La acusación está dirigida contra compañías constructoras, inmobiliarias y bancos privados.
Un grupo de palestinos afectados por las actividades genocidas de Israel ha interpuesto una demanda de 34 mil millones de dólares contra entidades norteamericanas e israelíes que apoyan los asentamientos ilegales en Cisjordania.
Según Middle East Monitor, el libelo fue presentado en la Corte Federal de Distrito de Columbia, en Estados Unidos.
Ayman Nejm, vocero de la firma Martin McMahon and Associated que patrocina la acción, dijo a Safa News Agency que el caso es el primero de su clase, ya que formaliza duras acusaciones contra ciudadanos ricos de EEUU y organismos exentos de impuestos que han entregado una ayuda enorme a las construcciones instaladas en territorios palestinos ocupados.
De acuerdo a la declaración pública difundida por los abogados, la demanda está dirigida contra compañías constructoras, de seguridad, agencias inmobiliarias y bancos privados involucrados en el crecimiento de los asentamientos.
Cuenta también con el apoyo de Susan Abulhawa, una prominente escritora palestina, y el activista Bassim Tamimi, quien ha sido encarcelado y torturado en múltiples ocasiones.
“El demandante Doaa Abu-Amar perdió a catorce miembros de su familia cuando una bomba israelí explosionó un centro de cuidados utilizado como refugio luego de la invasión de Gaza de 2009. El demandante Ahmed al-Zeer quedó permanentemente parapléjico porque fue severamente golpeado por colonos que lo atacaron dentro de su propiedad, a las afueras del asentamiento de Ofra”, reza el comunicado citado por Middle East Monitor.
“Muchos de los demandantes han visto asesinadas a las personas que amaban, niños asaltados y asesinados camino a casa desde sus escuelas, negocios destruidos, tierras arrebatadas, suministros de agua y ganado envenenados, olivos destruidos y el sufrimiento de varias heridas físicas, pérdida de visión, amputación de piernas y daños permanentes”, agrega.
Prominentes multimillonarios pro-asentamientos como Sheldon Adelson, Irving Moskowitz y John Hagee son los demandados. Entre las entidades que se mencionan está Christian Friends of Israeli Communities y Friends of the Israeli Army.
Éstos, según el texto, han “cometido crímenes de guerra porque han colaborado con violentos colonos, personal del G4S y soldados israelíes en el asesinato de miles de civiles palestinos”. También se les involucra en “lavado de dinero, porque intencionalmente enviaron fondos al extranjero para promover actividades criminales como la limpieza étnica y el tráfico de armas”.
Algunas de las corporaciones estadounidenses demandadas, junto con los bancos israelíes Leumi y Hapoalim, son las compañías internacionales de construcción Africa Israel Investments, Veolia y Volvo, además de la citada firma de servicios de protección británica G4S.
Fuente: El Ciudadano – Chile