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Un presidente de una mesa electoral en España describe su increíble experiencia durante el recuento de votos en las elecciones generales españolas.
Christian Avilés, presidente de una mesa electoral en Barcelona (noreste) durante las elecciones generales del 26 de junio en España, es el supuesto autor de la carta –que ya se ha vuelto viral en las redes sociales– en la que relata su indignación y asombro por la falta de control sobre el recuento de votos, responsabilidad que recae sobre los responsables de la mesa.
La misiva, que pone muy seriamente en cuestión la manera en que se recogen en España los votos en los comicios generales, cuenta varios ejemplos claros de la negligencia y falta de rigor con el que se procedería en algunas mesas electorales, sobre todo en muchas localidades pequeñas y muy poco pobladas.
He alucinado con las enormes fallas del sistema, si hubiera querido, yo mismo hubiera alterado los resultados. A la hora de la verdad, el control es mínimo», confiesa indignado Christian Avilés, un ciudadano que ejerció de presidente de mesa durante las elecciones generales españolas el pasado domingo.
«He alucinado con las enormes fallas del sistema, si hubiera querido, yo mismo hubiera alterado los resultados. A la hora de la verdad, el control es mínimo», confiesa Avilés en una publicación de Facebook.
Primero cuenta su estupefacción ante la respuesta de la responsable de la Junta Electoral, a quien al advertirle que faltaban un par de votos que no aparecían tras haber realizado el recuento, afirmó que «eso es normal, nunca cuadra». El apoderado del Partido Popular (PP) insistió después en declarar los votos que faltaban como votos en blanco, «vamos, lo que se hace siempre».
Al firmar el acta (que posteriormente se entrega a los juzgados) todos esos votos «van a la basura», le aseguraron. «¿Cómo? ¿No los tengo que llevar al juzgado escoltado por la policía?», preguntó Avilés.»Claro que no, tú a los juzgados llevas solo las actas con los resultados finales».
«Ahora entenderéis mejor por qué gana las elecciones un partido corruptoy por qué no quieren hacer que el voto sea electrónico (sería mucho más barato, sí, pero demasiado fiable)», reflexiona al final de la carta el ciudadano barcelonés.
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