El Gobierno estadounidense condicionó el desembolso de un donativo monetario a El Salvador a la compra de semilla para sus programas agrícolas a transnacionales como Monsanto, algo que ha sido repudiado por organizaciones campesinas.

La entrega de un donativo de 277 millones de dólares por parte de los EE.UU. destinados para el desarrollo de la Zona Costero-Marina salvadoreña está sujeta a que el Gobierno de El Salvador, otorgue igualdad en la compra de semillas, tanto a empresas nacionales como extranjeras.

Un decreto impulsado por el expresidente Mauricio Funes, definió que la compra de semillas para el uso agrícola se hiciera únicamente a los productores nacionales, algo que fue denunciado por el país norteamericano.

Para las organizaciones campesinas y ambientalistas, la participación en el mercado de semillas certificadas de empresas transnacionales como Monsanto, significaría un duro golpe a la producción agrícola nacional.

La inversión del Gobierno salvadoreño para la compra de insumos agrícolas asciende a 80 millones y beneficia a más de 70,000 familias.

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