Free Content El poder mágico de las 4 fases lunares, su influencia continúa siendo un misterio

Aunque se ha comprobado que su energía rige a las mareas o afecta la presión atmosférica, para muchos, su influencia en los seres humanos continúa siendo un misterio. Aquí te presentamos, etapa por etapa, el por qué de su simbología esotérica. La influencia de la luna sobre las mareas, la presión atmosférica, e incluso en las fluctuaciones de intensidad en el campo magnético de la Tierra, son un hecho, aún cuando para muchos su poder aún resulta un misterio.

De su estudio, también se ha comprobado que afecta la conducta de organismos vivientes, producto de las alteraciones metabólicas que se han detectado en ellos. Es ahí precisamente donde radica el poder que la tiene como milenario objeto de estudio de sicólogos, astrónomos y astrólogos.

Pero su energía no es uniforme. Durante el ciclo lunar y todas sus fases, la luna genera impulsos, irradia una fuerza tal magnitud, que influye en nuestras formas de actuar y condiciona el contexto para que ciertas cosas ocurran de mejor o peor forma.

En el área del esoterismo se le atribuyen diversos beneficios a la energía de sus fases, que simbolizan la iluminación, la inmortalidad, la eternidad y la renovación perpetua.

Identifiquemos el poder de cada una de ellas:

1.- Luna Llena: Significa la totalidad, la plenitud, la fuerza y poder espiritual. Se le considera símbolo de buen augurio y fertilidad, y por eso se recomienda para la concepción de bebés, conseguir pareja y hasta casarse. Se dice que también ayudaría en la solución de problemas legales, solicitudes de préstamos y juegos de azar.

2.-Luna Nueva: Representa el descenso del Dios al mundo subterráneo. Dice su simbología que es un momento ideal para iniciar proyectos o realizar algo que se ha venido postergando. Se le asocia a un ciclo de buenas energías y el momento ideal para dejar vicios o conductas dañinas. Sicológicamente estamos más serenos, lo que nos ayuda a superar cualquier inconveniente o carencia. Durante su temporada se recomienda pedir buenos deseos para nuestro cuerpo y nuestra alma.

3.- Cuarto Creciente: Simboliza la continuación del viaje de Dios al mundo subterráneo y consta de dos etapas. La primera ocurre luego de tres días y medio de haberse iniciado la Luna Nueva y se augura como buen momento para emprender proyectos y hacer negocios. Si hay una luna delgada, es señal de buen momento para iniciar una relación. Es una época de gran actividad, de nacimiento, de crecimiento (de ahí la creencia de que sería ideal para cortarse el pelo). También se dice que ayuda a comenzar entrenamientos físicos, deportivos y laborales; estrenar una nueva casa o un nuevo auto. En el segundo periodo es tiempo del desarrollo, de ocuparse de cosas que se comenzaron, antes de iniciar otras nuevas. En este tiempo todo crece, se incrementa, evoluciona, se desarrolla.

4.- Luna Menguante: Es la fase final del ciclo y también tiene dos etapas. Se considera ideal para vencer vicios y adicciones; para despejarse de los momentos depresivos y melancólicos, y para la recuperación de enfermos terminales. En su primer período nos invita a disfrutar de la vida y dar a conocer a todos los éxitos obtenidos. Se percibe el apoyo y la aprobación incondicional de amigos y familia. Se dice que es ideal para hacer la conocida dieta líquida de La Luna y hacer retiros espirituales. Su segundo ciclo provocaría que los proyectos -especialmente aventuras amorosas- peligren y es por ello que se recomienda prudencia y reposo.

Fuente: Publimetro

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.