Los partidos políticos españoles que se oponen al Partido Popular se unieron este miércoles para evitar que siga adelante el trámite de urgencia de la reforma del Tribunal Constitucional que agilizaría la suspensión en sus funciones al presidente catalán Artur Mas.
Mas respondió ayer que con esta reforma exprés «el partido que gobierna en España se plantea cargarse el estado de derecho haciendo que el TC inhabilite». «Eso sí que recuerda los años 30. Esto no es ni estado de derecho ni calidad democrática. Es alarmante», dijo en un acto en Gerona.Mas tachó la reforma exprés de «esperpéntica» e «inquisitorial».
Hoy, los socialistas del PSOE recabaron la firma de Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), Convergència (CDC), Unió (UDC), el PNV, UPyD y varios partidos del Grupo Mixto (CC, BNG y Compromís) para sellar un frente común y presentar un recurso conjunto para que el presidente del Congreso, Jesús Posada, reconsidere la admisión a trámite de la reforma del PP.
Partidos de izquierda y nacionalistas consideran que la propuesta conservadora, que se aprobará en mes y medio gracias a la mayoría absoluta del PP, se hace ‘ad hoc’ para frenar el proceso catalán y desactivarlo.
La diputada del PSOE, Magdalena Valerio, opinó hoy que la tramitación urgente de la reforma del Alto Tribunal es «un abuso más de la mayoría absoluta» del PP, esta vez «utilizando al presidente del Congreso, que debe ser el presidente de todos y ejercer un papel arbitral».»Es un ataque grave a la democracia y a la división de poderes, forzando el funcionamiento del Parlamento», estimó.
«Con esta ley, el PP va a poner el broche de oro del abuso que ha mostrado durante toda la legislatura», denunció la socialista.
La oposición considera esta propuesta «desleal», «innecesaria», «irresponsable» y «unilatera».
La reforma permitiría al Constitucional suspender a funcionarios y gobernantes que no cumplan sus sentencias y resoluciones.
La propuesta llega justo cuatro semanas antes de las elecciones autonómicas el próximo 27 de septiembre.
Las fuerzas independentistas otorgan a estas elecciones un carácter plebiscitario tras la negativa del Ejecutivo español a acordar la convocatoria de un referendo sobre la secesión de Cataluña.
De obtener una mayoría parlamentaria favorable a la independencia, la primera medida será aprobar una «declaración solemne» en el Parlamento catalán para iniciar el proceso de «desconexión» de España.
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No me gustan los tipos que traen inquietud a las naciones. Dante Alighiere los condenó a todos: papas, condes, reyes, o religiosos. Algún joven escritor español debe condenar en una nueva Comedia, los desmanes que se cometen aquí, siquiera los más recientes.
Ya hace mas de tres años que se le viene recomendando que aparquen sus discursos sobre la separación de Catalunya del estado español. La Constitución que todos votamos, tiene las herramientas necesarias para dirimir este tipo de situaciones y al estado no le quedará otra salida que hacerlas cumplir, frente a quienes miran para otro lado y tratan de seguir adelante con los que suponen que son sus derechos, cuando vemos según las investigaciones que la corrupción forma en la forma de un 3% forma parte de su andamiaje. No existe excusas. Con la Independencia, se taparían todas y aparcarían todas las investigaciones…
Exacto, Martin Jorge Basmajian.