25Este estudio sobre el Grial va a plantearse no desde el simbolismo universal sino desde la literatura y la iconografía y a partir del momento concreto en el que el símbolo, o el mito, se elabora. Evidentemente un símbolo no se crea en un momento determinado pero sí toma vida y Chretien de Troyes hacia el 1180 va a alumbrarlo convirtiéndolo finalmente en un objeto numinoso. Al dejar la obra inacabada, el grupo social al que iba destinada exigió una continuación, originándose el todo el ciclo artúrico posterior. Durante sólo 50 años se construye todo el mito del Grial que se desarrollará en las miles y miles de páginas de un corpus inmenso. La historia del Grial no puede desligarse de lo que sucedía cuando se escribió: de las Cruzadas y, sobre todo, de la pérdida de Jerusalén en 1187, lo que provocó la necesidad de encontrar una respuesta o una compensación a lo que se perdió. Y, así, una búsqueda material se transformó en una búsqueda, una “quête”, espiritual.
El mito cuenta la historia de Perceval y la seguiremos a partir de unas miniaturas medievales absolutamente maravillosas. En ellas se ve cómo Perceval se convierte en caballero y encuentra las armas y el amor, ya que el ritual cortés se basaba en estos dos puntos. Las aventuras del joven Perceval se suceden hasta llegar al castillo del Rey Pescador y hasta el descubrimiento del Grial. Un objeto que no acostumbra a aparecer en las miniaturas debido a la dificultad de su representación por la multiplicidad de sus significados. Sin embargo, en el texto sí se describe el objeto, para, de este modo, conducir al lector de lo visible a lo invisible de su misma naturaleza, del oro terrestre a la luz de la visión. Levi Strauss escribió que el mito de Perceval sería lo opuesto/complementario al mito de Edipo pues si bien los dos se enfrentan al enigma, uno habla demasiado mientras que el otro calla también demasiado por lo que el enigma pervive en Perceval. Es entonces cuando ya no se busca la obtención de un objeto sino alcanzar la sabiduría. Es una aventura del conocimiento a partir de una pregunta.
Después de su regreso a la corte del Rey Arturo, tras su encuentro con el Grial, Perceval muestra un profundo cambio. Trocará su búsqueda de aventuras caballerescas por la búsqueda de respuestas a sus preguntas: ¿Por qué sangra la lanza? y ¿a quién se sirve con el Grial? La concepción de la vida como una “quête” se refleja por primera vez en el cuento del Grial. Una errancia de cinco años en los que las aventuras se llenan de nuevos personajes. Tras este periodo aparece de nuevo Perceval, un Viernes Santo, cuando encuentra una ermita y su ermitaño le habla del Grial como de “algo muy santo” pues contiene una hostia con la que se alimenta al dueño del castillo. A partir de aquí, se relacionará el Grial con la liturgia eucarística, un hecho recogido por los continuadores, sobre todo por Robert de Boron que lo vinculará con la misma sangre de Cristo. El Grial se convierte en una reliquia milagrosa y de un mito interrogativo se transformará en un mito visionario que muestra al tiempo que oculta la corporeidad crística.
Mucho se ha escrito y debatido sobre el Grial…¿Sabremos la verdad?