El sistema de Bach ya tiene más de un siglo de andadura, a lo largo del cual ha cosechado fieles partidarios entre los seguidores de la Medicina Alternativa. Por supuesto, también existen acérrimos detractores, pero lo cierto es que muchas personas han logrado recuperar su equilibrio psicológico gracias a estas esencias florales.

Básicamente, este sistema se basa en una serie de esencias florales que concentran las propiedades curativas de las flores, cuya energía se emplea para balancear un desequilibrio, ya sea en el plano emocional o físico. Bach propuso 38 esencias, que se pueden administrar realizando diferentes combinaciones. Para encontrar la combinación adecuada es necesario realizar un diagnóstico profundo de la persona, en el cual no solo se debe tener en cuenta el trastorno y los síntomas sino también las características de personalidad.

Muchas personas, tanto los pacientes como los propios psicólogos y profesionales de la salud, se preguntan si existe evidencia científica que respalde el uso de las Flores de Bach. En este sentido, se debe puntualizar que se trata de un campo complejo ya que, al igual que otras técnicas psicológicas, como la hipnosis y la visualización, los resultados son controvertidos y muchas investigaciones carecen de la rigurosidad metodológica necesaria.

No obstante, un estudio llevado a cabo por químicos italianos en el año 1997 se propuso analizar el mecanismo de acción de las Flores de Bach. Estos investigadores apreciaron que al añadir unas gotas de Wild Rose en la solución, el efecto era similar al que se habría apreciado si se hubiera aplicado calor. Al contrario, al añadir Water Violet se produjo una forma beta que eliminó los restos de cloruro de sodio de la solución. Esto significa que, efectivamente, las esencias florales desprenden una gran cantidad de energía que provoca cambios en la solución.

Por supuesto, en el campo psicológico también se han realizado varios estudios. Uno de ellos fue llevado a cabo en el año 1995, en el hospital alemán Bad Urach, en 24 mujeres embarazadas cuyo parto se había retrasado. Así se pudo apreciar que las mujeres tratadas con las Flores de Bach no solo necesitaron menos medicación sino que también presentaron menos complicaciones, reportaron menos ansiedad y tuvieron un parto más fácil.

En el año 2001 investigadores del Sierra Health Institute administraron un remedio floral a pacientes que habían sufrido depresión durante más de cinco años. Al cabo de tres meses de tratamiento los niveles de depresión evaluados a través de pruebas psicológicas estandarizadas habían disminuido en más de un 50%.

No obstante, uno de los experimentos más interesantes realizados en este ámbito fue llevado a cabo por investigadores de la Scuola Triennale di Floriterapia, quienes le dieron un seguimiento a la terapia psicológica complementada con Flores de Bach. El tratamiento complementario no solo demostró ser eficaz sino que también proporcionaba antes los resultados. Aunque lo más sorprendente fue que las personas que no tenían gran confianza en el tratamiento lograron una tasa de recuperación mayor, del 95%, en comparación con el 86% de quienes confiaban en los efectos positivos de las flores. Se trata de una diferencia significativa que pone en tela de juicio el efecto placebo que siempre se le ha achacado a las esencias florales.

De hecho, otro estudio llevado a cabo en 116 personas a las que se les administraron las Flores de Bach concluyó que los beneficios de las mismas no se podían explicar únicamente por las expectativas de los pacientes y, por tanto, que era improbable que se tratara de un efecto placebo.

Obviamente, también existen varios estudios en los que no se han podido apreciar diferencias estadísticamente significativas en las personas que se han sometido a tratamientos con esencias florales. De hecho, al igual que ocurre con algunos medicamentos, es difícil determinar hasta dónde es eficaz el principio activo por sí solo y en qué momento se activa el efecto placebo. En este sentido, se ha llegado a afirmar que en algunos de los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina más populares el efecto placebo representa al menos el 64% del efecto total.

En mi experiencia clínica con las Flores de Bach he podido apreciar que estas esencias son ideales para complementar la terapia psicológica y contribuyen a obtener resultados en un periodo de tiempo más corto. Las esencias florales ayudan a equilibrar los estados emocionales y predisponen positivamente a la persona al tratamiento psicológico, brindándole la tranquilidad y estabilidad imprescindibles para emprender los cambios que necesita aplicar en su vida. Por otra parte, el Rescue Remedy es muy útil en casos de crisis, recaídas o situaciones de emergencia psicológica.

Además, se debe considerar que las Flores de Bach no tienen efectos adversos ni contraindicaciones por lo que, si ponemos su uso en una balanza, nos daremos cuenta de que tenemos mucho que ganar y prácticamente nada que perder.

No obstante, es importante tener en cuenta que para que las Flores de Bach sean eficaces se deben tomar 4 gotas 4 veces al día. También es fundamental que el psicólogo encuentre la combinación adecuada para cada caso, en esta terapia no valen los remedios de carácter general.

Las esencias de las Flores de Bach requieren una preparación minuciosa, que comprende desde el momento en que se recoge la planta hasta el proceso de destilación. Por eso, es mejor buscar un proveedor seguro, como Rivera Farmacia. Podrás encontrar kits profesionales con las esencias completas de las Flores de Bach, así como cada una de las esencias individuales con sus indicaciones.