Dice la ciencia que puede alterar nuestros recuerdos. Incluso se atreve a decir que podría introducir recuerdos falsos en nuestro cerebro.
Sin embargo y «curiosamente» la ciencia aún no sabe dónde se encuentran esos recuerdos.
Si escucháramos a una persona decir lo anterior, pensaríamos que no razona muy bien.
El tema que hoy trata JL es muy molesto para la ciencia. Sin embargo los hechos están ahí y siguen apareciendo.
Sin duda estos sucesos invitan a la reflexión.
El budismo y la cábala nos habla de un cuerpo emocional que rodea el cuerpo físico.
¿Es cosa mía o desde que llegó Felipe VI el preparao, no se habla del caso Urdangarín?.
Hola Estebam:
Es cosa de los filtros puestos en los informativos.
http://politica.elpais.com/politica/2014/10/17/actualidad/1413548495_495715.html
Un saludo
Es El alma que nos hablan todos los libros y muchos autores de alto nivel, pasa que los hemos olvidado…para muchas cosas lo añejo es lo mejor.
¡Qué peligrosa transferencia! Si el donante es bueno y receptor malo, o al contrario ¿qué ocurre?
Hola M.A. BOGE:
Te voy a dar mi parecer personal.
El trasplante de un órgano sobre todo el corazón conlleva siempre este tipo de trasferencias.
El corazón no es solo un motor para impulsar la sangre. el corazón es en realidad un centro receptor emocional. El corazón tiene un sistema nervioso autónomo y neuronas como el cerebro. Puede tomar decisiones sin contar con el cerebro y todo esto es sólo la punta del iceberg que la ciencia ha descubierto no hace mucho:
[Enlace bloqueado por la Tasa española AEDE]
El conocimiento antiguo expresado por filosofías como el budismo o la cábala, nos hablan ya de esto desde hace miles de años. Sin duda una lección de humildad para la ciencia moderna.
No se puede decir el grado de influencia ya que este varía en cada individuo.
Por ejemplo si el órgano pertenece a un sujeto con una consciencia que ha desarrollado una característica de forma especial (Habilidad musical, sensibilidad a los colores…) estos rasgos están impregnados no sólo en la consciencia del ser que ya dejó el cuerpo, sino en el propio cuerpo.
Así pues esta trasferencia no significa que queda en el órgano la consciencia del ser, simplemente que este órgano está impregnado de esa consciencia y la transmite a su nuevo portador.
También es preciso tener en cuenta la consciencia del portador ya que puede anular estas transferencias al no contemplarlas y desterrarlas.
Se puede decir que esas trasferencias no van a cambiar al portador. Él seguirá siendo el de siempre pero con algunos cambios, habilidades, sensibilidades …. que pueden ser juzgados como positivos o negativos en función de quien los analice.
Es como si estamos acostumbrados a nuestro ordenador y un buen día un amigo nos deja el suyo para una tarea, este amigo es un virtuoso de la informática.
Al utilizar su ordenador nos encontraremos con rutinas impuestas que nosotros no solemos realizar.
Nuestros cuerpos no son sino avatares, ordenadores, consolas… medios para expresar nuestro ser real.
Un saludo
Me encantan sus nada baladíes comentarios, Maestroviejo. Esto es una pequeña maldad mía, porque conozco a un trasplantado que creo no merecía el regalo.