La información que sigue supone una enmienda a la totalidad de todas las explicaciones -incluidas las alternativas o «conspiranoicas»- ofrecidas hasta ahora del accidente del vuelo 9525 de Germanwings. Sin modo de corroborarla o refutarla, me limito a exponerla:
Tanto los Airbus 320 como prácticamente todos los modelos operativos de Boeing están equipados con un sistema que permite tomar el control remoto de un avión si éste sufre un secuestro. Jim Stone tuvo conocimiento de este hecho cuando en 2002 accedió a un foro privado ubicado en un área segura de la página web de «Boeing» donde varios pilotos discutían por qué no se activó ese sistema durante los atentados del 11 de septiembre, ya que los 757 y 767 -publicitados como «a prueba de secuestros»- estaban equipados con él. Los ocho minutos de descenso inesperado del GW-9525 hubieran debido provocar el que se activase este mecanismo. Sin embargo el control de tierra no dirigió el avión a un lugar seguro.
Además, un caza italiano emitió un «mayday» (llamada de socorro) un minuto antes de que el avión iniciase su descenso, sin que el motivo de la llamada haya sido dado a conocer. La razón sería el que «varios» aviones de combate franceses estaban en la zona, y tomaron el relevo de este caza hasta la escena del accidente. El italiano se dio la vuelta después de presenciar la toma de control remoto porque no estaba autorizado a entrar en el espacio aéreo francés. ¿Cómo sabemos esto en términos irrefutables? Debido a los testigos sobre el terreno que vieron estos aviones de combate franceses siguiendo al airbus hasta que se estrelló. Después del desenlace, confirmaron que los aviones de combate, en vez de quedarse en el aire y evaluar la situación, se marcharon, en un proceder que parece obedecer más a comprobar que se ha cumplido una misión que a colaborar ante una catástrofe.
Así, el concejal local de la localidad de Meolans Revel, Thierry Castaño, contó a Isabelle Malsang de la AFP: “Varios Mirages nos pasaron por encima. La única cosa que notamos fue tres aviones de combate Mirage volando sobre la zona, al menos tres veces, en torno al momento aproximado del accidente. Estamos acostumbrados a ver como uno al día, pero nunca tantos al mismo tiempo”.
Estos datos, «borrados» de los medios de comunicación oficiales, hacen pensar que la ausencia de una llamada de socorro por parte de los pilotos pudo deberse a que los aviones de combate avistados la impidieron interfiriendo las comunicaciones. Ahora bien, si el derribo del vuelo 9525 fue intencionado, la pregunta es ¿quién iba en ese avión y por qué fue «sentenciado»?
Obviamente, sabemos que a bordo del avión iban 150 seres humanos, niños y bebés incluidos, cuyas vidas fueron segadas junto con el honor de un «cabeza de turco» sobre el que se ha descargado oficialmente toda la culpa, en una investigación relámpago -las conclusiones tardaron solo 36 horas- en que se han incumplido todos los protocolos previstos (respecto a los comentarios que circulan en la red sobre que el copiloto había recibido tratamiento para la “depresión” y demás majaderías, la Universidad Clínica de Düsseldorf ha confirmado que Andreas había sido paciente de la Clínica y que le trataron el pasado 10 de Marzo. A pesar de las leyes sobre la privacidad médica, un portavoz del Centro aseguró que es completamente falso que le atendieran por depresión).
Pero, ya entendéis la pregunta, ¿Quién iba a bordo como para que “alguien” decidiera acabar con él/ella a toda costa?
Probablemente nunca lo sabremos: si «borrar» los cuerpos volviéndolos identificables para todos, excepto a un grupo muy reducido de investigadores, es lo que haría falta para ocultar quién iba en ese vuelo, dirigir por control remoto la aeronave contra una montaña después de una picada a velocidad máxima sería la mejor manera de hacerlo. Los investigadores que trabajan sobre la escena del accidente han dicho que la parte más grande de un cuerpo que han encontrado es del tamaño de un maletín. Absolutamente nadie puede identificarse visualmente.
Jim Stone termina su escalofríante reseña interpelando directamente a Remi Jouty, Director de la BEA (Bureau d’enquêtes et d’analyses), agencia de investigación y análisis de seguridad civil francesa:
Desde el momento en que el avión disponía de un sistema computerizado para su recuperación por control remoto en caso secuestro, ¿por qué no fue activado el sistema durante los ocho largos minutos durante los cuales era evidente que la aeronave estaba en problemas y sin comunicación con el piloto? Se dispuso de un montón de tiempo para reconocer que el avión estaba fuera de control y se estrellaría sin intervención. ¿Por qué no se activó el sistema de recuperación anti-secuestro? Quizás es que seguías las pautas de un orden del día diferente. Tal vez se estaba utilizando ese sistema para cumplir con esa agenda.
Esperar una respuesta honesta solo puede abocarnos a la frustración. No hay gobiernos honestos.
(Fuente: http://www.jimstone.is/)
De todas formas nunca sabremos la verdad.
Pero la intuimos.