Las protestas contra la situación política y económica en España tienen un nuevo rostro: el de los jubilados.
Un día después de que el movimiento de los indignados levantara su campamento en la Puerta de Sol de Madrid, la capital, para continuar con sus exigencias a través de otros medios, más de unos 100 jubilados acudieron al mismo lugar para manifestarse contra las reformas del actual gobierno.
En la protesta, convocada por la Confederación Sindical de Comisiones Obreras (CCOO), los jubilados marcharon hasta el Ministerio de Economía y Hacienda para expresarse contra los cambios que congelaron las pensiones y retrasaron la edad de jubilación hasta los 67 años, reportó el sitio del diario español Público.
“Es un problema que afecta a todos”, dijo Saturnino López, jubilado, al llamar a todos los españoles a unirse a sus demandas.
Desde hace algunos, los jubilados y las viudas exigen al gobierno un ajuste a las pensiones, que consideran insuficientes para vivir fuera de la precariedad.
Un reporte reciente del Consejo Económico y Social (CES), citado por el diario Xornal de Galicia, señala que los jóvenes y los pensionistas son los sectores más afectados por la crisis económica en el país. Mientras los jóvenes encaran una tasa de desempleo del 20%, los pensionistas carecen de los recursos para subsistir.
En promedio, un español pensionado recibe 799.80 euros al mes (equivalente a unos 13,600 pesos mexicanos), pero el sector argumenta que esa cantidad no le basta para cubrir sus necesidades. Únicamente el alquiler de un departamento, por ejemplo, ronda los 700 euros mensuales (11,900 pesos mexicanos).
La situación empeora para los jubilados que habitan en localidades como Galicia, donde la pensión es menor a la media, de 669.66 euros, de acuerdo con el diario Xornal.
“Reivindicamos también el bienestar social de las personas mayores”, dijo un jubilado al sitio Intereconomía. “Estamos hartos, y nos hemos levantado y nos vamos a levantar”.
Los jubilados afirman que la de este lunes es una de las primeras protestas que realizarán contra los recortes al gasto social en España (de 47 millones de habitantes), según los reportes de medios locales.
El movimiento de este sector se produce después de que los indignados captaran la atención dentro y fuera de la nación, por sus manifestaciones en contra de la crisis económica y de la falta de representación política.
Los “indignados” —un grupo conformado principalmente por jóvenes, pero también por adultos e inmigrantes— exigen reformas que otorguen a la sociedad mayor presencia en las decisiones públicas, así como medidas para fomentar la generación de empleos.
También son conocidos como Movimiento 15 de Mayo (15-M) porque ese día comenzaron sus manifestaciones.