Mientras la gente está viviendo plácidamente sus vacaciones, llenando las playas y relajándose, absolutamente distraída, podríamos estar en los albores de un enorme crack financiero mundial.
Al menos eso es lo que temen algunos analistas y expertos.
La crisis de Grecia y su posible salida de la eurozona, podría acabar provocando un desplome de las bolsas; asimismo, las acciones en China están cayendo, como también caen las materias primas.
Y todas estas cosas fueron las que sucedieron inmediatamente antes de la caída de las bolsas en Estados Unidos en otoño de 2008. En muchos sentidos, parece que estamos viendo una repetición de la crisis financiera de 2008, pero con la diferencia de que esta vez el mundo está mucho peor económicamente.
Los niveles de deuda globales se encuentran en un máximo histórico, el sistema bancario en la sombra mundial de 75 billones de dólares podría implosionar en cualquier momento, y hay cientos de miles de millones de dólares en derivados que amenazan con acabar con los principales bancos de todo el planeta.
EL INMINENTE PELIGRO DEL SISTEMA BANCARIO EN LA SOMBRA
La última crisis financiera mundial fue hace casi siete años y la verdad es que se ha hecho muy poco para prepararse para la siguiente. Si los mercados globales no se calman, podríamos ver una “carnicería” sin precedentes en los próximos meses.
Las autoridades europeas prometen que un “Grexit” no afectaría a los mercados y que cualquier “contagio” de la crisis griega está “contenido”.
Pero todo indica que estas afirmaciones no son más que una cortina de humo.
Los rendimientos de los bonos europeos han comenzado a elevarse. Cuando los rendimientos de los bonos suben, los precios de los bonos bajan, por lo que muchos inversores en bonos están perdiendo una enorme cantidad de dinero en estos momentos
Si no hay un acuerdo de último minuto entre Grecia y sus acreedores, lo que hemos visto hasta ahora en los mercados de bonos será sólo la punta del iceberg.
En los próximos meses, podríamos presenciar un crack del mercado de los bonos sin precedentes.
Así es como lo ve el analista económico Egon von Greyerz…
No hay liquidez en este mercado y es aquí donde pronto veremos un problema. Vamos a ver el mercado de bonos totalmente agarrotado en los próximos meses. La gente no comprende que este es un problema mucho más grande que el de Grecia.
Estamos hablando de un problema para todo el mundo, y no sólo de un problema griego. La mayor parte del mercado de bonos de 100 billones de dólares no vale nada, y hay oculta además una “bomba de relojería” de más de mil billones de dólares en derivados ligada a eso. Esto significa que, por desgracia, nos dirigimos a un contagio importante que conducirá a una catástrofe financiera para todo el mundo. Y eso llevará también a una implosión de todas las burbujas de activos en todo el mundo.
Esperemos que estas visiones sean excesivamente catastrofistas y que la realidad sea mucho menos apocalíptica.
Aunque la verdad es que el problema de los derivados sigue ahí, oculto a la vista, como una bomba atómica en plena cuenta atrás.
Lo cierto es que, aunque nos vendan que la situación griega no puede afectar al resto de países, se ha reportado que gran cantidad de europeos están comprando oro físico a un ritmo febril, especialmente por parte de alemanes, franceses y griegos.
Pero mientras todo el mundo está distraído con Grecia, parece que un problema mucho más grande se está desarrollando en China.
Mientras tanto, las acciones chinas han seguido bajando. En general, las acciones chinas han caído 27 por ciento desde el pico, y la friolera de 3,2 billones de dólares de “riqueza de papel” ha sido aniquilado en China en sólo las últimas tres semanas.
El veterano analista Richard Russell, advierte de que China puede ser el “cisne negro” que lleve el mundo al desastre.
“La preocupación predominante es sobre si Grecia o no saldrá del euro. Pero ese hecho tiene una importancia menor.
Es mucho más preocupante el mercado bajista inmobiliario en China, la segunda mayor economía del planeta, que se está hundiendo en una recesión de la que no conocemos las consecuencias.
De momento, en China vemos un mercado bajista, pero lo que preocupa es que realmente haya una caída grave.
China está preparando una enorme inyección de liquidez en un esfuerzo por frenar el declive. Los mercados bajistas son alimentados por el miedo y una vez que el miedo se extiende, el mercado bajista puede convertirse en un asunto grave.
