Desde el lunes a las 19 horas hasta el miércoles a las 8, los trabajadores de la SNCF (Sociedad Nacional de Ferrocarriles Franceses, por su siglas en francés) han estado en huelga. Un convenio colectivo que permita “mayor flexibilidad y competitividad” es el objetivo de los responsables de las empresas ferroviarias francesas. Y el motivo de este paro nacional de 37 horas convocado por los sindicatos CGT, Unsa, SUD, CFDT y Fuerza Obrera. Solo un TGV (Tren de Alta Velocidad, por su siglás en francés) de cada dos circula este martes. En dos líneas de cercanías y en los trenes de media distancia solo circula uno de cada tres.

El convenio instalará un nuevo régimen de trabajo para los ferroviarios. Supone un aumento del rango horario, un límite de 10 días de descanso, una rebaja de 14 a 13 horas de descanso mínimo entre turnos y la posibilidad de modificar de los horarios de trabajo con una hora de antelación, entre otras medidas, según los huelguistas. El objetivo del presidente de la SNCF, Guillaume Pepy, es que “cada hora pagada sea una hora productiva”. Actualmente, un trabajador es indemnizado por su tiempo de trayecto hasta el trabajo. La dirección pretende acabar con este gasto.

El seguimiento de la huelga según la SNCF es del 23,9% frente al 50% que estiman los sindicatos. Un paro con menos seguimiento que el ocurrido el 9 de marzo: 35,5% para la SNCF, 60% para los sindicatos. La movilización cuenta con el apoyo de la Coordinación Nacional Estudiantil. Un cortejo de universitarios y ferroviarios de los sindicatos CGT y SUD ha partido desde la estación de Austerlitz, ha cruzado el río Sena y continuado en la estación de Lyon. El centenar de personas ha acabado en La Défense, barrio de negocios, donde tienen lugar las negociaciones entre representantes sindicales y de la SNCF. El 10 de mayo hay prevista una manifestación y podría convocarse una huelga indefinida hacia mediados de mayo, semanas antes del comienzo de la Eurocopa de fútbol.

Este es un nuevo conflicto laboral apoyado por los estudiantes, que abogan por la convergencia de luchas. Trabajadores intermitentes que alternan períodos de trabajo con otros de descanso han ocupado el emblemático teatro del Odeón, con el apoyo de estudiantes y la Nuit debout. Una nueva movilización conjunta de estudiantes y sindicatos contra el proyecto de reforma laboral tendrá lugar el 28 de abril e incluirá huelgas sectoriales.

Fermín Grodira | Público

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