Kiev,30 mar (PL).- La más reciente agresión de las denominadas autodefensas de Maidán contra manifestantes pacíficos antigolpistas en Ucrania coincidió hoy con críticas de la Unión Europea (UE) a los comandos neonazis en esa república exsoviética.
Armados con bates de béisbol, vigas de acero y otros objetos contundentes, los integrantes del comando extremista emboscaron a una columna de 15 autos que con banderas rusas, ucranianas y de varias regiones del país protestaban contra quienes derrocaron al presidente Víktor Yanukóvich.
Cuando la caravana integrada en su mayoría por mujeres y adultos mayores estaba a punto de entrar a la ciudad de Zaporozhie, en el sureste ucraniano, fue violentamente interceptada, mientras la Policía permaneció impasible, según la televisora RT.
En tanto, Catherine Ashton, jefa de Política Exterior y Seguridad de la UE, denunció hoy a las fuerzas neonazis de Sector Derecho por lo que denominó “su presión y su actitud que contradice los principios democráticos”.
La otrora defensora de la tropa de choque que derrocó a Yanukóvich con un costo de más de 80 muertos, dijo que ahora condena firmemente la presión de los activistas que rodearon el edificio de la Suprema Rada (Parlamento unicameral).
Tal intimidación al Parlamento contradice los principios democráticos y la prioridad de la ley, sostuvo en contraste con las advertencias a Yanukóvich durante sus reiteradas visitas a Kiev de que no reprimiera a quienes lo defenestraron tras semanas de asedio con acciones violentas.
Diversos medios periodísticos han destacado una conversación telefónica filtrada en internet entre el canciller de Estonia, Urmas Paet, y Ashton, que confirma la contratación de francotiradores por la oposición durante las protestas contra Yanukóvich.
Reconocida como auténtica por Paet, la plática corroboró que los sicarios actuaron pagados por la oposición y los grupos neofascistas que lideraron las manifestaciones antigubernamentales en el centro de Kiev desde noviembre de 2013, con la Plaza de la Independencia (Maidán) como epicentro.
Alexánder Yakimenko exjefe del Servicio de Seguridad de Ucrania, denunció al excomandante de la tropa de choque de Maidán, Andrei Parubi, como responsable de la masacre perpetrada por francotiradores en Kiev con el respaldo de países occidentales.
Los disparos de francotiradores se produjeron desde el edificio de la filarmónica. El comandante de Maidán, Andrei Parubi, controlaba el inmueble. Desde ese edificio disparaban los francotiradores el día 20 de febrero, aseguró Yakimenko.
Recordó Yakimenko que todos los disparos partieron de la sede musical, y cuando concluyó la primera andana de fuego muchos vieron a unos 20 individuos vestidos con algún tipo de uniforme salir del edificio. Llevaban bolsas para transportar armas, dijo.
Sobre el particular, Ashton prometió una investigación para llevar ante los tribunales a los culpables, pero hasta el momento esas pesquisas fueron solapadas en su agenda pública.