Los camiones de basura del área de San Francisco, EEUU, pronto podrían salir a la calle equipados con lectores de placas de matrícula.
Los escáneres de los camiones barrerán las calles e informarán de la ubicación de los vehículos a la policia en tiempo real.
El Consejo Municipal aprobó la instalación de esta tecnología de vigilancia en los camiones de basura.
Los escáneres cuestan 15.000 dólares cada uno y la ciudad dispondrá con ellos de un flujo constante de datos procedente de las calles.
Las fuerzas del orden promocionan el programa como una forma eficaz de impedir el robo de vehículos y localizar vehículos que ya han sido robados, pero mucha otra gente expresa su alarma.
El plan plantea preocupaciones significativas debido al hecho de que convertiría a empresas privadas de recolección de residuos en agentes de las fuerzas del orden.
Las ramificaciones de este tipo de almacenamiento de datos está causando indignación entre los activistas de las libertades civiles, ya que no está claro cuáles son los límites de esta transmisión de datos.
¿Los datos sólo se utilizarán para ayudar a localizar vehículos robados? ¿O se utilizarán para encontrar a sospechosos? ¿Serán utilizados finalmente para controlar los movimientos de ciertos ciudadanos?
Este tipo de políticas de control masivo, pronto podrían extenderse a otros lugares del mundo…
