Reportaje de Alícia Ninou y Octavi Piulats.

Sant Onofre y Sant Joan, dos ermitas que siempre estuvieron unidas entre ellas. Una puerta y unas escaleras las comunicaban. A principios del siglo XX se instaló entre ellas un restaurante del que actualmente sólo restan las ruinas.

Mientras de Sant Joan hoy en día sólo queda la capilla, Sant Onofre conserva su carácter troglodítico y se halla edificada en una balma abierta al vacío. San Juan Bautista fue posiblemente el maestro de Jesús y Onofre alude a un ermitaño que vivió en el siglo IV en el desierto de Egipto.

A nivel espiritual, San Onofre es una ermita adecuada para honrar al Sol naciente y poniente, puesto que está orientada hacia el sur y hacia el oeste. En especial, puede realizarse allí una meditación en el crepúsculo a Ra-Harakti, el Sol que tras vivificar a toda criatura desciende en el horizonte dando paso a las tinieblas.

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Alícia Ninou
TimeForTruth.es
Octavi Piulats
opiulats.blogspot.com.es
www.iniciacionamontserrat.es