Mapa cerebral de los estímulos sexuales femeninos

Mira que desde hace décadas lo andan diciendo las mujeres: la estimulación de la vagina no es lo mismo que la estimulación del clítoris. Pues ahora los datos del escáner cerebral confirman el argumento.

Por primera vez se ha asignado la ubicación exacta correspondiente a la vagina, el cuello uterino y los pezones de las mujeres, en la corteza sensorial del cerebro, demostrando que la estimulación vaginal activa diferentes regiones del cerebro a la estimulación del clítoris. El estudio también encontró una relación directa entre los pezones y los genitales, lo que podría explicar por qué algunas mujeres pueden llegar a un orgasmo solamente a través de la estimulación del pezón. Estos descubrimientos, en última instancia, podrían ayudar a algunas mujeres que han sufrido daño en los nervios durante el parto o alguna enfermedad.

La corteza sensorial es una franja de tejido cerebral cuya ubicación corresponde, más o menos, a la posición de la banda de un par de auriculares. A su través, las neuronas relacionan el intercambio de información de diferentes partes del cuerpo con información sensorial. A menudo, esto se describe como el «homúnculo sensorial» (ver imagen más abajo), donde el tamaño de cada parte del cuerpo se muestra en la cantidad que cada parte del cerebro dedica a procesar la información sensorial.

Este diagrama fue publicado por primera vez en 1951, después que se llevaran a cabo unos experimentos realizados de cirugía cerebral estando los pacientes conscientes: el cirujano les estimulaba eléctricamente diferentes regiones del cerebro y los pacientes informaban de las partes de su cuerpo en las que sentían una sensación. Sin embargo, todos los sujetos eran hombres. Hasta hace poco, la posición de los genitales femeninos en el homúnculo sólo se había adivinado.

Esto cambió desde el año pasado, cuando un equipo dirigido por Lars Michels, en el Hospital infantil de la Universidad de Zurich, Suiza, utilizaron imágenes de resonancia magnética funcional, para confirmar la posición del clítoris en el homúnculo, y encontraron que estaba aproximadamente en la misma posición que la del pene en los hombres. Barry Komisaruk, en la Universidad de Rutgers en Newark, Nueva Jersey, y sus colegas, usaron el mismo método para mapear la posición del clítoris, la vagina y el cuello uterino en la corteza sensorial, y comprobar su ubicación cuando las mujeres se estimulan.

«Esto es una prueba difícil, e indica que hay una gran diferencia entre la estimulación de las distintas regiones», añade Stuart Brody, de la Universidad de Escocia en Paisley, Reino Unido, y uno de los investigadores del estudio.

Hay quien argumenta que, las mujeres obtienen placer de la estimulación vaginal debido a que el clítoris está siendo estimulado indirectamente, pero los nuevos resultados contradicen esto. «Y esto se apoya en los informes de mujeres que experimentan el orgasmo a través de varias formas de estimulación», comenta Beverly Whipple, también de la Universidad de Rutgers, que no participó en el estudio actual.

Komisaruk también comprobó lo que sucedía cuando los pezones de las mujeres eran estimulados, y se sorprendió al descubrir que, además de iluminarse la zona de la corteza correspondiente al pecho, también se activaba la del área genital. «Cuando hablo de esto a mis colegas neurocientíficos masculinos, suelen replicar: ‘Vaya, eso es una excepción al homúnculo clásico’; pero cuando se lo digo a las mujeres suelen decir: ‘¿Ah, sí? qué bien, lo cual puede explicar por qué muchas mujeres señalan la carga erótica de la estimulación de los pezones.»

El siguiente paso es mapear las áreas que se iluminan del cerebro como respuesta a la estimulación del clítoris y la vagina. Y a Komisaruk también le gustaría ver lo que sucede cuando se estimula la zona que supuestamente contiene el punto G, ya que, en el estudio actual, las mujeres sólo estimularon la pared frontal de la vagina.

Los hallazgos podrían ayudar a las mujeres que han sufrido daño en los nervios durante el parto o debido a enfermedades como la diabetes. Michels tiene evidencias preliminares de que la estimulación del nervio del clítoris puede mejorar los síntomas de incontinencia urinaria, pero señala que es necesario tener una comprensión adecuada de los mapas nerviosos del cerebro para saber cómo traducir esto en un tratamiento efectivo.

Entre tanto, Komisaruk dice que la estimulación del pezón puede mejorar la sensación genital de las mujeres con nervios dañados, y además, un complemento perfecto para experimentar el orgasmo».

TRADUCIDO POR PEDRO DONAIRE

http://feedproxy.google.com/~r/bitnavegante/~3/AR6OAxpZmYw/mapa-cerebral-de-los-estimulos-sexuales.html

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.