Su muerte sigue rodeada de un halo de misterio y los detalles sobre cómo se produjo y las evidencias que la prueban, probablemente nunca lleguen a salir a la luz. Casi tres años después del fallecimiento del terroristamás buscado del mundo, Osama bin Laden, sigue habiendo miles de preguntas sin responder, aunque afortunadamente de vez en cuando el Gobierno de Estados Unidosrevela algún detalle desconocido.
En esta ocasión se trata de un correo electrónico que explica perfectamente por qué apenas vimos imágenes de la muerte del líder de Al Qaeda e ideólogo de los atentados del 11 de septiembre de 2001 sobre las Torres Gemelas en Nueva York. También explica por qué no las veremos tampoco en el futuro.
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La muerte de Bin Laden se anunció públicamente el 2 de mayo de 2011 tras un largo operativo en el que las fuerzas especiales de Estados Unidos terminaron abatiendo al terrorista en Abbottabad (Pakistán). Una muerte muy criticada por algunas organizaciones internacionales que clamaron porque se decidió acabar con su vida en lugar de capturarle.
11 días después William McRaven, líder del Comando de Operaciones Especiales de EE.UU., envió un misterioso email dirigido a sus subordinados que empezaba con un escueto “Señores” y en el que les pedía que si no habían entregado las fotos de Bin Laden a la CIA, tenían que destruirlas inmediatamente.
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Nueva York celebra la muerte de Bin Laden (Getty)
“Una cosa que quiero destacar son las fotos; particularmente las de los restos de UBL (se refiere a Bin Laden). En este punto, todas las fotos deberían haber sido entregadas a la CIA, si todavía las tienes destrúyelas inmediatamente”, rezaba el correo que se ha hecho público gracias a la insistencia del grupo conservador Judicial Watch, que amparándose en la libertad de información, pidió la difusión pública de este email.
Precisamente el día 3 de mayo la agencia AP pidió “copias de todos los correos enviados desde y para las cuentas del Gobierno de Estados Unidos” en los que McRaven hiciera referencia a Bin Laden.
Por lo general, cuando hay una petición de libertad de información a una agencia gubernamental, estas suelen preservar el material, incluso si luego rechazan la petición. Pero en esta ocasión no fue así. 10 días después McRaven mandó el email y todas las fotos de la muerte del terrorista más buscado desaparecieron de un plumazo de la faz de la Tierra.