ACAPULCO (AFP) — Pintura blanca y fresca cubre las huellas de un incendio provocado por criminales en la oficina de la directora de una escuela secundaria de un barrio de Acapulco, el puerto mexicano donde la violencia del crimen organizado interrumpió las clases por semanas.
Afuera, cuatro soldados resguardan la puerta, blandiendo rifles de asalto tan grandes como los pequeños escolares a los que protegen.
El Ejército llegó hace tres semanas a más de 100 escuelas de la periferia de este puerto para frenar la irrupción de asesinatos, secuestros y extorsiones contra profesores.
El despliegue de 1,000 soldados en escuelas de estos barrios marginales de Acapulco fue la única manera de convencer a los maestros de volver a los salones de clases, terminando con un paro de dos meses que dejó desde noviembre a 31,000 estudiantes en sus casas.
«Nunca hemos pensando llegar a este extremo, de estar trabajando con vigilancia o con militares», aseguró María Inés Aparicio, directora de la Escuela Secundaria 100.
Parada al lado de quemados estantes de libros, y mientras los niños aguardan la campana de la salida, la maestra lamenta que seis estudiantes dejaran la escuela este año por miedo.
La escuela estaba vacía durante un paro de profesores cuando fue blanco en diciembre de un asalto de hombres armados, que quemaron la oficina de la directora, incineraron documentos, así como computadoras y escritorios.
Los atacantes dejaron un siniestro mensaje con una advertencia: «No cierren la escuela».
Aparicio dice desconocer por qué fue quemada su oficina pero las autoridades acusan a pandillas de Acapulco de estar detrás de ese incendio, y de al menos otros dos ataques para conseguir que los maestros les paguen una cuota.
Fuerzas federales capturaron a principios de febrero al presunto líder de una de las pandillas, Ronaldo Mendoza Matilde, en Mexicali, una ciudad fronteriza con Estados Unidos. Tres de sus cómplices fueron arrestados la semana pasada en Acapulco.
“Corrompen niños”
Ha sido un año duro para el profesorado de Acapulco, con 21 docentes asesinados y cerca de 10 secuestrados en 2014, señaló Alfredo Miranda, representante local del departamento de Educación del conflictivo estado de Guerrero.
Miranda aseguró que los criminales dejaron mensajes en escuelas demandando un pago sobre el bono de aguinaldo de tres meses de salario, que los profesores reciben a finales de año.
«Es un hecho inédito en la historia de mi país que militares cuiden las escuelas, pero no había otra manera. Al crimen organizado lo teníamos dentro del salón de clases», expresó Salvador Martínez Della Roca, secretario de Educación de Guerrero.
«Corrompen niños y a través de ellos venden droga», asegura.
El secretario no da una fecha límite para la presencia de los militares, y planea reforzar la seguridad con muros alrededor de las escuelas, así como con cámaras de vigilancia y botones de pánico para alertar a la policía.
Jesús, un estudiante de 16 años de la secundaria 100, recuerda el pánico que se vivió en el aula el año pasado cuando se escucharon disparos afuera.
«El maestro decía ‘que se calmen'», recuerda Jesús con sus audífonos saliendo del cuello de su camisa. «Ahorita la situación ha mejorado, porque antes era crítica».
El maestro de ciencia Amalio Hernández dijo que alguien que se hizo pasar el año pasado por un padre de familia se dirigió a él afuera del salón y amenazó con secuestrarlo.
El temor continúa
Mientras el despliegue militar ha traído tranquilidad a los maestros, padres y estudiantes, muchos piden también mayor seguridad en sus vecindarios.
Ramiro Villa Salas, director de la escuela técnica 79, cercana a la carretera que va al aeropuerto, dijo que tuvo que cerrar después del 27 de noviembre, luego de que una auxiliar de administración y su hija, de tres años, fueron secuestradas cuando caminaban de regreso a casa, y luego liberadas.
La violencia en la zona provocó que 25 niños hayan sido llevados por sus padres a otras escuelas.
Otros maestros y padres están preocupados de que la presencia del Ejército pueda atraer más problemas.
«Por una parte nos sentimos tranquilos pero por otra parte nos sentimos a veces alarmados porque pueda pasar algo porque estén ellos», dijo Hugo Estrada, un sastre cuya hija de 13 años estudia en la escuela secundaria Técnica 5, que sufrió otro incendio provocado el año pasado
http://www.cnnmexico.com/nacional/2015/02/21/es-un-hecho-inedito-que-militares-cuiden-las-escuelas-en-acapulco
¿Qué se hace tan mal en México, para que ocurran estas cosas? Porque el país no es tercermundista, digo yo.
Hola M.A BOGE:
Según mi opinión, el gran pecado de México es tener frontera con los EEUU.
En Canadá no se puede cultivar bien las drogas, pero México tiene el clima ideal.
El mercado de la droga sirve de moneda para pagar muchas operaciones encubiertas.
Los países que dicen querer combatirla en realidad lo que hacen es promover su producción y la existencia de grupos que desestabilicen el país para así justificar su intervención y ayuda.
Otro tema es la mano de obra barata y la inmigración.
Para la economía del país grande resulta muy útil poder contar con mano de obra barata no legal, esto resulta muy productivo.
Además estas personas pueden desempeñar tareas no legales, lo que puede resultar muy cómodo.
Un saludo
Su deducción es dolorosamente acertada Maestro… Solo agregar que, no sé si se habrán dado cuenta, que la prevención educacional y formativa, dirigida a la concienciación al daño general y personal por la ADICCIÓN a las drogas, no existe en los pensums de estudios escolares de los Países » desarrollados » y es tema tabú, en la mayoría de los núcleos familiares que aún existen como tal.
Mientras no exista, fomente, estimule, conciencie, eduque a nuestros jóvenes ( generaciones de relevo ), en función de que se den cuenta ( A TIEMPO ) del juego peligroso y mortal que significa dejarse seducir por esta maligna influencia y darles las herramientas para no caer en ella… Las cosas no van a cambiar.
… Y ya sabemos los intereses poderosos detrás de este «negocio «, que ejerce su poder para que esto no pase… Tendríamos que empezar desde nuestras propias familias y colegios, para pretender neutralizar a este Monstruo degenerativo.
Le saludo Maestro…
Gracias, Maestroviejo, por sus siempre precisas aclaraciones para gente que vive en las nubes, como yo. Antes se solía decir: Pobre México, tan cerca de EEUU. y tan lejos de Dios.