En 2022, apenas dentro de seis años, y por la módica suma de 9 mil millones de euros (menos de lo que cuesta un portaaviones), podríamos establecer una pequeña colonia en la Luna.

“La gran ventaja – explica el astrobiólogo de la Nasa, Chris McKay – es que muchas de las tecnologías necesarias ya han sido desarrolladas y no tienen nada que ver con el espacio, tales como los vehículos autónomos o los baños con sistemas de reciclado de desechos. Todo esto resulta increíblemente útil en el espacio, y es lo que está reduciendo el coste de una base lunar hasta el punto que podría ser fácil de llevar a cabo”.

A esto se le une el uso de hábitats y materiales hechos con impresoras 3D, la irrupción de empresas privadas que llevan cargas al espacio o el éxito de Bigelow Aerospace desarrollando habitáculos inflables que simplificarían el proceso reduciendo la inversión de los programas espaciales.

¿Por qué la Luna y no directamente Marte?

De acuerdo con científicos de la NASA, nuestro satélite natural es un gran punto de partida para la exploración del espacio. Una colonia en la Luna podría ofrecer una estación intermedia perfecta para exploraciones a Marte, algo que la Nasa espacial espera poder hacer en 2030. El único obstáculo es el limitado presupuesto para ponerlo en práctica.

Sin embargo, el artículo escrito por McKay, Alexandra Hall y John Cumbers ypublicado en la revista New Space Journal explora la posibilidad de construir una estación en los cráteres del polo norte de la Luna, una región que recibe luz solar casi todo el año y la convierte en una candidata perfecta para alimentarse de energía solar. Debido a la presencia de hielo, también es un área perfecta para obtener agua utilizando robots y aprovecharla, también, como medio para obtener oxígeno y hasta combustible para cohetes.

El artículo de McKay observa, en una nota utópico: «Las actividades en este base de la luna se centran en la ciencia, como es el caso en la Antártida. Se podría proporcionar una presencia oficial del gobierno EE.UU. en la luna, y su motivación se arraigado en EE.UU. de nuevo la política nacional, como son las bases de EE.UU. antárticas. Una base lunar sería proporcionar una gama de tecnologías y precedentes programáticos de apoyo a una base de investigación de la NASA a largo plazo en Marte «.

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