El ex ministro de Energía griego y diputado del partido gobernante Syriza, Panayiotis Lafazanis, anunció este jueves la creación de un movimiento que se opondría a la aplicación de nuevas medidas neoliberales acordadas entre el Gobierno y la Troika.

Poco antes de que el Parlamento comenzara a debatir el acuerdo con la meta de votarlo hacia la medianoche, Lafazanis y otra docena de dirigentes de Syriza urgieron a la “clase política y social” a rechazar los recortes sociales y las privatizaciones exigidas por la Troika, conformada por el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Central Europeo (BCE) y la Comisión Europea (CE).

Bajo el título “No al nuevo memorando. Llamamiento a la lucha y a la movilización popular en todo el país”, el texto instó a crear “un amplio movimiento en todo el país” con “comités de lucha contra el nuevo memorando de entendimiento” que preserve “la democracia y la justicia social”.

Fuentes del Ejecutivo griego del primer ministro Alexis Tsipras, líder de Syriza, criticaron el anuncio de Lafazanis y reiteraron que si no se cierra un acuerdo con la Troika el país salidrá del euro y volverá a la moneda del país, el dracma.

El texto fue firmado además de por Lafazanis por otros doce miembros de Syriza, algunos de la corriente crítica dentro del partido, la Plataforma de Izquierda, a la que pertenece Lafazanis y que desde el inicio de las negociaciones se ha negado a acordar nuevas reformas que comportasen recortes.

“La firma de un nuevo memorándum por un gobierno elegido para abolir las dos anteriores lleva al desastre al pueblo griego y a la democracia”, recogió la declaración, citada por la agencia de noticias EFE.

Se destaca que el tercer rescate “significa aún más recortes, la reducción de los derechos civiles y la perpetuación del régimen de tutela del país”.

El texto insiste en que con la aceptación del acuerdo con la Troika, el gobierno contraviene la voluntad de más del 61 % de griegos que el pasado 5 de julio votaron en el referéndum en contra de la propuesta de acuerdo de las instituciones.

Tras las disidencias surgidas en el seno de Syriza, se espera que en la votación del rescate que se celebrará este jueves por la madrugada el Ejecutivo de Tsipras tenga que apoyarse de nuevo, como ya hizo en las dos votaciones anteriores, en los votos de la oposición.

La escisión en Syriza se da ya por hecha, con lo que la prensa local apunta a que esta declaración puede ser el preludio del anuncio de la creación de un nuevo partido.

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