Una colaboración de Adriana Babè
A pesar de que muchos clasifican a Victor Brossa de gurú espiritual, el huye de cualquier etiqueta al respecto siendo muy consciente de la confusión que genera su forma de abrir el concepto de arte a lo impensable, puesto que lo que en realidad está manifestando con sus acciones, videos, charlas, conferencias y libros es una nueva forma de entender y usar la expresión artística aplicada. Una forma abierta y alejada de las fronteras y los límites en los que nos tienen acostumbrados a navegar.
Brossa aplica el arte más allá del pincel. Usa el taller de pintura como un lugar de calentamiento y entreno que le permite explorar de otra forma el camino de la creación, para poder aplicar los mismos parámetros dentro de su propia vida. Por tanto, él es muy consciente de su propia creación, donde sus potenciales son los colores y su propia vida es el lienzo esperando ser coloreado, transformado.
El arte es la expresión natural del ser y podemos decidir conscientemente que es lo que deseamos vivir, para crearlo o provocarlo en lugar de esperar a encontrarlo afuera.
Este es un video diferente, arriesgado en cuanto a que el artista se disfraza una vez más detrás de una supuesta espiritualidad para generar un acto artístico sin limites, sin barreras. Para Brossa no hay nada que no sea espiritual, considerando que lo importante del acto artístico está en la conciencia y el estado de frecuencia del que crea y expresa, puesto que el arte sanará o enfermará nuestras vidas dependiendo del lugar desde el cual sea emitido, expresado.