Integrantes de la Marea Granate en una manifestación de apoyo a las Marchas de la Dignidad en Montpellier (Francia). / Marea Granate (Facebook)
Los emigrantes españoles denuncian la imposibilidad de votar en las elecciones . Por ello, se manifestarán en 33 ciudades de toda la geografía global pidiendo que se ejecute su derecho al voto. Entre estas localidades, se encuentran varias europeas -como Ámsterdam, Berlín, Dublín, Bruselas o París, entre otras,- pero también de Estados Unidos, como Boston o Nueva York; de América Latina, como Buenos Aires, Montevideo o Lima, o, incluso de Australia, como Melbourne. En todas ellas, el domingo próximo, saldrán a las calles españoles bajo el lema “24M, sin voz ni voto”.
Para María Almena, una bioquímica que lleva dos años y medio en París, “obligada porque los recortes en ciencia en España hacen casi imposible encontrar un contrato”, el motivo es claro: ” La reforma de la Ley Electoral se hizo a finales de 2011. El PSOE llevaba en el programa el establecimiento de una circunscripción exterior que incluía a representantes de la gente que ha tenido que salir del país. Si esto se hubiera hecho seríamos la tercera o cuarta provincia en habitantes del Estado, pero había miedo, porque el voto emigrante tendría mucha fuerza y los partidos tenían miedo de que la emigración se hubiera hecho notar políticamente”. “Las abstenciones favorecían al bipartidismo, por lo que el PP, con PSOE y CiU finalmente, no permitieron que se reformara en este sentido la Ley Electoral“, explica Almena, integrante la Marea Granate, que trabaja por los derechos de los residentes en el extrajero.
Cartel de las concentraciones convocadas por la Marea Granate para el domingo. / Marea Granate (Facebook)
“De los llamados a votar en las autonómicas, un total de 912.000 personas desde el extranjero, sólo 46.000 han conseguido pedir el voto, pero no ha conseguido votar toda esta gente porque las papeletas no llegan en más de la mitad de los casos“, asegura esta bioquímica. “Para las municipales sólo tienen derecho a voto los residentes temporales, de los cuales no tenemos datos oficiales, pero son muchísimos, porque mucha gente no quiere perder derechos, como el voto municipal o la Sanidad Pública, y se inscribe como temporal. Hubo una circular del Ministerio de Exteriores para que no se inscribieran como temporales”, denuncia Almena.
Esta emigrante exige, al respecto, que se aseguren los derechos de las personas que “se han visto obligadas a salir de España por las políticas del bipartidismo”. “Pedimos la derogación de la medida del voto rogado, de la LOREC, ya que no ha habido ninguna elección desde que se instauró la reforma que supere el 5 por ciento de participación, mientras que el censo exterior ha aumentado en un 50 por ciento desde 2.009″, añade. “De ser 1.400.000 emigrantes hemos pasado a ser más de 2 millones“, declara. Además, Alcena reclama “que se facilite la información en los consulados, porque el censo se cerró el 31 de diciembre sin que mucha gente tuviera información al respecto, y los consulados decían que no sabían nada, porque Exteriores no decía nada al respecto”. Esta española con residencia en París reitera que “el voto emigrante es muy crítico, por eso no interesa poner facilidades”, sin embargo, asegura que “hay mucha gente que está volviendo a España este fin de semana para poder votar”.
IU y Podemos se hacen eco
Distintas fuerzas políticas han denunciado esta situación. Entre ellas se encuentranIzquierda Unida y Podemos. En el caso de IU, el pasado 21 de abril ya reclamó a la Junta Electoral Central (JEC) que “removiera todos los obstáculos que dificultan que los españoles que viven en el extranjero puedan votar” en las elecciones de este domingo, “tanto a los españoles inscritos en el Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA) que viven en el extranjero como a los españoles inscritos en el Registro de Matrícula Consular”, es decir, aquellos que se encuentran temporalmente fuera del país.
Por su parte, la Junta Electoral reconoció a IU el pasado 3 de mayo que “existen dificultadas originadas de la propia Ley Electoral para que los emigrantes españoles puedan votar en tiempo hábil”. En esa respuesta, además, la Junta reconoció sobre dichos problemas que “no podrá corregirlos ya que se deben a circunstancias ajenas a las competencias de la Junta Electoral Central”. El problema, según el órgano que supuervisa el proceso electoral, está en la “insuficiencia de los plazos establecidos en la Ley Orgánica del Régimen Electoral General como una de las principales dificultades para la efectividad de la recepción en tiempo hábil del voto de los electores inscritos en el CERA y de los electores temporalmente residentes en el extranjero”. Este problema, según la Junta se agrava “en los casos en los que se presentan recursos contra los acuerdos de proclamación de candidaturas”. Además de estos problemas derivados de los plazos que marca la actual ley electoral, la JEC apunta también a los “problemas derivados del funcionamiento de los servicios postales de otros estados”.
La formación de Pablo Iglesias también ha pedido a la JEC medidas al respecto. El pasado 20 de mayo le solicitó que alargara el plazo del voto por correo para los residentes en el extranjero. “La participación ha pasado con la ley del voto rogado del 32 por ciento del censo de residentes en el extranjero en las elecciones generales 2008 a menos de un 5 por ciento en 2011. En las elecciones europeas del pasado mayo, este porcentaje cayó al 1,84 por ciento“, aseguran desde Podemos.
Algunos como que están pendiendo de jugarretas, de un hilo, con las uñas agarrados al poder social español.