Por BWN Argentina
El día 21 de Mayo del 2016, ciudadanos de las mayores capitales del mundo y otras ciudades, marcharan juntos contra Monsanto. La razón de esta protesta mundial no es ideológica. Miles de estudios de investigación científica han demostrado que los alimentos genéticamente modificados de Monsanto conducen a graves problemas de salud, tales como el desarrollo de los tumores, cáncer, infertilidad y defectos de nacimiento. Los pesticidas de esta corporación son aún mucho peores.
En los Estados Unidos, la FDA, el organismo encargado de garantizar la seguridad alimentaria de la población, es dirigido por “ex” ejecutivos de ex-Monsanto, lo cual supone un conflicto cuestionable de intereses y explica la falta de investigación de los gobiernos sobre las consecuencias a largo plazo de consumir productos transgénicos.
Gracias a la permisividad de FDA, los CDC, y la OMS, que son organismos de influencia mundial, muchos gobiernos del mundo tienen “excusas” para realizar pactos oscuros con Monsanto.
Los medios de comunicación desinforman sobre Monsanto, dado que el 96 % de los medios de comunicación mundiales comparten propietarios con Monsanto.
Recientemente, el Congreso de EE.UU. y el presidente “pasaron” colectivamente la llamada “Ley de Protección de Monsanto” que, entre otras cosas, prohíbe los tribunales detener la venta de semillas genéticamente modificadas de Monsanto.
Hace poco tiempo, la Justicia de Argentina prohibió a Monsanto patentar semillas en nuestro país. Y también, anuló “la clausula Monsanto” que permitía a la corporación funcionar como una policía, AFIP y Justicia paralelas atropellando a las instituciones de la Patria.
Sin embargo, las tasas de cáncer siguen aumentando, como los ACVs, la infertilidad y muchas otras condiciones médicas, no sólo en los campos aledaños a los cultivos sino en todo el país.
Durante demasiado tiempo, Monsanto fue y sigue siendo benefactor de subsidios corporativos y favoritismo político. Los pequeños productores orgánicos sufren pérdidas, mientras Monsanto sigue forjando su monopolio sobre el suministro mundial de alimentos, incluyendo derechos de patente exclusivos sobre las semillas y composición genética.
¿Por qué el mundo es como es?
Porque si no fuera como es, no estaríamos aquí para verlo.
¿Que está haciendo Monsanto a la Naturaleza?
Monsanto está mutando genéticamente la vida.
Monsanto, es una empresa privada que condiciona la evolución.
Monsanto compromete el mecanismo de supervivencia del más apto porque los ciudadanos de la Tierra no están informados.
Las semillas transgénicas de Monsanto son perjudiciales para el medio ambiente; por ejemplo, los científicos han indicado que ocasionan el colapso de colonias de abejas a nivel global.
Todos los animales sobre la faz de la Tierra tienen productos de Monsanto en la sangre. Incluyendo a los pingûinos de la Antártida.
Los pesticidas de Monsanto contaminan las napas de agua subterráneas, los océanos y se rocían con la lluvia, por lo cual ni siquiera las granjas orgánicas pueden ofrecer alimentos completamente libres de químicos de Monsanto.
Descubrieron que la Gran Barrera del Coral está siendo destruida por el glifosato de Monsanto.
La jungla del Amazonas, pulmón de La Tierra, está siendo reemplazada por cultivos transgénicos.
¿Cuáles son las soluciones?
Comprar alimentos orgánicos para favoreces a los productores orgánicos.
Boicotear las empresas que utilizan transgénicos y pesticidas en sus productos.
Pedir al gobierno el etiquetado de productos transgénicos para que los consumidores puedan elegir o estén informados.
Solicitar la derogación de cualquier disposición que beneficie a Monsanto por sobre la salud de los ciudadanos.
Continuar informando al público sobre “los secretos” de Monsanto.
Salir a la calle para mostrar al mundo y a Monsanto que no vamos a tolerar injusticias en voz baja.
No tolerar el amiguismo.
No aceptar el veneno.
Por eso este 21 de Mayo se Marcha Contra Monsanto
https://periodismo-alternativo.com/2016/04/25/el-21-de-mayo-del-2016-el-mundo-marcha-contra-monsanto/