelos de producción son un determinante muy importante por la carga de químicos que incorporan al ambiente, por la exposición a éstos a lo largo de los últimos 15 años”, expuso a La Gran Época el Dr. Damián Verzeñassi, docente e investigador de la Facultad de Ciencias Médicas de Rosario, médico a cargo de una investigación que detectó un aumento de cáncer, pérdidas de embarazos y malformaciones congénitas, además de enfermedades neurológicas, hipotiroidismo, asma y alergias.
“Lo que vemos a partir del trabajo es que entre el 95 y el 65 o 67 por ciento de las comunidades que hemos estado evaluando viven en un radio menor a 1.000 metros del área donde se fumiga con agro-tóxicos para la producción de soja transgénica”, dijo Verzeñassi.
Abortos y enfermedades en campesinos
El uso de poderosos químicos ha sido históricamente denunciado en Paraguay.
En los asentamientos San Juan, de Puente Kyha, Huber Duré, y Crescencio González, de General Resquín, ubicados en los departamentos de Canindeyú y San Pedro, y otros lugares vecinos a cultivos transgénicos, se denunciaron aumento de abortos, dijo el secretario general adjunto de la Federación Nacional Campesina paraguaya, que reúne unos 30 mil campesinos, Marcial Gómez, a Agencia de Noticias el 31 de octubre 2012.
En estos lugares, muchos de los pobladores de los asentamientos presentan dolores de cabeza, mareos y alergias.
En Huber Duré, Gómez además reportó la muerte de animales de granja, entre ellos gallinas y patos, propiedad de familias campesinas “y la semana pasada, después de una fumigación aérea, se sintieron afectadas más de 150 personas que debieron recibir asistencia médica”, agregó el gremialista.
Condena a Monsanto
Monsanto ya tiene al menos una condena por el uso de pesticidas en Francia. La gran industria norteamericana de la alimentación transgénica, semillas e insecticidas, fue condenada por la inhalación sufrida por el agricultor Paul François en 2004, de enormes cantidades de Lasso, un pesticida comercializado en Canadá, Gran Bretaña y Bélgica, y que en el mercado francés solo duró hasta 2007.
Invalidación de reglamentación en Paraguay
Una invalidación de la normativa para el uso de agrotóxicos pudo haber contribuido en el pasado a aumentar los riesgos de salud para la población paraguaya, que se encuentra en zonas vecinas a los cultivos de transgénicos
Jaime Ayala, titular del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Vegetal y de Semillas (SENAVE) en 2012, dejó sin validez la norma nacional número 1.160, del 26 de diciembre de 2011 que establecía la necesidad de que el fumigador avise al vecindario sobre sus pulverizaciones, sus horarios y los productos a utilizar, y con más rigor aún reglaba las fumigaciones aérea a gran escala en las grandes plantaciones de monocultivo, principalmente de la soja,informó E’a.
Basándose que el documento no contaba con dictámenes técnicos ni jurídicos de las instancias gubernamentales requeridas, Ayala invalidó el reglamento que protegía los derechos humanos y ambientales de las comunidades campesinas e indígenas del país.
E’a denunció que Ayala estaba ligado a los intereses de las empresas que producen productos químicos para la agricultura, “Fue presidente de la empresa de agroquímicos Pacific Agrosciences antes de asumir su cargo en el SENAVE”, indicó.
El ingeniero Ayala, en 2013 propuso además cambiar la Ley 3742/09 “de control de productos fitosanitarios de uso agrícola”, alegando que es incumplible en lo que respecta a las franjas de protección y barreras vivas, destacó Voto Informado.
“Esa cuestión de las barreras de protección y las franjas de seguridad […] es un invento paraguayo, en otros países no existe”. A modo de ejemplo, indicó que “yendo a Brasil, cruzando la frontera, se observa en un pueblo como San Miguel de Yguazú, donde los cultivos están ahí hasta el camino y la gente está ahí tomando tereré, pero en Paraguay somos muy estrictos y ponemos exigencias exageradas”, dijo Ayala, según el medio informativo.
http://www.lagranepoca.com/30844-fumigaron-25-millones-litros-glifosato-monsanto-paraguay