China ha experimentado un auge de la construcción furioso, lo que ha empujado su PIB hacia arriba. China ha construido miles de millones de dólares en edificios. Pero los edificios están vacíos. ¿Cómo pagará China por todo esto?
China tiene la capacidad de levantar o de hundir la Economía Mundial por completo”.
De hecho, a estas alturas, las cosas están tan mal en China, que alrededor de 700 empresas con presencia en las bolsas en China ya han suspendido su actividad con el fin de protegerse.
También se están empleando otras medidas desesperadas para tratar de detener la caída de las bolsas en China.
Por ejemplo, el fin de semana, una alianza de brokers bursátiles se comprometió a invertir “al menos 120 millones de yuanes” con el fin de estabilizar los mercados de valores del país, después de una caída de casi 30% desde mediados de junio. Además, 57 fondos de inversión chinos están invirtiendo 2200 millones de yuanes en fondos de acciones.
Por si eso fuera poco, el banco central chino también se ha involucrado en tratar de salvar la situación. De hecho, el Banco Popular de China ha dado el paso dramático de prestar dinero directamente a los brokers para que inviertan en las bolsas, lo que indica gran preocupación de las autoridades acerca de la crisis.
Además, el gobierno chino ha tomado otras medidas, como prohibir las ventas en corto de las acciones, prohibir que el fondo de la seguridad social de China venda acciones (aunque sí puede comprarlas) y prohibir a los medios de comunicación el uso de términos como “desastre de las acciones” y “rescate del mercado” en sus informes de prensa.
Pero aún así, a pesar de todas estas medidas, las acciones chinas siguen cayendo todavía.
A ello debemos añadir que los precios mundiales de las materias primas también están cayendo y esto es algo que también sucedió antes del estallido de la última crisis económica.
Lo cierto es que las bolsas estadounidenses no han comenzado estrellarse todavía, pero cabe señalar que ya ha empezado a producirse una venta de existencias tras el “no” en el referéndum griego.
Sin embargo, y a pesar de todas las señales alarmantes, los políticos siguen vendiéndole al pueblo que “todo va bien”, que “la crisis de Grecia no afectará al resto de países de la eurozona” y que “se está produciendo una recuperación económica”.
Y ante este tipo de afirmaciones, la población debería preguntarse ¿qué sucedería si dijeran lo contrario? La respuesta es simple: se crearía un estado de pánico que podría provocar graves disturbios económicos.
Lo que lleva a concluir que, sea cual sea la verdad sobre la economía, tanto si las amenazas son graves como si no lo son, el discurso de los políticos será el mismo y no podremos distinguir la diferencia.
A ello debemos añadir otra señal, esta más centrada en España y que debería provocarle un cierto grado de inquietud a la gente: el gobierno español se está descolgando con todo tipo de mensajes económicos triunfalistas y con generosas promesas de rebajas de impuestos, que no parecen encajar con la situación real de la economía.
La mayoría de opositores al gobierno achacan este triunfalismo a una maniobra electoralista de cara a las elecciones generales que se producirán a finales de año, con el objetivo de captar votos bajo el argumento de que el “gobierno ha recuperado la economía”.
Pero la verdad puede ser aún mucho peor y mucho más inquietante…¿Y si el gobierno sabe perfectamente que este triunfalismo no tiene ninguna base y que no podrá cumplir las promesas porqué sucederá “algo gordo” que se lo impedirá?
Si el gobierno supiera que se producirán graves disturbios económicos a nivel internacional, podría argumentar entonces que “ellos lo habían hecho bien, que la recuperación era real y que las promesas se iban a cumplir, pero que no ha podido ser por culpa de eventos externos”…y con ello salvarían su imagen de presuntos salvadores de la economía a la vez que le echarían la culpa a un tercero por un desastre que “ellos no habrían provocado”.
Y si ese “culpable” fuera el gobierno griego de Syriza, aliado de Podemos, sacarían beneficio electoral de un desastre
Así pues, las promesas electoralistas del gobierno de Rajoy y su desmesurado triunfalismo económico, pueden ser el peor indicativo de que nos acercamos a “algo grave” a nivel financiero y a escala internacional…
http://elrobotpescador.com/2015/07/08/grecia-china-estamos-al-inicio-de-un-colapso-financiero/