La manifestación partió este viernes desde la Cancillería argentina y se dirigió hacia la sede diplomática de Israel en Buenos Aires. Allí los congregados presentaron una declaración que exhorta al cese del genocidio firmada por una treintena de organizaciones políticas, sociales y de los derechos humanos.

«Es inadmisible, en el siglo XXI, lo que está pasando», dijo a RT una de las manifestantes. «Están matando a una población entera, la están bloqueando, no le permiten ayuda humanitaria o les prometen que va a haber una ayuda y no les permiten concretarla».

Otro activista acusa al Gobierno de EE.UU. de permitir un genocidio de los palestinos por parte de Israel. «Si quisiera, tiene la posibilidad de frenarlo y no lo hace —sostuvo—. Al contrario, las armas que está desplegando hoy, que está usando el régimen sionista en Palestina, son en mucho de origen norteamericano».

Muchos se reunieron no solo para mostrar su desaprobación por la operación Borde Protector, que se está desarrollando en Gaza desde el 7 de julio. Denunciaron también la complicidad de la Unión Europea y de las monarquías del golfo Pérsico.